We Have It

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Recepción:
8:01pm

Matt estaba sentado en uno de los sillones individuales de la recepción, tal y como lo dijo, trae puesto su uniforme.
-¡Wow! Para todo lo que traes sólo te tardaste un minuto-
-El elevador no llegaba-
-Te ves muy bien Caperucita-
-Gracias oficial-
-¿Nos vamos?-
-Atrapémoslo-

New Cap Event Center
8:25pm

-Se ve muy elegante ¿segura que estará aquí?-
-Aquí habrá demasiada gente, además si yo estoy aquí, hay más probabilidad de que venga aquí en lugar de matar personas en la calle-
-¿Desde dónde vigilaremos?-
-Creo que deberíamos separarnos-
-No lo creo, si lo encuentras tú no pasará nada, en cambio si lo encuentro yo terminaré muerto antes de que llegues-
-Entonces buscaremos juntos-
-Bien-

9:45pm

-Llevamos aquí más de una hora-
-Lo sé Matt, yo también tengo un reloj puesto-
-Apuesto a que está matando gente en cualquier otro lugar menos aquí-
Al parecer, no había tenido razón en éste caso.
Se veía muy cansado y yo nos había hecho perder el día con ésta tonta fiesta.
¡Demonios!
Seguía quejándose, se quedó callado cuando notó que empecé a concentrarme en algo y dejé de ponerle atención.
-¿Qué escuchas?-
-Nada fuera de lo común-
-¿Hueles algo?-
-Sangre-
¡Bingo!
Ahora sólo faltaba que esa sangre sí proviniera de dónde queríamos.
-¿Empezamos a correr?-
-Llamaríamos la atención-
No dejé que dijera algo ya que lo tomé de la mano y lo arrastre a velocidad vampírica hasta el lugar donde había detectado la sangre.
Estaba demasiado oscuro, lo único que se escuchaba eran los débiles latidos de los corazones de las personas que estaban en el suelo apunto de morir.
Matt sacó el arma de su pantalón junto con la linterna que tenía al lado de donde había sacado la pistola.
Yo no llevaba nada así que sólo empecé a caminar delante de él tratando de no hacer ningún ruido.
-Tenías razón-
-Shhh-
Algo se estaba moviendo hacia nosotros, pensé que era el licántropo pero al girarme noté que varias personas habían seguido nuestros pasos.
-Tienes que sacarlos de aquí-
-No me harán caso, están ebrios-
-¡Este juego está padrísimo! ¡Se ve muy real!-
-Definitivamente están demasiado ebrios-
El chico que estaba al frente de todo el grupo empezó a gritar, para su desgracia el licántropo ya estaba ahí y se le lanzó encima.
Las demás personas se quedaron paradas mirando lo que estaba pasando como si estuvieran en el circo o en algo parecido.
-¡Sácalos de aquí!-
Matt empezó a evacuar a todos los que estaban cerca mientras el licántropo seguía atacando al chico gritón.
Se había llevado la linterna con él por lo que casi no se podía ver nada, cuando se asomó a donde había un poco más de luz, me di cuenta que ese no era un licántropo cualquiera, era como si no estuviera transformado completamente.
Podría pasar fácilmente por un chico disfrazado de hombre lobo.
Cabello alborotado, uñas largas, orejas gigantes, colmillos, ojos inhumanos.
¿Cómo le hizo para no transformarse completamente?
Apuesto que ni Klaus Mikaelson sabía que ésto era posible.
¿Quién demonios era?
Debía tener mucho cuidado, si una mordida de un licántropo normal podía matarme, no quiero ni pensar que podría hacerme la de éste tipo.
Tenía mucha fuerza, definitivamente no era un licántropo cualquiera, pero ¿por qué estaba tan molesto?
No creo que sea sólo porque un vampiro está frente a él.
Pero como saben, entre más años tiene un vampiro más fuerte es, por lo que si no tuviera al menos más de un siglo, si me hubiera derrotado.
Después de el último golpe en su cara ya no pudo levantarse y se quedó tirado en el suelo apenas respirando.

 Después de el último golpe en su cara ya no pudo levantarse y se quedó tirado en el suelo apenas respirando

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Matt ya había regresado para cuando lo había derrotado.
Había pedido refuerzos, podía escuchar las sirenas aunque hubiera demasiado ruido alrededor mío.
-Ya viene la ayuda ¿Te hizo algo?-
-Nada que no haya curado ya-
-Perfecto, se lo llevarán a la comisaría-
-No podemos entregarlo-
-¿Cómo qué no?-
-Está asustado, si de verdad quisiera hacer algún daño no sería así de descuidado-
-¡Estás loca!-
Me acerqué al chico que había atacado el licántropo a confirmar si aún seguía vivo, ¡lo estaba! a duras penas pero lo estaba.
El tiempo empezaba a agotarse, necesitaba hacer algo pronto.
Mordí mi muñeca y dejé caer la sangre sobre la boca del chico.
Si el otro chico que estaba igual de moribundo que él, salía con que de verdad era un lobo asesino yo misma lo mataría, pero y si no lo era y nosotros lo entregábamos a la policía, terminaría muerto.
Cuando el chico se curó completamente lo tomé de los hombros y lo mire a los ojos fijamente.
-Tú mataste a todas las personas. Estabas enojado con él mundo y empezaste a matar personas al azar. El Oficial Donovan logró detenerte antes de matar a alguien más mientras la chica rubia que venía con el empezó a evacuar a todas las personas que estaban cerca marchándose a su hotel al saber que ya te habían capturado-
-Yo los asesiné, estaba enojado con el mundo-
-Te gustaban mucho las películas de hombres lobo-
-¿Qué haces?-
No pude descifrar la mirada de Matt hacia mi en ese momento, enojo, decepción. Le puse las esposas al chico que había hipnotizado y ayudé al licántropo a levantarse para poder irnos de ahí. La policía venía corriendo por lo que debía darme prisa.
-Tú serás la responsable de lo que pase con él de ahora en adelante-
-Te veo más tarde-
Abracé al chico y nos saqué de ahí lo más rápido que mi velocidad lo permitió.
Al llegar a la recepción del hotel hice como si llevara a alguien ebrio hacia su habitación.
Uno de los recepcionistas me ofreció ayuda pero le dije que estaba bien, que mi cuarto no estaba tan lejos.
La llave de la habitación no venía conmigo, apuesto a que la tiré mientras peleaba con el chico que llevaba casi en mis brazos.
Le di una patada a la puerta y entré rápidamente.
Dejé caer al chico en mi cama ya que se veía demasiado grande como para poder estar en el pequeño sillón que había en la habitación.
No faltaba mucho tiempo para que amaneciera.
Abrí el minibar que estaba en la habitación y bebí todo lo que contenía alcohol de ese pequeño refri.
Tenía mucha hambre pero debía esperar a que el chico despertara.
No podía dejarlo solo, si hacía otra masacre Matt no me perdonaría nunca, preferiría secarme a perder a alguien más.
No puedo hacer otra tontería ya.

She Is Also A PetrovaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora