Sábado 20 de julio del 2024, muy temprano en la mañana la única persona bien despierta era Natasha, quien amaneció recibiendo y dando llamadas telefónicas a sus mejores amigas y organizadores de la fiesta, quería estar segura de todo para así también tener tiempo de arreglarse.
Para las 10 AM, los demás habitantes de La Torre ya habían despertado completamente, levantándose para ingerir el primer alimento del día: el preciado desayuno.
Thor y Loki fueron los primeros en adueñarse de la barra en la cocina, pan tostado y crema de maní:
─Lo untas así y después le das una mordida ─indicó tiernamente Thor a su hermano de crianza. Luego de su breve explicación, dio una mordida al pan tostado que llevaba en la mano.
─No tienes que darme instrucciones sobre cómo comer, hermano ─rezongó Loki, aunque con gran razón. Él también podía solo untar y comer, no era algo que en Asgard no hicieran.
─Es que tienes que tener cuidado de no hacer esto... ─Y juguetón, Thor tomó algo de maní en la cuchara con la que untaban la crema, dejando caer la misma cucharada en el rostro del dios de las mentiras.
Odinson echó una risa burlona, sin embargo, con un Loki descontento lo único que provocó que esa risa se borrara fue la magia del mago y el que haya desaparecido la crema de maní.
─Loki ─nombró en un puchero, viendo el frasco vacío y su pan tostado sin maní, lo contrario a Loki.
Mientras tanto, en el comedor era otra historia para contar, con la pareja felizmente casada desayunando, Steve acompañándoles al igual que Tony. La conversación de esta comida era la fiesta de más tarde:
─¿Ya tienen a los invitados? ─dudó Tony, con la boca llena. Comía una dona de chocolate, ya estaba en el postre.
─Por supuesto, ¿quieres añadir a alguien? ─devolvió la duda la pelirroja, quien ya estaba por terminar su desayuno bajo en grasas.
─Quizás a la chica de recepción ─sugirió Steve, de inmediato trató de evadir la atención poniéndose a beber el café caliente que se había servido para acompañar sus alimentos.
La furiosa mirada de Tony se fijó en él, asimismo, Bruce y Nat le vieron con gran confusión y curiosidad.
─¿Te gusta la chica de recepción? ─cuestionó Natasha una vez más, dirigiéndose a Tony, quien rodó sus ojos con molestia.
─No, no me gusta nadie.
─Pero necesita a alguien, Nat ─insistió Rogers, una vez habiendo dejado la taza de café sobre la mesa.
─No, no necesito a alguien ─Stark se opuso una vez más.
El Capitán América sonreía con enternecedora malicia y aunque Banner se confundía por la situación, a Romanoff le parecía divertida.
─Por favor, Tony ─Nat se cruzó de brazos, con una sonrisa que se emparejaba a la de Steve─. Conocer mujeres no es tan malo, ¿no eres playboy? Déjame conseguirte una cita.
─No, hoy es la fiesta de tu boda.
─Soy multitareas ─excusó a la perfección, para después, ante ninguna palabra, se levantó dirigiéndose hacia la salida del comedor y luego la sala de estar.
Los tres hombres se quedaron allí en el comedor, uno con cada actitud diferente que el del otro. Steve reprimía una risa, queriendo guardar la calma, él ya había tenido una experiencia similar con Romanoff. Por parte de Bruce, él solamente se confundía cada vez más y más pues creía que su mejor amigo no quería salir con nadie después de Pepper Potts. Y Tony, bueno, Tony estaba tratando de que su cabeza no explotara mientras comía sus preciadas donas.
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PESADILLA | IRONSTRANGE, MARVEL
RandomTony Stark sueña con frecuencia estos últimos días, pareciera totalmente habitual, pero los Vengadores en la Torre A también sueñan y no de diferente manera. Agosto, 2019.