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» traición

— ¡que esta noche se celebra!

Dijo un conocido acento argentino desde la cocina con dos botellas en mano, Pedro hace unos ruidos que supuestamente deberían ser de celebración recibiendo una de las botellas, ese día ya se cumplían cinco meses de relación pero ninguno había querido salir así que aprovechando que Manuel tenía turno en la librería harían una especie de festejo mientras estuviera fuera y así no le incomodarían de más, sin embargo por algún motivo personal el dueño tuvo que cerrar mandando a los trabajadores a casa, lo que se encontró fueron las copas de la pareja alzadas y la mesa plagada de comida en platos, intentó pasar desapercibido e ir a encerrarse en su cuarto pero los dos particularmente amigables por el alcohol lo tomaron cada uno por un brazo sentándolo en una de las sillas, bueno, al menos le gustaban las papas fritas. La conversación pasó de unos "recuerdas cuando" a sugerir la idea de jugar verdad o reto, el par se la pasó poniendo retos estupidos entre si porque Manuel prefirió mantenerse al margen de la situación, ni siquiera había probado una gota de alcohol.
Al ver como se concentraban en los retos aprovecha la situación la escapar lo más disimulado de pueda, por mucho que la argentina intentará incluirlo se seguía sintiendo de más en una celebración, donde poco tenia que ver en la situación, lento pero constante logra escabullirse hasta su habitación y encerrarse en la misma, aún seguía escuchando sus risas a puertas cerradas.

Prendió la radio para mitigar sus voces y aprovecha para continuar con lectura con algún artista nacional que no reconocía de fondo, por suerte para su cabeza todo el tema relacionado con Pedro lo había cerrado, de que lo seguía queriendo de esa forma ocurría pero por fin había sentado cabeza dándose cuenta de lo absurdo de la situación, eso fue lo que le permitió estar tan tranquilo cuando los tres estaban sentados sobre la mesa, aunque... que a la próxima lo dejaran medio apartado de sus celebraciones, era muy incómodo sentir que sobrabas. Sacude la cabeza para concentrase en como el protagonista de la historia que leía sorteaba otro obstáculo para lograr su objetivo, se mantuvo ensimismado en sus aventuras hasta la madrugada.
Al darse cuenta de lo tarde que era sale de la habitación para ver como seguían los dos, habían dejado todos los paltos vacíos junto a una de las botellas, informa que saldría a fumar al último piso pero ambos parecen mas enfocados en abrir la segunda botella, mejor, así no lo incluirían una vez más a la mesa. Un cigarrito y a dormir.

La ciudad vista desde un piso dieciocho se veía muy diferente, podría describirlo como ver dos cielos diferentes en un mismo lugar, uno iluminado por las estrellas que se alzaban  a lo alto y el otro por las luces de las casad y calles, un espectáculo dispuesto para sus ojos.

— ¿es hermoso no?

La repentina voz de la argentina hace que se sobresalte, ni siquiera la había sentido llegar y ahora estaba a un costado suyo mirando las luces, respondió de forma vaga ofreciéndole un cigarro pero declinó con una sonrisa, ambos se mantuvieron en silencio un largo rato.

— no puedes ocultarlo ¿verdad?

— ¿a que te refieres?

— ¿recuerdas la última vez que hablamos nosotros dos? Ese día me quedaron dando  vueltas muchas cosas en la cabeza, ese mismo día también comprendí — guarda silencio un momento para mirarle — que tus ojos están mirando a alguien

Puso especial énfasis en la palabra "alguien", Manuel dio otra calada a su cigarro con calma antes de contestar.

— es un asunto superado — suspira — no tienes porque preocuparte

— no es eso, solo tengo... ¿curiosidad? Algo asi

— ¿de que?

— ¿por que nunca intentaste llegar a algo más?

Siendo sinceros, esa pregunta se había instalado hace mucho tiempo en su cabeza, estuvieron meses viviendo juntos sin contar todo ese tiempo que usaron para conocerse, Manuel cuando era un adolescente no podía evitar ponerse feliz al ver genuino interés en su persona, cosa que Pedro hacia a menudo. Todos esos momentos fortalecieron cada vez más el lazo que tenían y sin embargo pese a que le hubiera gustado sostener su mano nunca lo hizo, temeroso estaba de romper la barrera del amigo o enfrentarse a un rechazo, sabía que después de uno no podría volver verle a la cara de la vergüenza.

— porque... no se podía nomas

Ella deja las preguntas, siguieron mirando el cielo nocturno en silencio, acompañados por el ruido de las calles aún activas. Allí a merced de sus propios pensamientos se pone a meditar su situación, ya podía mantenerse por si mismo y un departamento visto en otra comuna, ya era hora de terminar con el abuso, pero aún así no quería marcharse, sería dejar a uno de los pilares más importantes en su vida, era dejar a quién le habían prestado apoyo incondicional, si, si estaba siendo muy alarmista como esos típicos amigos que lloraban al final del curso diciendo que ya no se verían más, ya eran adultos y tenían la libertad de hacer lo que quisieran, podrían sin problemas arreglárselas para juntarse en el horario de almuerzo o ir de noche a algún bar, aún así no sería lo mismo, era totalmente distinto despertar y tomar desayuno juntos, tardaría un buen tiempo en acostumbrarse a esa nueva rutina.
Quizás la mirada que tenía mientras pensaba había delatado cualquier cosa menos lo que aparentaba.

— vos no has superado a nadie

Tose un poco de la impresión.

— tal vez — deja caer el cigarro ya consumido al piso, pisándolo luego — aunque si es feliz, aunque no sea conmigo, estaré bien

— sos demasiado bueno Manuel

Pese a que la sonrisa de la argentina buscaba transmitir tranquilidad no pudo evitar sentirse culpable, seguía recordando lo ocurrido esa noche, finalmente no pudo ocultarlo más, con una mueca dirige la mirada hacia el piso producto de la vergüenza, para la confusión de la argentina. Le diría y así tendría la fuerza suficiente para marcharse, de paso dejar de interferir en su relación.

— ¿podrías perdonarme?

— ¿perdonarte que Manu? Es la segunda vez que vos me pides perdonarte algo que no sé

Respira profundo antes de decir.

— Pedro te... — se le escapa un sollozo — te engañó, conmigo

» heey
Adivinen a quien le quitaron el celu anoche por estar despierta a las cuatro de la mañana? :'D
Well, paso para informar que hoy me devuelvo a mi casita sin internet así que no podré actualizar pero como soy bakan igual me las voy a arreglar para tenerles capítulo los tkm <3

The angst challenge 『  MexChi 』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora