Una vez que se pusieron cómodos mi profesor se acercó a mi, se sentó a un lado y comenzó a besarme, mies tras me besaba comenzó a acariciar mis pechos pues era lo que por dos grados había estado esperando, de repente se acercó el otro profesor y comenzó a acariciar mi vagina sobre mi ropa, se sentía tan bien, de repente me aleje de mi profesor y acerque mi cara con el otro para besarlo también, mi profesor comenzó a subirme la blusa y dejó al descubierto mi pecho, comenzando así a chupar mi pezon, yo estaba muy exitada ya, me separe del otro hombre y me puse de pie, entre los dos me desnudaron, y seguían besándome y tocandome, me volvieron a sentar y entonces mi profesor sacó su pene y acercó mi cabeza para que le hiciera sexo oral, lo hice mientras el acariciaba mi pecho, el otro hombre se agachó y comenzó a juguetear con mi vagina, primero con sus manos y después con su lengua, se sentía tan bien, después se levantó y acercó su pene también así que cambié y le hice sexo oral a él mientras que con mi mano tocaba el otro pene, después me acomodaron sobre la cama, me pusieron a gatas y seguí haciéndole sexo oral al otro profesor, mientras tanto mi profesor se acercó y comenzó a hacerme sexo oral a mi, al mismo tiempo me acariciaba y de repente comenzó a penetrarme, al hacerlo me dijo - te gusta? Dime si profesor- y yo claro que respondí - si profesor-
Me seguía penetrando con mucha fuerza, se sentía muy bien, me gustaba tenerlos a ambos, después cambiaron de lugar, el otro profesor se puso detras y mi profesor por delante, comencé a chupar el pene de mi profesor mientras que el otro me besaba y acariciaba la vagina y el trasero, hasta que comenzó a penetrarme, después me voltearon poniéndome boca arriba en la cama, y seguimos, mientras yo le hacía sexo oral a uno el otro me penetraba, y mi profesor también jugueteaba con mis pechos, así duramos un rato, hasta que ambos terminaron, al terminar yo me levante y me metí en el baño mientras ellos se quedaban descansando, al salir del baño, aún desnuda solo con una sabana envuelta, me preguntaron si me gusto, les dije que si, prometimos nunca hablar de ello con nadie para no meterse en problemas, antes de irnos juguetear on un poco conmigo de nuevo, tocandome, pidiéndome que les mostrara los pechos o que abriera las piernas, me daban nalgadas o apretaba mis pezones, me trataban como si fuera su juguete, y la verdad creo que eso es lo que fui, solo su juguete aunque claro yo también me divertí.
Salimos de ahí y me llevaron a casa, nos despedimos y no nos volvimos a ver.
Si hablamos algunas veces pero por una u otra razón ya no nos volvimos a encontrar. Me gustó cumplir esa fantasía pero aún me quedaban muchas otras, ya había estado con dos hombres, pero, que se sentiría estar con un hombre y una mujer? O que se sentiría estar con una mujer? O como sería estar con más de dos hombres a la vez? En fin, esta experiencia me hiso recordar lo mucho que me gustaba el sexo y las ganas que tenía de probar cosas nuevas.
Pero de una u otra manera siempre había algo que me impedía experimentar, los prejuicios, el hecho de que todo el mundo a mi al rededor parecía pensar diferente, la sociedad en fin, aunque el amor también me detenía cada vez que volvía a mi vida y en esta ocasión no sabía todo lo que trairia consigo.
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Confesiones de una chica cualquiera
FantasyUna historia llena de desamor y sexo en la que una chica narra su travesía de cama en cama buscando algo que ya veremos si logró encontrar o no.