CAPITULO 21 - CARLOS

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El corazón le latía demasiado rápido, nunca pensó en encontrarse con nadie conocido en ese lugar y menos de aquella manera, no sabía nada sobre la vida de ese par de hombres, que entrenaban con regularidad en La Fortuna. Recordaba al que estaba hincado, pues tenia mas tiempo yendo al gimnasio, algunas veces con su novia, o al menos creía que era su novia. al otro apenas y lo recordaba de unas semanas atrás. Sabía que ninguno de ellos diría nada, pero no podía evitar sentir algo de miedo, como si esa gran barrera que separaba su vida heterosexual, de su vida clandestina, se comenzara a caer.

Regreso y se sentó con Rudy, no quería preocuparse de mas, al menos no era el momento de hacerlo, si ellos decían algo, el también podría decirlo. Miro que su acompañante que tamborileaba los dedos sobre la mesa al compás de la música, de hacía ya casi dos décadas, que recordaba haber escuchado cuando empezaba a ir a la discoteca, cuando aún se le llamaba discoteca.

-¿te gusta esa música? –Le pregunto a Rudy

-si, son buenas –se limitó a contestar

Rudy le gustaba, tenía una cara de niño que no podía dejar de ver, con barba se veía un poco mayor, era un plus. Su pecho lleno de pelo y una panza justo del tamaño que le gustaba. Sabía que era perfecto, pero la pregunta correcta era si El, Carlos era perfecto o al menos bueno para Rudy. Su intuición le decía que no.

-Vámonos –Dijo Carlos poniéndose de pie, Rudy estaba tomando un sorbo de su bebida

-¿Ahora?

-Si

-Pero casi acabamos de llegar –Rudy se puso en pie

-No importa – saco dinero de su cartera, lo puso en la mesa para pagar el servicio y camino hacia la salida

Rudy lo siguió cambiando entre la gente

Afuera Carlos al cruzar la calle, mas delante de donde se estaciono, miro la sombra de un hombre parado en medio de la calle, algo raro, pero no logro distinguirlo. subió al coche al igual que Rudy

-¿A dónde iremos? –quiso saber Rudy

-Iremos a un lugar más divertido –contesto y le dio una gran sonrisa

Se mantuvieron el silencio durante el trayecto, solo la música de la radio, era la que los acompañaba, apenas pasaba ya de la media noche, realmente solo estuvieron poco menos de una hora en el lugar, pero valdría la pena. Carlos condujo por la avenida Nacional, hasta llegar a la carretera a México, donde por las orillas sobresalían bares, antros y table dance. Todos lugares para heterosexuales, pero lo que Carlos buscaba era el Motel más lujoso de la ciudad y lo encontró, "La Mansión", Nunca había podido permitírselo, pero Rudy valdría la pena, de eso estaba seguro.

-creo que ya sé a dónde vamos –confirmo Rudy

Tomo la entrada del Motel, un letrero de luz le indico el número 20 de habitación que debía tomar, la barra se elevó y entro a lo que parecía una calle, que estaba adornada con árboles y flores, había cocheras con la puerta electrónica abierta, todas con un segundo piso, las paredes estaban pintadas de rojo con blanco, encontró la habitación 20, y entro. El portón bajo en cuanto apago el carro.

-No creí que fuera esto tan rápido

- ¿Nunca habías tenido una noche...?

La pregunta la dejo en el aire, pues miro la cara de extrañeza de Rudy

-vamos –le dijo Carlos

Bajaron del carro, en un lado de la pared se encontraba una puerta, la cual abrió Carlos, dándole el paso primero a Rudy, que subió rápido, haciendo que Carlos viera su trasero en su gran esplendor. El pantalón que llevaba se le bajaba un poco dejando ver un poco de su raya, que estaba llena de bello negro. Arriba Rudy abrió otra puerta, entrando a la habitación,

LA FORTUNA  (FINALIZADO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora