DIEGO
No sabía quién era, ni cómo la conocía o sí al menos hablábamos de la misma chica, pero a estas alturas del partido, ya estaba cansado de vagar y no encontrarla. Así que me dirigí a donde dijo, Mystic Falls.
No sabía por dónde empezar, así que traté de recorrer los lugares más concurridos del pequeño pueblo.
Visité la iglesia, la plaza, la preparatoria y al final un pequeño restaurante que estaba a la mitad de la ciudad, llamado Mystic Grill.
En cuanto entré, sentí un ambiente muy familiar pero no encontré lo que buscaba.
Desganado me acerqué a la barra y pedí un trago, definitivamente ese chico me había engañado.
No entiendo cómo pudo escuchar de lo que hablábamos, pero había ganado.
Y había sido una mala jugada, dejé a mi único amigo por nada, ni siquiera me despedí y no valió ni siquiera la pena.
Estuve mucho tiempo lamentándome, hasta que la vi entrar, con su hermoso cabello rubio y su sonrisa amplia que ilumina cualquier lugar.
Me dio un poco de vergüenza el estar así de desganado, pero cuando estuvo a mi lado en la barra, no importó. Llevaba muchísimo tiempo buscándola y por fin la había encontrado.
Mi hermosa Valentina.
Estaba a mi lado, como si nunca me hubieran alejado de ella.
No sabía qué decir, o cómo llamar su atención, estaba tan sorprendido de tenerla ahí que lo único que pude hacer fue tocar con mi dedo su brazo para tratar de llamar su atención.
Cuando miró hacía mí, no puedo explicar lo que estaba sintiendo, sus hermosos ojos verdes estaban demasiado abiertos, igual o hasta más sorprendidos que los míos.
Me abrazó fuertemente, como si no hubieran pasado más de mil años desde la última vez que nos vimos.
-No sabes cuánto te he extrañado y sobre todo lo mucho que te he necesitado-
Susurró a mi oído y vi como las lágrimas inundaban sus hermosos ojos y por primera vez en mucho tiempo, yo también estaba llorando.
-Jamás dejé de buscarte-
No soporté más y rompí la poca distancia que quedaba entre nosotros, sostuvimos el beso hasta que no pudimos respirar y nos seguimos abrazando por un largo tiempo. Ninguno podía creer que por fin nos habíamos vuelto a encontrar,después de tanto tiempo, ahí estaba en mis brazos.
Seguía amándola con cada latido de mi muerto corazón.
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She Is Also A Petrova
FanfictionHace mucho tiempo, vivía una pequeña familia rodeada de amor, paz y tranquilidad. Hasta que el amor llegó al corazón de una de las hijas y todo lo que conocían se fundió en las llamas de la venganza, pero esa es la historia de mi hermana; y gracias...