Había decidido no contarle a Cayden lo que Meredith le había mostrado. Tenía que ser cautelosa, no confiar a la ligera. La bruja que maldijo a su amigo podía ser la misma que las perseguía a ella y a sus amigas. Por lo que desvelar secretos pondría a todos en peligro, no solo no iba a contárselo a Cayden, sino que sus amigas tampoco lo sabrían. Además, aún no sabían de la existencia de Cayden. Solamente lo sabía una persona, Brenda.
De camino al instituto había visto como la gente estaba decorando prácticamente todas las calles con adornos de Halloween. Al pueblo de Dembourne le encantaba celebrar todas las fiestas, especialmente la noche de los muertos y la Navidad. Por supuesto su padre el alcalde sabía del interés de la gente, y no reparaba en gastos para decorar el pueblo con el más mínimo detalle. Y si las calles de Dembourne estaban siendo decoradas, por supuesto el instituto no podía ser menos. Los alumnos encargados de los actos oficiales y algunos profesores estaban subidos en escaleras, convirtiendo la fachada del edificio en terroríficas paredes llenas de telarañas. Si normalmente el instituto ya parecía tremendamente terrorífico ahora lo parecía más.
—Creo que mañana por la noche va a ser muy divertido. Noche de Halloween. —dijo Rosé con una sonrisa.
—Ya pues, Halloween me encontrará en casa, en pijama y viendo una película mientras como palomitas.
—Ya veo, estoy ante una joven aburrida.
—¡Bingo!
Ambas rieron.
—Que vaya bien el día. —se despidió y se encaminó hacia la entrada del instituto, rodeada de calabazas con caras espeluznantes.
Los pasillos eran más de lo mismo, telarañas por todos lados, arañas de plástico y banderitas con la palabra Halloween en ellas. Se acercó a su taquilla y vio un papel colgando de ella, observó las demás taquillas, la suya no era la única con aquel cartel.
"¿Te vas a perder la mejor noche del año?
Acércate a Brewhouse y vive la fiesta de Halloween. Tenemos sorpresas espeluznantes.
Te esperamos mañana por la noche, estás invitado.
—¿Vas a ir? —Brenda acababa de aparecer con otro papel de esos en la mano.
—Paso.
—Venga, va a ser divertido. —dijo haciendo pucheritos.
—Tenemos que ir. —Claire y Amanda llegaban hasta ellas cargadas de libros y con sus respectivos papeles de la fiesta.
—¿Tú también Claire? Pensaba que no te molaban esas cosas.
—Y no me molan, no me molan nada. Pero... —la rubia le entregó otro papel que no era el de la publicidad de la fiesta, más bien parecía una carta.
Victoria la cogió entre sus manos, Brenda se acercó para leerla también.
¿Jugamos?
Toc toc
¿Quién es?
La bruja de Halloween os saluda. Encontradme si podéis.
Esta fiesta parece divertida.
—Estaba en mi buzón, dentro del sobre estaba esto. —Claire les enseñó el papel de la fiesta, doblado por la mitad para que pudiera caber perfectamente en el sobre.
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LAS BRUJAS DE VILLA MARIE
FantasyPARTE UNO Victoria una joven aparentemente normal llega a la ciudad donde nació después de la muerte de su madre. En Dembourne el pasado y una cruel maldición la persigue a ella, a su familia y a sus amigos. Tendrá que enfrentarse a una enemiga mor...