Hace dos días recibí una carta de Isaac, no la he abierto aún y tengo miedo que como pueda reaccionar cuando tenga conocimiento de su contenido.
Hoy, como los días pasados he estado en la casa leyendo o viendo la televisión, la casa se encuentra patéticamente impecable y ya estoy perdiendo la cabeza. Quiero andar por el pueblo como si fuera una persona normal, comer en el Grill la pizza que tanto me gusta, ir a la librería del pueblo. Lástima que nunca podré ser una persona normal.
Mientras me encontraba viendo la televisión el timbre sonó. Las únicas personas que habían estado en el porche eran los lejanos vecinos cuando traían comida como regalo de bienvenida, en estos días ya había probado tantos platillos distintos que ya no me habían dado ataques de ansiedad gracias a que todo el día me la había pasado comiendo. Pero no fue ningún vecino, me sorprendió mucho ver a Matt parado en la entrada, tenía algo en la mano y cuando vio que ya le había abierto la puerta se puso muy nervioso, me hice a un lado para que pasara y entró en completo silencio, se sentó en uno de los sofás y esperó a que yo también lo hiciera.
-Te traje esto-
-Muchas gracias-
Dejé lo que parecía ser un libro en la mesa y esperé a que hablara, aún se encontraba nervioso por lo que empezó a mirar para todos lados y rápidamente mantuvo su mirada en la carta que tenía sin abrir aún frente a él. Parecía saber de qué se trataba ya que al verla se relajó un poco y levantó su mirada hacia a mí.
-No la haz leído-
-No me siento preparada-
-La mandó a la comisaría para que te la diera, lamento mucho lo que sucedió-
-Bueno, por suerte siempre me tengo a mi-
-Valentina... Te debo una gran disculpa-
-Todas las veces pasa lo mismo-
-Cuando te enamoras de alguien creo que nunca llegas a sacarlo de tu corazón-
-Definitivamente deberías enamorarte de alguien que no te haga sentir que el amor es difícil Matt-
-Algún día me tiene que ir bien con alguien, ya me está quedando claro que ese alguien nunca podrás ser tú-
-Mereces a alguien mejor, alguien que pueda aprovechar esa luz que aún hay dentro de ti, pero yo no soy esa persona y nunca lo seré-
-Basta-
-Lo siento, me importas demasiado como para estar contigo-
Los ojos de Matt se cristalizaron y agachó la cabeza hacia sus manos que se encontraban fuertemente agarradas.
-Muchas personas se han salido de mi vida pero por favor tú no lo hagas-
Cuando volvió a mirarme a los ojos, pude sentir la sinceridad de sus anteriores palabras, yo tampoco quería perderlo.
-Nada es para siempre sin duda, pero también es sabido que aquello que cuidas dura más-
-¿Algún día dejarás de ser tan inteligente?-
-Cuando dejes de ser un idiota-
-Ven acá-
Se levantó del sofá entre risas y se lanzó a darme un gran abrazo.
Nos pasamos el resto de la tarde viendo películas y platicando sobre lo que había pasado en todo el tiempo que no nos habíamos visto.
Me contó sobre los problemas que llegó a tener el pueblo y cómo la hija de Klaus los había resuelto junto con Alaric de la escuela Salvatore. Y hablando de cosas sobrenaturales...
-¿Haz hablado con él?-
-No desde que me fui-
-¿No regresarás?-
-No lo creo Matt, cuando Elena me dijo sobre la muerte de los Mikaelson, me sentí tan triste como cuando me despedí de mi hermana-
-También estabas enojada-
-No tendrá la vida que merece si estoy cerca de él-
-Algún día querrás a alguien lo suficiente como para quedarte-
-No sabría explicarte la necesidad de estar en constante movimiento-
-Eres un vampiro Val, no hay explicación alguna para eso-
-¿Qué nos pasó Matt? Ya no sé quien soy o cómo llegue aquí, extraño a quien solía ser, volver a tener un hogar ¿Sabes? Buenos amigos, el tipo de amistad en el que solíamos creer, extraño eso y te extraño a ti, supongo que extraño todo-
-Creo que al final uno es culpable del daño que se deja hacer-
-No vuelvas a enojarte conmigo por favor-
-Siempre seré un idiota, no puedo prometerte nada-
Cuando se hizo tarde, Matt volvió a su casa y yo me puse a limpiar la casa después de todo el desorden que se hizo durante el día.
Guardé mis cosas en cajas haciendo parecer que de nuevo, la casa estaba sola y no habría personas en mucho tiempo.
Abrí la carta de Isaac y pasé la noche en el sofá de la sala llorando.
Nunca había dejado de extrañar al chico de cabello oscuro y ojos hermosos que me robó el corazón hace tanto tiempo, de hecho nunca había deseado estar tan cerca de alguien con tanta intensidad como lo hice aquella noche.
Me quedé dormida imaginando un mundo en el que no nos hubieran separado nunca.
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She Is Also A Petrova
FanfictionHace mucho tiempo, vivía una pequeña familia rodeada de amor, paz y tranquilidad. Hasta que el amor llegó al corazón de una de las hijas y todo lo que conocían se fundió en las llamas de la venganza, pero esa es la historia de mi hermana; y gracias...