Enamorándome de mi amigo. [NamSeok]

Una visita inesperada

Estoy en ese punto de las vacaciones donde mi cuerpo se acostumbró a  levantarse tarde y a hacer nada durante todo el día, cuando solo falta una semana para regresar a clases y volver a la rutina estresante de lecturas y escritos. Y aunque realmente amo mi carrera, no es como que quiera regresar a la universidad en este instante.

Estoy echado en una tumbona del patio de la casa, cuando percibo una silueta detrás mío haciendo que me tense de inmediato, no es de asombrar mi gran reacción ante el miedo, pero todos saben cuan patético soy cuando algo me asusta.

Modúlo mi respiración porque siento que en cualquier momento voy a desmayarme pero me paralizo aún más cuando siento una mano en mi cuello que reparte una caricia de dedos fríos. De repente, en un movimiento que no me espero, mi cuerpo reacciona por voluntad propia intentando huir de aquello que lo acecha, pero en consecuencia termino enredado con la tumbona y veo de forma inminente el piso acercarse cada vez más a mí jodida cara, unas manos me agarran con firmeza deteniendo mi caída y es ahí cuando suelto EL grito 😱 y termino haciendo algo más sorprendente: Me pongo a llorar.

La risa detrás de eso me sorprende, abriendo mis ojos empañados volteo y lo diviso riendose de lo lindo a mí costa. Es NamJoon, que está en mi casa, me dió un susto de muerte y ahora se ríe hasta el cansancio. Ojalá se atragante.

- Que carajos haces aquí hijo de tu santa madre?. Le pregunto molesto tratando de controlar mi corazón. En estos momentos no sé si es debido al susto o a la felicidad que me embarga al verlo aquí en mi hogar.

El me abraza y me da un pequeño beso en los labios aún en contra de mi pequeña rabieta, debería sorprenderme pero no lo hace. De hecho, me descubro extrañando esto, nuestra nueva cercanía, así que lo abrazo de vuelta y respiro cerca de su cuello. Dios mío que estoy haciendo! 😰. Así duramos un rato donde yo sigo llorando y él me arrulla pidiendo disculpas pero riendose al mismo tiempo, siento la mirada de mi abuelita por algún lado pero nos da privacidad y se lo agradezco. Sonrío, porque esta visita inesperada hace que mis vacaciones obtengan esa última pieza que le faltaba, incluso cuando no sabía que la necesitaba. 🤗