Pᴇʀᴏ ᴍᴀɴ̃ᴀɴᴀ ~ Sᴋᴏɴᴇ (🆃🅴🆁🅼🅸🅽🅰🅳🅰)

T R E S

Elisa

Seguí editando el vídeo que había grabado esta mañana, debía subirlo hasta dentro de 2 días pero igual quería acabar de editarlo rápido.

Mi teléfono empezó a vibrar con una llamada entrante de Eude.

Contesté

— Olé mi niña! —saludo como típicamente hacía— Oye, no te habrás enterado porque es super secreto pero haremos una fiesta acá en el hotel, me preguntaba si quieres venir —sonreí— a menos que trabajes mañana —oh mierda, sí trabajaba mañana.
— Trabajo mañana, pero puedo llegar un poco tarde así que... Claro, voy —escuché un "¡Sí!" De fondo, reí. ¿Quién se había emocionado?
— Vale, te mando la ubicación por Whasap, te quiero mi niña
— Vale, te quiero mucho grandote —finalicé con una risa y luego colgué.

Debía arreglarme.

No sabía quienes habían llegado a Guadalajara, pero Skone no había subido nada así que supongo que no estará acá aún. Aún así, Walls estaba aquí y tenía ganas de conocerle.

Me puse de pie y corrí hasta mi clóset, me puse un vestido negro corto y ajustado, un par de tenis blancos de plataforma y una chaqueta de mezclilla encima. Sencilla y cómoda.

Me di una ducha rápida, me vestí lo más veloz que pude y luego procedí a secarme el cabello con la secadora.

Mientras lo secaba, pensaba en que maquillaje me haría, no quería nada cargado, como siempre.

Una vez terminé de secarlo, lo dejé por la paz para delinearme los ojos, un poco de máscara de pestañas, labial Matte rojo y listo. Un poco de rubor, para no parecer muerto.

Planché mi cabello para calmarlo, tenía un cabello esponjado por naturaleza.

Una vez terminé, tomé mi celular y abrí los mensajes que Eude me había enviado.

No quería invitar a nadie más porque me parecía de mal gusto hacer eso, pero tampoco quería ir sola. Aunque bueno... Podría estar con Eude que era el único que conocía personalmente.

Pedí el Uber y esperé a que llegara, una vez estuvo fuera de mi casa, tomé mi bolso con mi maquillaje, llaves, cartera y teléfono. Subí en el coche y lo vi avanzar hasta el centro de la ciudad, era un hotel muy conocido acá, grande y bonito.

Le pagué al tipo del Uber y bajé, en la entrada solo habían unos señores en traje y algunos chicos rubios.

Saqué el teléfono y llamé a Eude, esperaba que la fiesta no hubiese empezado y que pudiera contestar. Para mí suerte, lo hizo.

— Olé mi niña —sonaba más animado— ¿Ya estás aquí?
— Sí, estoy en la entrada —reí, me giré a la izquierda al sentir una insistente mirada. A lo lejos dentro del hotel estaban Walls y Force. El rubio no dejaba de mirarme. Force miró en mi dirección y sonrió, se puso de pie y juntos caminaron hasta llegar a mí.
— ¿Bajó por ti?
— No, yo te alcanzo —sonreí— bye

— Hola Elisa —me abrazó Manel, dio dos besos en mis mejillas y se alejó— él es mi amigo Ginés —lo miré irónica
— ¿Crees que no lo conozco? —reí— hola Ginés, qué gusto conocerte —le abracé, y luego procedió a darme dos besos igual que Manel.
— El gusto es mío Elisa, tenía ganas de conocerte —admitió— me molan tus vídeos, además de que eres una chica muy bonita —habló sin más, me sorprendió lo directo que era. Pero bueno, ya no éramos un par de niños.
— Bueno, pues muchas gracias. Me hace ilusión que te gusten mis videos, y que te parezca bonita —sonreí de lado.
— ¿Queréis ir arriba con los demás? —preguntó Force, asentí. Caminé entre ellos y subimos al elevador— ¿Chemi ya volvió de su mandado o no? —me ahogué con mi propio aire, Ginés me miró y me tomó por la espalda.
— ¿Estás bien? —preguntó, asentí.
— Sí todo bien, no importa —sonreí, Ginés asintió y miró a Force
— Creo que sí tío, no lo sé —alzó los hombros. El elevador se detuvo, las puertas se abrieron y nosotros salimos. No sabía exactamente a donde iba, pero cada paso que daba me ponía más nerviosa de pensar en que quizás vería a Skone pronto.

Los chicos se detuvieron en un par de puertas, tocaron y en seguida salió Bnet.

— Los estábamos buscando, Necesitamos que vayan con Sucio a comprar cosas —les dijo, luego me miró, alzó las cejas y sonrió— Heeey —sonreí
— Heeey —respondí igual
— No sabía que venías, me han hablado un montón de ti —me abrazó un poco. Luego, igual que los demás españoles me dio dos besos.
— Pues de verdad que a mí también me emociona un montón conocerte, eres increíble —Ginés se aclaró la garganta, lo miramos
— Bueno, dime más sobre lo que debemos hacer —habló, Bnet asintió
— Venga, vayamos adentro —me puso la mano en la espalda y me acompañó hasta adentro. Ahí estaban muchos más Freestylers, sín embargo yo me concentré en que Eude estaba en la esquina hablando con alguien.

Caminé hasta él y lo abracé por la espalda, este se giró sin separarme y me abrazó también.

— Mi niña —me soltó— que ganas tenía de verte, de verdad —sonreí— Mira, ¿Ya conocías a Chemi? —en ese momento, se me heló todo. Me quedé estática mirándolo sonreír. Quería responder o algo pero simplemente me había quedado en Shock. Skone se acercó y ahí reaccioné
— ¿Todo bien? —preguntó con esa voz sensual que le caracterizaba
— Sí sí, perdona —sacudí la cabeza— es que no esperaba conocerte ahora —me acerqué, ahora fui yo la que dejó dos besos en sus mejillas.
— Yo tampoco esperaba verte aquí, pero me alegra —su mirada era pícara, sonreía de lado como provocándome. O quizás todo esto lo estaba alucinando yo.
— Ya llegó el Sucio, ya llegó el desmadre, ¡ya llegué!—gritó desde la entrada aquel host popular de Guadalajara, Sucio Dan.

Reí por aquella entrada que había hecho, en sus manos traía un montón de alcohol y cervezas, Walls detrás también tenía un montón en manos, y force también.

— primero las damas —Sucio me tendió un caballito con tequila en él, sonreí.

Lo tomé de un trago y escuché los gritos de los demás. Que comience la noche.