PERFORMING ARTS.

XXXII

-Hola, bienvenidos, adelante, pasen.- dice Rachel desde el marco de la puerta de la habitación.

Increíblemente Adam insistió en que viniéramos a conocer la familia de Jonatan, quizás el hecho de que Jonatan tenga una familia hace a Adam sentir mejor porque ya no lo considera como una amenaza.

Quizás hasta puedan llegar a ser amigos, ayer por la noche le conté vagamente lo que Jonatan significa para mí y cómo ha sido uno de los grandes pilares de mi vida, como siempre me ha dado fortaleza para continuar y como siempre me enseñó a enfrentar los problemas de frente formando parte de mi personalidad y de la de Violet a la vez.

-Les presentaré a los mellizos, vengan por aquí.- dice -Jonatan no tardará en llegar.-

-Aguarda, aguarda.- digo. -¿Mellizos?- pregunto.

-Así es.- responde sonriente. -Tienen 5 meses de nacidos.- añade.

-¿O sea que hace 5 meses estabas embarazada y ahora tienes ese cuerpo?- digo asombrado.

-Ejercicio y no comer lácteos.- responde riendo mientras nos guía hasta un rincón de la habitación donde hay dos cunas, una frente a la otra.

-Él es Michael.- dice descubriendo uno de los bebés.

-Es precioso.- dice Adam junto a mí.

-Y ella es Hillary.- dice guiándonos hasta la otra cuna.

-¿Hillary?- pregunto sorprendido.

-Lindo nombre, ¿No?-

-¿Te ha dicho alguna vez en honor a quién?- pregunto.

-No.- dice tomando unos cabellos que descansan en su frente y enviándolos detrás de sus orejas. -Pero supongo que es alguien de la familia, realmente nunca habla sobre su familia salvo su madre y tú.-

-¿Tú sabes?- me pregunta con genuina curiosidad escrita en sus ojos luego de unos segundos.

Yo asiento.

-Su hermana.- digo seco, pasando el nudo que se forma en mi garganta y regresando a la cuna de Michael para evitar más preguntas.

-Oh, no sabía que tenía una hermana.- responde agachando la mirada.

-Vaya, sí vinieron. Bienvenidos- dice Jonatan entrando a la habitación.

Adam lo saluda sacudiendo su mano y yo lo saludo con un abrazo.

-¿Ya vieron a los niños?- dice.

-Sí, están hermosos, creo que es lo único bueno que has hecho en toda tu vida.- digo y Jonatan me empuja levemente con su hombro mientras ríe también.

-¿Y tú qué?, ¿Sigues siendo novio de Sam?- pregunta Jonatan provocando que las cejas de Adam se junten de inmediato y me dedique una mirada de pocos amigos.

-Sabes que nunca fuimos nada, solo somos amigos.- respondo.

-Mm, no parece.- responde riendo.

-Lo haces a propósito.- dice Rachel riendo junto a él.

Después de un lapso de tiempo en el que hablamos de cómo se conocieron, cómo se enamoraron y cómo tomaron la decisión de estar juntos Jonatan sirve otra copa de champaña y dirige su penetrante mirada directamente a mí

-Bien, dime, ¿Cumpliste todos tus sueños?-

Y mientras tomo un sorbo de la copa pienso en que he logrado mucho con mi vida desde la última vez que ví a Jonatan, pero que a la vez tengo aún muchas cosas por lograr y una meta principal por cumplir.

-No.- responde Adam dando un sorbo a su copa, dejándome perplejo por no saber cómo continuar.

Jonatan lo mira con cara curiosa levantando una ceja lo que Adam interpreta como una señal para continuar.

-Aún no, y está bien admitirlo.- dice mirándome. -sólo que es muy orgulloso como para confesarlo.-

Y mi cabeza baja a mirar al suelo porque Adam tiene razón y me da vergüenza que exponga uno de mis defectos frente a otros.

-¿Y qué sueño te falta?, Yo creo saber cuál es y pienso ayudarte a lograrlo.- dice Jonatan tomando por completo mi atención.

-Quieres un show, ¿No?- dice.

Pero yo no respondo, entonces Adam lo hace por mí una vez más.

-Sí. Quiere su propio show.-

-Hey, mírame.- dice Jonatan -Prometí enmendar lo que hizo mi familia, ¿No es así?-

Otra vez no encuentro fuerza para responder, porque siento que no es su responsabilidad y que él no debería ser quien se encargue de enmendar mi pasado.

Es que nadie debería encargarse en enmendar mi pasado excepto por mí y la forma en la que lo veo.

-No puedes hacerte cargo de responsabilidades que no son tuyas.- respondo. -El daño ya está hecho, y no eres tú quien debe arreglarlo.- añado.

Y Jonatan ríe.

Típica respuesta de Jonatan en un momento como éste.

Siempre siendo impredecible.

-Es que tú aún no lo entiendes.- dice -Cuando descubrí a mi hermano, y todo lo que hacía, todo lo que te hacía, decidí hacerme cargo de ti y de tu seguridad, fuera como fuera.- se levanta del sillón y empieza a caminar por la sala principal con la copa en su mano mientras desabrocha algunos botones del saco de su traje. -Decidí cuidarte como a un hermano.- se detiene y pone su mano libre en su cadera mirándome fijamente. -Para mí eres un hermano.-

Vuelve a reír.

-Y lo importante de eso es que me diste las dos cosas que me hacían falta en mi familia.- continúa, mordiendo un poco su boca casi como si estuviera conteniendo emociones. -Fuiste mi hermano y a la vez mi hermana.- ríe irónicamente. -¿Cuántas personas tienen esa dicha?, Dime. ¿Cuántas personas pueden decir que tienen un hermano y una hermana en la misma persona?.-

Rachel se levanta y le da un abrazo, dejando descansar su cabeza sobre su pecho mientras Jonatan sube su mano libre hasta su cabello y la acerca más a su cuerpo.

-Y lo único que quiero para mis hermanos, es que sus sueños se cumplan.- apunta hacia mí con la copa en su mano -Así que tú, querido amigo, querido hermano. Tendrás tu propio show, eso te lo aseguro.-

Y honestamente no me quedan palabras; no las encuentro.

-Empezaremos de inmediato.- dice con una voz un poco más determinada -¿Dónde quieres el show?- pregunta y luego ríe y se responde a sí mismo. -en Las Vegas, claro.-

Rachel se separa de él y entra a la habitación de atrás para luego regresar con una computadora en sus manos.

-Buscaremos un buen sitio en alquiler.- dice. -Y tú ve preparando tu show.-

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