Los demonios de Haven.

Capitulo 8

Me levante asustada por una pesadilla que había tenido, vi a mi alrededor y vi a Amón viendo la ventana mientras Ara estaba a mi lado dormida, vi la hora de mi reloj y eran las 5 de la mañana suspiré y me levanté para ir a tomar agua mientras fui vi a Amón seguirme mientras me servía el agua escucho un pequeño ruido y veo a una Abbie adormilada salir del cuarto mientras bostezaba.

— Haven.. ¿como así estás despierta?. — me pregunta y la miro, para tomar el agua y suspirar.

— No podía dormir, y ¿tú? — le pregunto y ella se sienta en una de las sillas de la cocina.

— Tuve.. una pesadilla. — me dice sonriendo triste, si ella suele tener muchas pesadillas con su padrastro.. una vez la intentó violar y desde ahí tiene esas pesadillas veo como Amón se acerca a ella y dice unas palabras y Abbie frunce el ceño para luego girarse.

— H-haven, qui... quien es. — dice y traga grueso veo como Amón se para frente a ella.

— Soy Amón, y no soy un humano.. soy un demonio. — le dice sin más, ella me mira y asiento para luego ver cómo Ara aparece.

— ¿La humana ya nos ve?. — dice burlona y se acerca a ella con sus garras y Abbie retrocede mientras Amón gruñe.

— ¿¡Que carajos pasa aquí!? — grito pero Ara le tapa la boca y la ve asombrada.

— Te callas humana chillona o sabrás como trato a las humanas idiotas como tú. — le dice y reviro los ojos para llegar a Abbie y separarla de Ara.

— Es.. muy difícil explicarlo.. pero si dos demonios viven aquí o bueno conviven aquí, aunque hasta ahora solo me joden a mi pero ahora tú.. los ves. — le dije y ella asintió con la mirada perdida.

— Amón, Aradia ellos dos son mis demonios y bueno digamos que Amón tiene un enamoramiento contigo. — le digo y ella asiente para luego verme con los ojos en grande y ver a Amón que estaba con su semblante serio, me mira con odio y sonrió.

— Como que le gustó, te gusto... — dice Abbie viendo a Amón y el suspira para luego hablar.

— No me gustas.. sólo te ves una chica interesante, punto — dice y se cruza de brazos mientras Ara ríe.

— Se muere por ti, solo que es bien imbecil y no lo dice ¿si o no? Amón. — ríe y Amón la empieza a perseguir mientras Abbie me mira riéndose.

— Es mejor prepáranos ya va amanecer y tenemos colegio.. — dije y ella asiente mientras va a su cuarto y yo al mío.

— ¡Te voy a matar! — escuche a Amón y se acerca a mi pero Ara lo toma de la mandíbula, sus ojos se volvieron rojos.

— No voy a dejar que arruines esto por tu estupido capricho con esa mocosa. — dice y Amón se suelta de su agarre para luego gruñir.

— ¿Arruinar? ¿Arruinar que Ara?. — la miro y ella sonríe para luego tomar mi cara.

— No te importa, tú solo sigue siendo mi títere. — me dice sonriendo y apartándose de mi gruñí en respuesta.

— No creas que puedes utilizarme como si fuera tu perrito faldero, por qué no lo soy. — le digo señalándola.

— No eres mi perrito faldero, solo... eres una pieza para este divertido juego. — dice sonriente a lo que trago grueso y entró al baño para bañarme y cambiarme ya que tenía que irme al colegio, cuando salgo del cuarto son las 6 de la mañana.

— ¡Haven! ¡Sal ya tengo o llegarán tarde! — salgo de mi cuarto ya vestida y Ara y Am me siguen, si ahora le digo Am.

— Buenos días ñuñi. — me dice mi hermano y Abbie me sonríe, Adeline se acerca a mi y me da un beso en la mejilla. Terminamos de desayunar y entramos al auto para luego llegar al colegio y bajar, todo parecía normal hasta que la mirada de Froy se posa en mi y sonrió de lado burlonamente.