DADDY [Dean Winchester]

40. Bestia enjaulada

-Dean -alcanzo a susurrar antes de que mamá note mi mirada y se de media vuelta perdiéndose entre la multitud.

-¿Qué sucede? -pregunta mi acompañante dejando de bailar.

De pronto ya ni siquiera alcanzo a prestarle atención a la música ni a lo que pasa a nuestro alrededor.

-Mamá nos vio -miro su rostro y empiezo a sentir unas horribles ganas de llorar.

La culpa que había prometido dejar atrás ha vuelto más fuerte que nunca.

Dean la busca rápido con su mirada pero sé que ella se ha ido. ¿Cuánto tiempo habrá estado viéndonos? ¿Habrá alcanzado a presenciar el tierno beso que Dean me dio en la frente mientras me confesaba sus nuevos sentimientos?

¿Habrá notado lo inmensamente feliz que estaba hace tan solo segundos atrás mientras bailaba con su ex?

-Debo ir a hablar con ella -me alejo de Dean y salgo casi corriendo en búsqueda de Mel.

Necesito saber que es lo que alcanzó a ver y que es lo que piensa al respecto. Y si ella nos vio, entonces supongo que nuestro momento de confesar ha llegado.

Ya no me siento capaz de alargar esta situación.

Me siento estúpida. ¿Cómo rayos pude considerar esto una buena idea? Yo ni siquiera debería estar en esta fiesta. Nunca debí aceptar venir. Mucho menos bailar con quien fue el novio de mamá hace tan poco tiempo y comportarme como la nueva dueña de su corazón.

Salgo del edificio al no encontrar a Mel por ningún lado, pero mi angustiante búsqueda termina cuando por fin la veo conversando con una tipa pelirroja de más o menos su edad.

Me acerco a ella y tomo su brazo sin importar su animada conversación actual.

-Mamá -digo tratando de mantener la calma. Mis nervios me están volviendo loca.

Inesperadamente, ella se gira a verme y sonríe extrañada, como si lo de hace un rato nunca pasó y ahora se sorprende de verme aquí a su lado con cara de miedo.

- Maddi, ¿Todo bien?

Joder, nada esta bien, y si está fingiendo, pues peor.

Al ver que no quiero hablar por la incómoda compañía a su lado, mamá se disculpa con su amiga y me hace caminar con ella hacia otro lado más apartado.

-¿Y bien? -pregunta confundida otra vez.

-Yo...

Mierda. Ahora no sé que decir. No sé que explicación debo dar ni mucho menos como empezar.

-Me puse a bailar con Dean porque nos cansamos de esperar en la barra y luego en una de las mesas -suelto sin más que agregar.

-Ok -frunce el ceño y sonríe como si nada anduviera mal. -Siento la demora, es que Steven me presentó a un montón de gente y luego hicimos una mini reunión con los demás empleados -rueda los ojos y bebe un poco de su copa. ¿Ya probaron el espumante? Esto está realmente bueno -alza las cejas y yo solo la miro sumergida en un mar de confusión.

¿Que está pasando?

-Pensé que... te habías enojado -digo en un hilo de voz que a penas se escucha por el ruido ambiente.

-¿Enojarme? ¿Lo dices por bailar con Dean? -bufa despreocupada y yo asiento dudosa. -Que yo haya terminado con él no quiere decir que tu dejes de hablar con él. Nuestros problemas no te involucran cariño.

Oh, créeme que si mamá.

-No quería parecer tan confianzuda, después de todo... Dean sigue siendo tu ex -frunzo el ceño tratando de hablar lo más real posible.

-Hija, era un simple baile... no exageres -ríe, pero no soy idiota. Sé cuando lo hace de verdad, y cuando no.

Ahora esa risa y esa sonrisa relajada en su boca no alcanza a llegar ni por lejos a sus ojos.

-Pensé que te habías sentido mal al respecto, -insisto, tratando de hacerla sincerarse conmigo. -Solo quería aclararte la situación en caso de que hayas pensado mal.

Espera... ¿Entonces planeo seguir mintiendo? No hay caso, estoy buscando el caos.

-Mel -escucho la voz de Dean a mis espaldas y veo que él nos ha encontrado. -¿Está todo bien? -pregunta tranquilo uniéndose a nosotras.

-Sip -responde mamá y la noto tensarse un poco mientras endereza su postura. -¿Y tú como lo estás pasando? ¿No te ha llamado tu novia para decirte que ya es muy tarde? -dice bromeando, pero ni Dean ni yo reímos.

Creo que el alcohol está empezando a liberar la boca de Mel, y eso explicaría esta versión más "relajada" e irónica de ella misma.

-No, -intenta reír Dean. -Aunque aún es temprano, me iba a esperar para dormir -nos lanza una mirada divertida y mamá vuelve a sonreír de manera fingida.

Dios, esto se está yendo de las manos y quiero mantener el control de la situación.

Gracias al cielo, de fondo por unos parlantes, empiezan a llamar a todos los invitados adentro para hacer el primer brindis en el salón central, y siento que esto puede ayudar a disuadir los ánimos tensos.

-Ya era hora, vamos a seguir fingiendo amor -dice mamá y se vuelve a tomar del brazo de Dean como si fueran pareja.

Mi lado oscuro se retuerce de celos dentro de mí, como una bestia enjaulada que quiere ser liberada, pero trato de controlarme a mi misma para no empeorar todo esto.

No hay necesidad de hacer más drama.

Mamá me mira de una manera bastante extraña otra vez, mientras que Dean me observa algo confundido por este nuevo comportamiento que no creo haber visto antes en ella.

No alcanzo a descifrar lo que está pasando por su cabeza en estos momentos porque pronto, y antes de que yo pueda decir algo, ella se pone a caminar guiando a Dean hacia el salón dejándome sola atrás.

Definitivamente ella está empezando a entender todo. Y lo que más miedo me da, es que ya siento la tormenta aproximándose.