I Promise You

Capitulo 48

CAPITULO 48

ATENEA

Su ejecución fue hace media hora, está muerto.

Y soñé, soñé con un nuevo mundo. Un nuevo mundo en el que no hubiera guerra. Donde estuviera viva, y el también. Que él me observara con sus ojos azul topacio y me besara con aquellos únicos labios suyos. Con su cabello color chocolate ondeando con el viento. Que sintiera los latidos descontrolados de mi corazón.

Que me prometiera el mundo entero.

Y me lo regalara en solo un beso suyo.

Soñé con él hasta que quede seca. Hasta que mis ojos pararon de lagrimear. Hasta que mi corazón dio su ultimo latido contra mis costillas. Hasta que una a una, las mariposas cayeron muertas dentro de mi estomago.

Fue entonces cuando descubrí algo que me rehuía.

Kay me había prometido que nunca me dejaría. El mismo me lo había dicho esta mañana. El siempre cumple sus promesas. Debía estar vivo.

Era una pequeña esperanza que me permitía no caerme en pedazos y morir en esta celda.

Escuche unos pitidos. Unos pitidos lejanos, pero constantes.

Tic, tic, tic ¿Dónde había escuchado eso?

Tic, tic, tic.

¡Bomba!

Por instinto intente correr, pero estaba atrapada, intente golpear los barrotes una vez más, pero los pitidos se hacían mas rápidos.

Iba a morir.

¿No debería ser bueno?

Hasta que llegaron a su fin, y la pared trasera se desvaneció.

Keyra estaba ahí, sonriéndome, junto a una copia exacta y mayor de Kay.

Parpadee una, dos, hasta tres veces seguidas y mi corazón seguía golpeándome en las costillas.

¿Estaba viva o estábamos todos muertos?

Me tambalee un poco y Keyra llego corriendo a ayudarme. Quise seguirla, quise preguntarle que estaba pasando, pero no reaccionaba. Me sentía inerte, sin vida.

Entonces me derrumbe.

La copia exacta de Kay llego trotando y me levanto en brazos. No me resistí, no pregunte mas, me deje llevar por la oscuridad.

-¿Cuánto tiempo tardara?-escuche a alguien preguntar. Una voz femenina, pero dura a la vez.

-No tengo idea, pero ¿ves como respira más deprisa? Creo que ya nos escucha-escuche a alguien responderle. Era una voz masculina, un tanto aterciopelada.

-Despierta, Atenea-alguien me acaricio el cabello, era una voz aniñada, similar a…similar a la de Grace.

Abrí mis ojos de sopetón.

Estaba acostada en algo frio y duro. Era un suelo de metal, estaba casi segura. Keyra estaba a mi izquierda, sonriendo, junto a Grace, viéndome con luz en su mirada.

A la derecha estaba un joven mayor que yo. Quizá dos años. Su cabello era café castaño, un poco más claro que el de Kay. Sus ojos eran cafés oscuros igualmente, pero era tan parecido a él, que hizo que me doliera el corazón. Me falto la respiración y mis ojos se llenaron de lágrimas.

Estaba casi segura de que ese chico era el hermano de Kay.

-¿Estás bien?-me pregunto con su voz aterciopelada. Se le formaron hoyuelos al hablar.