Los Trillizos Mendes

Capitulo 5

Andrea se encontraba en la habitación, había dormido todo el día sin duda ese tipo le trajo un buen susto e hizo que su presión bajara.

—Debemos decirle.-Dijo Shawn tomando un sorbo de su café.—No podemos perderla.

Andrea's Pov

Me querían, Los tres me querían; Me sentía alguien completamente sucia por empezar a sentir algo de afecto hacia los trillizos.

A mi lado se encontraba Peter profundamente dormido, Con mi mano acaricié su mejilla la cual se sentía rasposa, Sonreí.

—¿Por que no me has besado?.-Dijo aún con los ojos cerrados.—Besaste a Shawn y Raul.

—Yo..

—Si fuera un hombre celoso eso sería un problema.-Rio.

Me agache, con la boca a una pulgada de la Él. Dulce Jesús, ¿como podría resistirme? Su mano se deslizó por mi cara, hacia mi nuca, sus dedos se hundieron en mi cabello y la atrajeron para encontrar su boca.

Suspiré contra aquellos labios y me derretí al entrar en contacto con su pecho, el beso era lento, caliente y completo. No exigente como el de Shawn, ni gentil como el de Raul, caliente. Era la única palabra que me venia para describirlo.

Mis pezones se endurecieron contra su pecho; y mis tetas se hincharon y pulsaban de deseo. Un dolor se construyó entre mis piernas y sentí una repentina humedad, Uni las piernas intentando aligerar el fuego pero solo creció. Sus grandes manos recorrieron mi espalda y acariciaron mi trasero empujándome contra su pene, su dura pene, grande, hinchada, dentro de los vaqueros, empujaba contra mi pelvis.
—¿Puedes sentir cuanto te deseo?.-susurro.

No espero alguna respuesta, en vez de eso volvió a besarme, voraz y esparció una lluvia de besos desde la oreja hasta el cuello.

Me arqueé y gemí cuando sus dientes pellizcaron la delicada curva del hombro, una mano continuaba sobre mi trasero, la otra viajó por mi barriga y bajo el suéter, hasta alcanzar un pecho.

Mi respiración se entrecortó y cuando Peter empezó acariciar un pezón, corrientes de placer irradiaban del pecho en todas las direcciones. Estaba excitada.

Me moví entre sus brazos, estaba cerca de algo maravilloso. Peter quito mi overol subió la blusa y bajo la cabeza, aprete los dientes en anticipación, su respiración caliente acaricio mi pezón, lo fruncio,lo apretó dolorosamente pero él no lo tomo con la boca.

—Por favor.-Jadee.

—¿Por favor que?,Dime lo que quieres.

—Tu boca, quiero tu boca allí

—¿Aqui?.-pregunto besando la suave curva de mi seno.— ¿o aquí?.-beso la parte de arriba del pezón.

Perdiendo la paciencia con su broma, agarro su cabeza y la dirigió al pezón.
—Oh, quieres decir aquí.-Río y chupó el pezón, mi cuerpo estalló por el placer que sentía.

—¡Oh, dios mio!

Lo tome firmemente, exigiendo que su boca no abandonara el pezón, corrientes de fuego corrían en mi barriga y pelvis. La humedad salía a chorros de mi V,¿Como podía estar tan cerca de correrme si solo le estaba chupando los pezones?

—Odio interrumpir, pero tenemos que hablar.-Dijo Shawn perezosamente desde la puerta.

Mis mejillas se tiñieron instantáneamente de rojo y me alejé completamente de Peter, me acomodé el suéter intentando restablecer una apariencia de modestia.

Pero Peter no me dejo tan fácilmente, me abrazo y me dio un beso profundo.

—No le prestes atención, este celoso porque él también quiere estar contigo.

—Eso es verdad.- admitió Shawn encogiéndose de hombros.—pronto seras nuestra.

—¿Vamos? —pregunto Peter acercándome a la puerta.

—Ve tú primero.-le pedí nerviosa, la idea de pasar por el lado de Shawn era suficiente para derretir mis rodillas, prefiero la protección del cuerpo de Peter como una barrera entre Shawn y Yo.

Los ojos de Peter brillaban por la insatisfecha necesidad, cuando me tomo de la mano. Me atrajo junto a él mientras pasábamos por el lado de Shawn, estaba casi fuera de la habitación cuando Shawn me tomó del brazo.

Para mi buena suerte, Peter me libero de su mano y camino despreocupado hacia la cocina. Me vi apretada contra el pecho fuerte y duro como una piedra de Shawn, que me miraba fijamente con sus ojos castaños.

—No hay ninguna razón de tenerme miedo.-dijo serio.—No hay razón de esconderte detrás de Peter o de Raul cada vez que hablo contigo, me alegro de que te sientes segura con mis hermanos, pero ellos no tienen por que protegerte de mi.

Mordí mis labios nerviosa.

—Es solo que eres tan...

—Tan...¿que?.-insistió.

—Tan intimidante.-Dije por fin.

Shawn Arqueo una ceja y me miró divertido.

—¿Raul y Peter no lo son?.

—No,si,quiero decir sí, son intimidantes pero no pienso que me harían daño.-Aprete los labios

—Y piensas que yo lo haría.-Afirmó.
—No intencionalmente.-Dije poco convencida.—Vicent no es nada comparado contigo y aun así....-pare bruscamente,no quería contarle lo que le hizo Vicent.—Si él pudo hacer tanto, ¿porque tu no lo podrías?.

Apretó los labios negándose a decir cualquier otra cosa.Shawn suspiró y se pasó la mano por el cabello.

—Ven aqui cariño.-se sentó en la cama y me sentó en su regazo.—No se lo que te hizo ese bastardo de Vicent y lo intento descubrir, pero es obvio que destruyo toda la confianza en ti misma. Puedo aceptar eso, lo que no puedo aceptar es el miedo que veo en tus ojos cada vez que te miro.

Mi corazón latía dolorosamente,Shawn parecía honesto, duro pero honesto.Me sentí una tonta por sentir miedo cada vez que él me miraba pero sabia sin dudar que jamás seria la misma después de conocer a este hombre, quizá por esto le temía tanto.

—He sido muy honesto contigo..-continuo.—Te deseo más que a cualquier otra mujer alguna vez no estaré satisfecho hasta que estés en mi cama, en nuestra cama con nosotros. Embarazada de nuestro niño, perteneciéndonos en corazón y alma para siempre, no puedo prescindir de eso. No te dejare ir sin pelear, estate segura de eso pero jamás te haré daño y haré lo que haga falta para que nadie te lo haga.

Sentí sus palabras en lo mas profundo de mi alma, ¿como podía no hacerlo? Nadie jamás me había hablado con más honestidad o tanta emoción.
—Danos una oportunidad Andrea, es todo lo que te pido

Sin escuchar la voz que me decía que corriera, Asentí.Una sonrisa lenta,triunfante, se extendió por su rostro.

—Ahora vamos a hablar con mis hermanos.