Mi Amado Idol

Orange Phoenix regresa bebé

-¿Y bien?-el castaño que se encontraba jugando golf no se molesto en ver a los recién llegados-¿Qué los trae aquí?-preguntó balanceando el palo en dirección a la pequeña pelota blanca.

-Oikawa-san tenemos que hablar-declaró el peli-celeste con una mirada inexpresiva.

-¿Sobre- ¡Hoyo en uno!-exclamó cuando la pelotita cayó en un vaso descartable.

-Él ya se movió-informó Kuroko mirando al castaño.

*Crack*

Resonó en la habitación, el estruendoso ruido del cristal al romperse, tras haber recibido un pelotazo.

-Pobre ventana-murmuró Himuro mirando de reojo el hueco de la ventana.

-¿Qué? No no no, aún es pronto-negó el castaño dejando el palo metálico y llevándose su puño derecho cerrado a la boca.

-Sería bueno alejarlo Oikawa-san-opinó Tetsuya.

-No será fácil, no con ellos sobre él-recordó Tatsuya.

-Ai-el castaño se había acercado al teléfono que lo comunicaba con su asistente.

-/¿Si Oikawa-san?/-la voz del muchacho se escucho al otro lado del teléfono.

-Llama a Sawamura y dile que adelante la filmación en la casa de la montaña-ordenó con una mirada sería.

-/¿Pa-para cuándo?/-preguntó sorprendido.

-¡Para ayer!-exclamó antes de cortar la comunicación.

-Oikawa-san, no quiero cuestionar tu actuar, pero, no crees que estas exagerando-musitó Kuroko, cuando dijo que lo alejara, se refería a darle unas vacaciones en su casa, quizás al campo, NO A UNA PUTA MONTAÑA.

-Mientras más lejos este de Ushijima Wakatoshi, mejor-sentenció con una expresión sería.

-Coincido con Tooru, Tetsuya-secundó el azabache.

-Pero...-murmuró indeciso.

-¡Sin peros Fantasma-chan!-exclamó el castaño.

-Ahhh, hagan lo que quieran-se rindió el peli-celeste.

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-¿Qué se sentirá ser un gato?-preguntó a la nada el teñido acariciando las orejas de Shiro.

-Miau-el tricolor se froto contra su mano en búsqueda de más mimos.

-Esa pregunta siempre me quita el sueño-comentó con sarcasmo el azabache.

-Debe ser genial-ignoró las palabras de su pareja y siguió con su monólogo-no hacer nada en todo el día, dormir entre montículos de ropa, dejar pelo por doquier, sin bañarse.... si suena genial-declaró con su vista fija en el felino.

-Gatito mugroso-Tetsuro le pellizco la nariz antes de acercarse a besarlo, cosa que no permitió el rubio colocando sus manos en los hombros ajenos-no te preocupes, Sakura salió por trabajo-susurró antes de reclamar los labios ajenos.

*Ding Dong*

-Yo voy-anunció Kenjiro.

-Kuroo ¿Dónde dejaste la pimienta?-preguntó Daishou desde la cocina.

-Sal de mi cocina serpiente-exigió el mayor acariciando el cabello de su pareja.

-¿Para qué quieres pimienta?-preguntó Keiji mientras jugaba con su teléfono.

-Vi en internet una receta increíble para cuidar la piel ¡Oh!-respondió desde la cocina con la cabeza metida en una de las alacenas-¡La encontré!-anunció alegre.