DADDY [Dean Winchester]

08. Como a una adolescente.

-Madison, ¿Qué haces aquí? Ni siquiera son las once...

Anna me mira confundida y entro a su casa sin decir nada aún.

Mi estómago da vueltas y vueltas, tengo el pulso acelerado y el haber caminado hasta aquí no me ayudo mucho a liberar tensión.

Gracias al cielo mi mejor amiga vive solo a unos minutos de mi casa porque si no, no sé a donde habría ido.

-Madison, ¿Qué sucede? ¿Estás bien? -Anna insiste en saber y la miro sin tener claro que responder.

-Vi a mamá y a Dean.

-Oh no -me interrumpe y pone cara de espanto. -¿LOS VISTE TIRANDO?

-Dios no! -chillo y la imagen de lo que pudo pasar si Dean no me hubiera visto azota mis pensamientos. -Aunque estuvo cerca, muy cerca -alzo las cejas y Anna me mira en shock.

-Oh mierda, ven aquí -agarra mi mano y por poco me lleva arrastrando hacia la sala de su casa para que nos sentemos a charlar.

A diferencia de mí, Anna vive sola hace ya un par de años; ella terminó de estudiar estética y cosmetología y ahora tiene su propio salón de belleza en el centro, así que es una mujer independiente.

Si tan solo yo hubiese escogido una carrera más corta, tal vez también ya podría vivir sola, y así evitaría todos estos enredos incómodos con mamá y sus novios desagradables o los demasiado agradables.

-Madison, necesito escuchar la historia completa -dice mi rubia mejor amiga mientras vuelve a tomar su bolsa de maquillaje y continúa arreglandose para nuestra noche de chicas solteras.

-No es la gran cosa, es solo que...

-Dios, ¡Hoy estuviste tan rara! En serio necesito saber que pasa contigo y con tu nuevo daddy -bromea y debo controlar mis ganas de golpearla con un cojín. En serio no es el momento.

-Estoy jodida Anna -digo sincera y derrotada. -Dean Winchester se está metiendo en mi mente a pasos agigantados y no sé como frenar lo que siento.

-¿O sea que lo de crush temporal ya no es tan temporal? -me mira preocupada y solo puedo encogerme de hombros sin saber como responder.

-Odio esto. No sé como explicar lo que pasa en mi cabeza. Anoche cuando fue a mi habitación estuve dispuesta a traicionar a mamá. ¿Sabes lo horrible que es pensar y considerar eso?

Anna muerde su mejilla y me mira bastante angustiada desde el sillón de enfrente. Y es lógico, de seguro piensa lo mismo que yo. Que soy la peor hija del mundo, que superé a las perras más perras de la historia de las perras.

-Bien, escucha -Anna se levanta del sillón con un divertido aire triunfante. -Vamos a calmarnos, de seguro tienes la cabeza llena de pensamientos agobiantes y esta noche vamos a solucionarlo. Vamos a salir, nos vamos a divertir, vas a olvidar todo el asunto y cuando volvamos te puedes quedar aquí para evitar tener que ver a Dean y a tu mamá tan pronto.

-¿Y el resto del verano me voy a dormir al río o cómo? -la miro sin ánimos.

Anna me da un pequeño golpe en la cabeza por ser tan sarcástica y me obliga a pararme.

-Eso lo veremos luego -sonríe. -Ahora, voy a arreglarte este pelo porque ya te empezó a atacar el frizz -me mira divertida y al fin logra hacerme reír.

***
Las luces, el movimiento y la música alta invaden mis sentidos a penas llegamos al pub.

En total nos juntamos los cinco amigos de la vida como cada verano. Ana, Mina y su ahora novio Trevor, Nicholas, uno de mis viejos amigos de la escuela, y Damian el ex de Anna pero ahora mejor amigo con beneficios de vez en cuando, entramos al antro lleno de gente y nos dirigimos directo hacia la barra.