Pᴇʀᴏ ᴍᴀɴ̃ᴀɴᴀ ~ Sᴋᴏɴᴇ (🆃🅴🆁🅼🅸🅽🅰🅳🅰)

C U A R E N T A Y S E I S

Elisa's pov

Me estiré un poco, escuché tronar mis huesos y sonreí al recordar lo que había pasado anoche.

Después de haber pasado un par de horas abrazados, besándonos sin motivo. Volvimos a su hotel y hicimos lo que nuestros cuerpos pedían.

No entregamos mutuamente de nuevo, nos dimos amor en cada tacto y en cada movimiento. Después de tanto, nos volvimos a hacer el amor, nos entregamos el uno al otro y disfrutamos de ser uno solo.

- Extrañaba amanecer así -murmuró con su voz ronca matutina.
-yo igual, te extrañaba a ti -respondí, me acomodé mejor para poder verlo y lo besé. Él sonrió- Tengo hambre, tú no?
- Solo quiero estar contigo. Después de no verte, ni tocarte por un buen rato, ahora solo quiero tenerte entre mis brazos -me tomó de la mano, miré como poco a poco entrelazaba nuestros dedos.
- Los chicos no saben que estoy aquí, ni que hemos vuelto. ¿Crees que se lo tomen bien? -pregunté, si a ellos no les parecía bien me daba igual. Esta vez nada me separaría de Chemi, pero era importante saber quiénes creían que era una buena idea.
- todos lo único que quieren es que vuelvas, y si nosotros dos estamos juntos, y estamos bien significa que volverás. ¿No? -asentí- entonces, ¿Por qué habrían de estar en desacuerdo? -sonrió
- No lo sé, algunas personas creen que no es una buena decisión. O creían que no debía perdonarte nunca -hice una mueca- Algunos incluso decían que veían mi vida con Simon para siempre. No lo sé -alcé los hombros- pero sabes que sí sé -negó- que te amo. Te amo solo a ti y a nadie más.
- Y yo a ti -me besó cortamente- no el doble, ni por dos, ni al cuadrado. Si no con la fuerza de mil latidos y quinientos litros de sangre que queriéndote dar todo lo que tiene, te da todo lo que es -recitó. Sonreí
- Elvira Sastre -lo besé muy despacio- baluarte -me quedé pegada a él- no puedo creer que recuerdes una tontería como esa. Solo porque te dije que era de mis poemarios favoritos -me tomó por las mejillas.
- Recuerdo todo lo que me dijiste, cada pequeño detalle -suspiré- para mí es importante, y creeme... Sí se trata de ti, todo es importante. -reí un poco.
- Eres la persona más tierna del mundo, José Miguel. -me puse de pie- Venga, vamos a comer -levante mi ropa del suelo, me la puse y luego caminé de la mano de él hasta el comedor. La verdad, lo extrañaba tanto, que sentía que esto era un puto sueño.

Subimos al elevador, la puertas iban cerrándose cuando se posaron delante los chicos, que nos miraron sorprendidos. Las puertas se cerraron y el elevador comenzo a bajar. Reí

- Creo que no se esperaban verme aquí de tu mano -me recargué en su pecho
- Ni siquiera yo me lo esperaba, si te soy honesto creo que en cualquier momento voy a despertar -me abrazó. El elevador volvió a abrirse. Delante de nosotros estaba Blon agitado como nunca tomando aire con la boca.

- ¿Estás bien? -pregunté risueña y alcé la ceja. Me miró, sonrió y luego volvió agacharse sobre sus rodillas.
- Espera, necesito un tiempo. Corrí escaleras abajo sin parar, necesito reposar un poco -le acaricié la espalda y esperé un par de minutos hasta que finalmente, se levantó, me abrazó y comenzó a reír- yo sabía que ustedes dos iban a volver, no puedo creer que hayan pasado tanto tiempo separados. Por dios -sonreí
- Orgullo puro. Pero, el amor es más fuerte. Creo -me separé- gracias por estar ahí.
- Siempre Eli, siempre -me tiró un beso. Los demás chicos bajaron tranquilos, nos miraron y sonrieron.

- Da alegría verles tan felices, hace rato ya que lo único que veíamos eran caras largas y lágrimas en las mejillas -bnet me abrazó.
- Lo mejor de todo es que mis vacaciones en Inglaterra terminaron, de vuelta a España -me separó
- ¿Lo dices en serio? -con sus ojos brillantes me miraba cual niño pequeño. Asentí- Jo, mi hermanita está de vuelta.
- Así es... Prepárate España que vengo recargada -reí
- ¿Y Simon? -preguntó Lu, suspiré
- Gracias a él estoy aquí, con Chemi -sonreí de lado- fue muy noble lo que hizo por mi. Jamás habría ido a buscarlo de no haber sido por él -Sibel sonrió
- Ese muchacho me llena de orgullo -reí- no pero en serio, es algo increíble que a pesar de estar enamorado de ti, haya impulsado tu relación con Chemi. O sea, eso es amor en serio, querer tu bienestar antes que el suyo -suspiré
- Es un buen chico -los miré- me hubiese gustado que pudieran conocerlo mejor. O en circunstancias distintas -reí

Finalmente, ellos fueron a desayunar mientras Zasko y yo íbamos a hacer maletas a mi casa. Simon afortunadamente no estaba ahí.

- ¿Lo esperarás para decirle que te vas o te irás nomás? -negué
- Lo esperaré, de hecho, voy a llamarlo para despedirme. -saqué el teléfono, iba a llamarle pero en ese momento él entró.

-* supongo que ya te vas -hizo una mueca, asentí- ¿Todo salió bien?
- excelente -me acerqué- gracias, Simon. Por todo -lo abracé, lo sentí respirar el olor de mi cabello a la par que con sus manos me apretaba contra él.
- Eres una chica fantástica. Gracias por permitirme conocerte un poco más -susurró en mi oído- mereces toda la felicidad del mundo, así que búscala. Y si la encuentras... Lucha por no perderla jamás - besó mi mejilla y nos separamos- te quiero -sonreí
- Tú eres un chico realmente bueno, lamento no haber sido la chica que querías que fuera. Y lamento no haberme podido enamorar de ti. A pesar de que eres el candidato perfecto para cualquier chica -acaricié su mejilla- espero que pronto encuentres a una chica de tu talla. Una chica que valore lo mucho que eres, que sepa amar cada parte de ti. Porque eso te mereces -sonreí, Simon me miró con los ojos llenos de lágrimas- te voy a extrañar, eres bienvenido en España, y te prometo seguir en contacto -asintió- te quiero.

Y finalmente, tomé mis maletas y salí, era una fortuna haberlo encontrado, pero debía dejarlo atrás.