dieciséis

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Maratón 1/5

Un hormigueo repentino había recorrido su lomo mientras corría por el extenso bosque.

Al final, optó por vigilar de todas formas el territorio. Debía despejar su mente, nunca antes había estado en un ambiente tan tenso. Eso porque el haber conocido a Kihyun lo ponía de esa forma. ¿Y qué decir? Las ganas de que el chico no quisiera entablar conversación alguna con él eran notables.

Quería escudriñar bajo la piel de ese joven, y hasta hace un rato atrás, quería comérselo todo.

El hormigueo volvió a aparecer. Alertandolo de algo que no era bueno, al menos no para él de cierta forma. Y se halló unos segundos después, echado sobre el húmedo pasto observando la mansión. Entonces vió cómo la puerta principal de esta se abría con brusquedad y luego volvía a cerrarse. Quizás era uno de los chicos por lo que no se limitó a observar solamente hacia allá.

Olfateando el aire, para capturar algún intruso tal vez, pero no... lo que su olfato captó fue el delicioso y único aroma de Kihyun. Embobando su raciocinio. Las ganas de devorarlo nuevamente regresaron a su lobo, estaba desesperado, y cuando vió que el chico iba caminando fuera de la salida de la Finca, se alarmó.

O estaba escapando o estaba realmente escapando. No había otra explicación porque el chico básicamente iba corriendo.
Le sorprendía no verlo temblar, la noche estaba fría y él sólo traía un suéter, pantalones hasta las rodillas y unas pantuflas que pudo identificar como las suyas debido al gran tamaño.

No quería que se fuera, pero tampoco quería asustarlo. Estaba en su condición de lobo, y en cualquier caso, si vuelve a su forma humana  regresaría totalmente desnudo. Eso también apaniquearía al chico.

Lo siguiente que hace es controlarse. Es un Alfa fuerte, por lo que aún sigue sorprendido de su falta de consciencia hace unas horas cuando había sentido el fuerte aroma de celo que cargaba Kihyun. Y no es que ya no lo cargue, porque aún a kilómetros, puede percibir y disfrutar de este mismo como si estuviera a sus espaldas.

A paso lento lo sigue, por entre los árboles, viéndolo con el ceño fruncido, como si estuviera pensando decididamente en algo. Más que sentirse preocupado por ello, le causó un cosquilleo en el pecho. Debía aceptar una vez más que Kihyun causaba muchas cosas que para él, hasta el momento, son auténticamente extrañas de sentir.
Enternecido con los brazos de Kihyun rodeando su propio cuerpo, se acercó un poco más.
Quizás ese había sido su error. Porque, tal parece, su gran distancia a Kihyun lo mantenía, por decirlo así, ignorante del cautivante aroma que expulsaba. Sus hormonas a mil que se acoplaban al oxígeno volviéndose un sólo aire el cual Hyunwoo ahora respiraba. Volviendolo sediento, eufórico, lleno de agravio por tenerlo.

Sus pupilas se dilataron hasta no dejar ver el azulado color natural de sus ojos. Sus enormes patas emprendieron una carrera hacia ese cuerpo que caminaba a orillas de la calle. Haciéndo entonces al propio Kihyun voltear y colocar un gesto de terror en su rostro.

Él... él había estado apunto de lanzarse sobre ese cuerpo, pero tal gesto lo detuvo.

Él no quería hacerle ningún daño a Kihyun, pero su lobo quería tenerlo y no dejarlo ir. Eso de todas formas no era tan malo desde cierto punto de vista. Sin embargo, en el intento de hacerlo suyo, le haría muchísimo daño. Por lo que ya a los pies de Kihyun se agachó como un lobo arrepentido. Y lo estaba, él en serio pretendía hacerle daño de manera sexual aún sin que él se lo permitiera.

ㅡCoño~ ㅡsoltó en un hilo de voz Kihyun, con el corazón en la manoㅡ ¡Maldición me has asustado!

Y al mirar hacia arriba, en verdad se sorprendió por lo que miraba.
Los ojos del chico llenos de lágrimas, estaba hipeando y una de sus manos estaba echa puño sobre su pecho.
Él lo había asustado y su lobo empezó a culparlo. Tenía tanta razón, pero estaba molesto por el hecho de que fue su lado lobuno el que lo impulsó a correr tras Kihyun.

Finalmente se paró sobre sus cuatro patas, quedando a la altura del pecho de Kihyun. Realmente era un Alfa grande, pero eso no era importante sino el hecho de que Kihyun no mostraba impresión. Ni siquiera la primera vez que lo vió en ese estado.

El chico seguía votando lágrimas, sus labios temblaban.
A su cabeza llegó la conclusión de que estaba así debido a la sensibilidad de su estado. Entonces lamió su rostro con cuidado, arrasando con las lágrimas. Muy a pesar de que se siguiera viendo tan hermoso aún llorando, Hyunwoo no quería ver una sola gota de estas sobre su rostro. Porque recordaban que era por su culpa la aparición de ellas.

Las manos de Kihyun pasaron a estar sobre los costados del cuello ancho de Hyunwoo.

ㅡ¿Por qué hueles a él? ¿Por qué todo es él? Ni siquiera lo conozco y viene de pronto a irrumpir mis pensamientos. ㅡsonaba desesperado. Reclamando.

¿De quién estaba hablando Kihyun? Por supuesto que de él.

Y para cuando pudo darse cuenta, el cuerpo del chico estaba colapsado sobre el suelo de la calle.

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N/A: Al final de la maratón va a haber cap especial 7u7 prepárense!

•Señor Alfa• [ShowKi] Omegaverse (EN CORRECCIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora