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El lanzamiento de Af sería al día siguiente, por más que Wonjae no trabajo de forma directa con la promoción de su álbum no podía evitar tener su cabeza en ésta, al pendiente de todos los detalles y comentarios.
Le ponía nervioso las posibles críticas que recibiría, ya se sabían los nombres de las canciones y con quienes colaboró, lo que puso ansioso a sus fans de querer saber más.
No había podido visitar a Namin esa semana, ni ella a él, su trabajo lo tenía ocupado y a la menor los exámenes. Debes en cuando se mandaban mensajes, por si cabía la posibilidad de que alguno tuviera una o dos horas libres, aunque sea para verse y hablar, pero no coordinaban.
Decir que eso no tenía molesto a Wonjae sería mentira, pero no sabía porqué, le frustraba no verla, ignorando todo su deseo personal, sólo quería oírla hablar de como la pasó, si está pudiendo con los exámenes y se mantiene sana, los mensajes no eran suficiente.
En esos momentos garabateaba una hoja con un lápiz negro, esperando la llegada de otra caja con sus discos, él se había ofrecido en acompañar a los del staff a dejar éstos en tiendas de música para su venta, le emocionaba la idea.
Al tocar su puerta dejo todo lo que hacía para atender y ayudar a llevar las cajas al subsuelo, donde la subirían a los autos.
-Estoy seguro que será muy bien vendido -comentó el del staff cuando las puertas del ascensor se cerraron.
Él lo miro con una sonrisa agradecida.
-Más quisiera saber si les gustarán las canciones, que no sientan que su dinero fue gastado para nada -deseó.
-Eso no pasará, puedo estar seguro de ello, sólo haces producto de calidad.
Esperaba que todos pensaran igual, por más que se sentiera orgulloso de todo su trabajo, de la colaboración de sus amigos y compañeros, quería tener la aprobación de sus fans, quienes tanto lo habían apoyado.
Al llegar al auto vio de piloto a Jaewook, quien lo saludó dándole la mano.
-No pensé que vendrías -admitió subiendo atrás, junto a una caja con sus discos.
-La idea me interesó -explicó-. Espero no te moleste.
-Sabe que no, hyung -negó-. Lo agradezco.
Fue un viaje rápido a la primer tienda, junto con la charla y eso se volvió entretenido.
En mitad de los traslados le llegó un mensaje al teléfono, había estado seguro que lo había dejado en silencio pero la vibración en su bolsillo se lo negó, cosa que agradeció, el mensaje de Namin lo hizo sonreír.
