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Finn llegó lo más que pudo al trabajo y rápidamente corrió hacia la cafetería mientras colocaba bien su uniforme.

-Has llegado Justo.-rio su compañera de trabajo.

-No importa Millie, de todas formas no habías abierto aún, ¿cierto?

Yo soy la que hace el café, tú eres el camarero,¿cómo crees que podría abrir si no había alguien que atendiera?

-Yo quisiera hacer el café pero se me da fatal y seguro me quemaría-rio el azabache y la castaña respondió con una sonrisa.

-Vamos a empezar a trabajar tonto.-dijo Millie mientras se colocaba bien su uniforme.

Finn río por última vez y se dirigió a cambiar el cartel de "cerrado" a uno de "abierto".

Rápidamente vio como el mismo grupo de chicas de todos los días aparecían allí.

Con pesadez fue a su mesa para tomarle pedido.

-¿Que les gustaría tomar?-murmuró tratando de sonar lo más simpático que pudo aunque fue inútil.

-Tomaré un capuccino...-dijo una de ellas y así continuaron las demás mientras Finn tomaba nota.

Autismo ; FackDonde viven las historias. Descúbrelo ahora