CAPITULO 18

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- Vamos Nessa, ¡¡di que sí!! Por favor- y ahí estaba de nuevo el tono de suplica de la rubia. La castaña solo negó por milésima vez en el día, reiniciando así el mismo bucle que parecía que se había formado entre ambas niñas mientras que Thomas y Jason solo observaban la escena

Desde que ellos 4 hicieron aquel proyecto, el cual fue el mejor de la clase, el escandaloso trío no se había alejado de Nessa y la pequeña debía reconocer que tener su compañía le agradaba, le gustaba el hecho de que la consideraran y trataran como una más del grupo aunque, eso no quitaba que a veces la sacaban de quicio

Ahora ¿Cuál era el tema de hoy? Pues sencillo, Laura le estaba insistiendo a la ojiazul para que accediera a ir a la pijamada que tenían pensado hacer en la casa de Jason pero, como era de esperarse la joven castaña se negó rotundamente, y no porque la idea le pareciera mala, sin embargo las pesadillas que sufría seguían siendo constantes y temía que tuviera una en presencia de las únicas personas que se habían acercado a ella o, peor aún, que debido a uno de sus malos sueños tuviera un ataque de pánico y necesitara la intervención de los padres del chico. Sí, ninguno de esos eran riesgos que ella estuviera dispuesta a correr

- Laura, ya dije que no, así que deja de insistir- le dijo ya a la rubia un poco cansada de escuchar sus súplicas

- No dejaré de hacerlo hasta que digas que si- aseguró con una determinación que solo hizo suspirar a Nessa. En definitiva ella era una de las personas más tercas que ha conocido

- No voy a ir, a Erik y a Lucas no les gusta que duerma en un lugar que no sea nuestro departamento- argumentó al ver que la chica estaba dispuesta a volver a protestar, pensaba que al meter a ambos hombres en la ecuación haría que la ojiavellana al fin dejara de lado el asunto y, al parecer funcionó, ya que no escuchó ningún comentario de su parte con respecto a ese tema

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De acuerdo, admitía que esto fue en parte culpa suya pero, en su defensa ¿Cómo podía saber que cuando las clases acabaran Laura iría con Erik y Lucas para pedirle permiso a ellos para la pijamada?, Es decir, sí la rubia se veía muy ansiosa y emocionada conforme se acercaba la hora de salida y, sí tal vez pasó por alto algunos comentarios que su compañera había hecho al respecto, sin embargo... ¿A quién engañaba? Laura Velázquez era conocida por ser la peor persona del mundo para disimular y Nessa no se dió cuenta en ningún momento de que haría eso por muy obvio que fuera

- Princesa vamos, quita ese puchero esto no es tan malo- ¿Estaba haciendo puchero? Al parecer debía poner más atención en sus gestos

- No debieron decirle que si, ¿Qué ocurre si en la pijamada tengo una pesadilla o un ataque de pánico?- les preguntó con seriedad ¿Acaso ella era la única que estaba considerando eso? Ellos sabían bastante bien como podían afectarles esos recuerdos y pareciera que no les importara

- Pequeña todo saldrá bien, y desde luego que pensamos en eso es sólo que creíamos que una actividad así te gustaría, además estarás con tus amigos- había demasiado ánimo en la voz del ojiverde para el gusto de la castaña, esta idea no le gustaba nada no estaba lista para algo así

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- Pues diría que fue una tarde bastante productiva- comentó divertido el ojigris recibiendo una mirada de molestia por parte de su esposo

- 4 horas Erik, Nessa y tú tardaron ¡¡4 horas en la biblioteca!!- exclamó exasperado quitándose del rostro algunos cabellos que se habían escapado de la coleta que adornaba su cabeza

- Tú también tardaste en la cafetería y ninguno de nosotros te dijo nada

- No me vengas con eso Erik- lo señaló de forma acusadora- solo tarde 30 minutos y fue porque había más personas de lo usual- la castaña rodó los ojos divertida, en verdad aquella pareja era única

El tema de la inminente pijamada hacia quedado atrás luego de aquella tarde con ambos hombres, llevaban realizando varias compras ya que dentro de poco de llevaría a cabo el primer desfile de esta temporada del azabache y según el matrimonio esté era uno de los más importantes de su carrera hasta ahora, debido a que este año el mayor incorporó a su repertorio vestidos de novia y en aquel desfile iban a debutar aquellas prendas

Todo el tiempo que la pequeña familia paso junta durante el día fue realmente agradable, no solo para la ojiazul si no también para la pareja. Estaba anocheciendo y el cielo empezaba a pintarse con tonos rosas y naranjas, hecho que no paso desapercibido por el castaño mayor, quien empezó a tomar varias fotos con la cámara que siempre llevaba consigo, además el estar en uno de los parques más hermosos de la ciudad solo le daba más inspiración

La escena que se apreciaba generaba un fuerte sentimiento de calidez, el ojiverde estaba concentrado en tomar fotografías mientras el ojigris dibujaba en su libreta a su esposo realizando tal actividad. A Nessa toda la situación la hacía sentirse calmada y no negaría que aquella pareja era en verdad tierna, se podía ver y sentir el amor que ambos se tenían

Sin embargo, a pesar de toda la tranquilidad que se podía percibir, la castaña solo veía el lugar y a diferencia de muchas personas ella no tenía buenos recuerdos de este parque. Allí había pasado sus primeras dos semanas en la calle y por la noche ese lugar se vuelve bastante aterrado, aunque las memorias que tiene en ese lugar no son tan malas como las demás que posee

- ¿Todo bien princesa?- dirigió su mirada hacía el castaño, quien al igual que el mayor la miraban con atención

- Si, no pasa nada - aseguró mirando al cielo. Ella lo podía sentir, con el paso de los meses junto a ambos hombres ella poco a poco iba abriéndose cada vez más, aunque también sus tormentos iban en aumento y eso era algo que la inquietaba ya que con el tiempo percibía que le costaba más lidiar con todo lo que pasó y lo último que quiere es exponer sus problemas

- Nessa, en verdad lamentamos mucho lo de la pijamada, solo creemos que esto puede ayudarte- comentó el azabache ganándose la atención de la pequeña

- Está bien, sé que solo lo hacen porque quieren lo mejor para mí- la ojiazul se sentó junto al mayor- y no sé preocupen, estaré bien

- ¿Estas segura Peque? Porque si no quieren hacerlo no queremos obligarte

- Si, estoy segura- mentía, no estaba segura en absoluto pero, no quería decepcionarlos, Erik y Lucas realmente creían en ella y no estaba dispuesta a fallarles

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Espero que les esté gustando la historia, de ser así, por favor voten y dejen sus comentarios

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𝐁𝐑𝐎𝐊𝐄𝐍 𝐒𝐔𝐍𝐅𝐋𝐎𝐖𝐄𝐑Donde viven las historias. Descúbrelo ahora