Primer amor: Agridulce

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Capitulo: Dispersos. 

Llevaba un rato corriendo, se había separa del resto, unos cuantos hombres vestidos con oberoles la siguieron, sus demoledores puños sin nada de piedad, los dejaron prendados en las paredes, formando parte de ellas, Sarada les quito las mascaras de gases que llevaban puestas, no le gustaba para nada verlos con ellas puestas, según el informe que redacto Kagura y el sensei Konohamru no hablaba nada de gas, ni somnífero, ni toxico de ningún tipo aéreo. Se movió con sigilo, y entro a una habitación que operaba como sala de control, las cámaras de las áreas por donde había estado el otro equipo estaban inutilizadas, sabia que había sido obra del sexto. 

Ajusto sus guantes y busco cámara por cámara la ubicaciones de sus amigos, al dar con ellos, golpeo el panel central de cámaras, agrietando el metal, las pantallas exploraron en un montón de cristales pulverizados, y desapareció de allí en un rayo de electrizad negro. 

Ino estaba liderando el equipo, y la primera en detectar el uso de las mascarillas de gas, alcanzo dar el grito de alerta antes que el humo se dispersará por toda la estancia, ella consiguió dos mascaras, y gracias a sus habilidades dio primero con el mayor, Konohamaru estaba con un pañuelo mojado en la boca y nariz. La ninja le entrego la mascara sobrante que llevaba. 

—Le perdí la pista a Boruto. 

—Esta cerca, está con el otro chico. 

Mitsuki uso una técnica de Fuuton kamaitachi y despejo el corredor donde estaban para quitarle las mascaras a los secuestradores, se quedo con una, Boruto se hizo de la propia, el rubio recién en este punto se dio cuenta que Sarada no estaba con ellos. 

—¿Sarada?— se volteo inquieto buscando a la chica —¡Sarada!

—Cálmate, viene en camino, se separo de nosotros cuando nos persiguieron— Mitsuki uso Raiton para destruir las mascaras de los enemigos que estaban en el suelo —no deberías gritar, o atraerás un pelotón— le advirtió antes que volviera a gritar. 

—Esta sola, me estoy preocupando— y su lenguaje físico decía exactamente lo mismo —estos imbéciles tienen veneno ¿qué si le pasa?

—Tienes que confiar que estará bien, es Sarada, ella tiene tres antídotos en caso de una emergencia— empujo a Boruto para que fuera primero, apretó la mandíbula y los puños hasta que sangro, estaba tanto o más preocupado que Boruto pero no podía dejar sucumbir al pánico. 

El lugar era como un condenado laberinto, a medida que pasaban más tiempo allí, iban perdiendo el sentido de la orientación, los pasillos eran iguales, las habitaciones tenían los mismos implementos, olores y colores, habían muy pocas cosas diferentes que servían como puntos de ubicación, Boruto dio un brinco cuando vio a la señora Yamanaka, ella los había detectado, así mismo Mitsuki quien había dirigido a Boruto por el camino más corto para reunirse con el sensei y la jounin. 

—¡Demonios! ¿dónde esta el norte?— Mitsuki se dio vuelta y indico. La rubia trato de orientarse ahora que sabían donde estaba el norte. —No siento a Sarada, y eso que es mi especialidad. 

—Sabe como volverse in detectable— dijo Boruto, siempre había estado muy impresionado por ello, salvo por esta oportunidad, ella estaba haciéndose invisible para ocultarse también del enemigo. 

Konohamaru estaba siendo atendido por Mitsuki ya que el había inhalado una buena cuota de gas, pero no tardo mucho en sentirse mejor. —Este chico es muy bueno detectándola. 

Sarada llego al punto donde los había visto en las cámaras, vio unos sujetos inconscientes casi sin chakra, esto lo había hecho Ino-san, y algunos abatidos por Konohamaru-sensei, escucho varios individuos venir, uso el jutsu de trasformación y se tiro al suelo, el grupo paso y reviso las condiciones de alguno de los que estaban tirados.