Capítulo 14: Nochebuena

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Sábado 24 de diciembre del 2016, 10:00 p.m.

Acapulco de Juárez.

  La música sonaba, la familia de Kevin; dos padres y sus tres hermanos, reían mientras conversaban con la madre de Nicole y los padres de Dafne. Todos en un ambiente mágico y cómodo.
  En la habitación más grande, Sofía, con un vestido rojo oscuro como la sangre, ayudaba a Nicole con su vestido negro.

  — Sofía... — balbuceó Nicole con demasiada pena.

  — ¿Qué pasa? — preguntó Sofía mientras ambas se miraban al espejo.

  — ¿Crees que Andy me diga algo lindo por mi vestido? — la voz de Nicole, suave y temblorosa, llegó a lo más profundo en la cabeza de Sofía.

  — Todos van a decir algo porque te ves hermosa. — respondió Sofía lo más tranquila que pudo.

  — Gracias. — sonrió Nicole.

  Ambas bajaron y todos observaron con asombro la belleza de las dos, en especial el vestido negro de Nicole y el peinado rojo de Sofía. Andy salió de la cocina acompañado de David y Johan, dejando una gran bandeja de pavo en medio de la mesa, ensalada y demás complementos que Leyva había cocinado casi por completo él solo.
  Amanda se acercó a Sofía, la chica rubia lucía un vestido ajustado de color plateado brillante.

  — Creí que tú harías la cena de esta noche. — comentó Amanda.

  — Así es. — dijo Sofía. — Pero Andy me pidió que él quería hacerla, en mi opinión, los hombres llegan a ser muy torpes en la cocina, pero debo admitir que Andy es un chef por naturaleza.

  — No lo creo. — sonrió Amanda observando a Andy servir los platos de manera fácil. — Jamás pensé que Andy era bueno en algo tan poco varonil, tiene mi respeto.

  — Yo tampoco sabía que Andy es bueno cocinando. — añadió Sofía.

  — ¡Increíble! — exclamó la madre de Nicole al probar la comida. — ¡¿Quién ha cocinado esto?!, hizo que un pavo simple fuera un manjar por completo...

  — Pues fue Andy. — dijo David en voz alta mientras todos reían y felicitaban.

  Leyva comenzaba a ruborizarse mientras algunos le aplaudían, tal vez era la primera vez que alguien lo felicitaba así, era bueno sentirlo de vez en cuando, ¿era bueno disfrutar algo de esa manera?

  — Muy bien. — le dijo David en voz baja a su lado. — ¿Lo ves?, tal vez debas cocinar más seguido.

  Andy sonrió y subió para cambiarse, sin notar que Sofía lo seguía, a su vez que Dafne los veía subir. Los siguió.
  El chico entró a la habitación que compartía con Sofía y empezó a quitarse el uniforme de chef que David le compró de regalo, le dejó en el borde de la cama, mirándolo y observando cada detalle.
  "¿Lo ves?, tal vez debas cocinar más", esas palabras se repetían. "Tal vez lo haga...", pensó Andy.
  Sofía llegó por detrás y rodeó la cintura de Andy con sus dos brazos, el chico giró para encontrarse con los ojos de la hermosa pelirroja.

  — En unas horas va a ser Navidad, tu cumpleaños. — le dijo ella acercándose hasta pegar su pecho con el de Andy. — No sé si pueda darte mi regalo después, supongo que te lo debo dar ahora, ¿no?

  La chica lo besó de manera lenta, pero Andy intentaba irse de manera discreta. Sofía lo empujó ligeramente en la cama y se subió hasta sentarse con las piernas abiertas en su regazo, besándolo de la forma más adulta que podía, pero Andy no correspondía.

  — Te acabas de poner el vestido no creo que... — intentó excusarse Andy.

  — Por ti me lo quito y me lo pongo las veces que quieras. — contestó Sofía pasando sus manos por la entrepierna del chico.

194: InsurrecciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora