Todo ocurrió en cámara lenta. Hermione y Draco observaban con deleite la felicidad con la que Destiny abría su carta de aceptación en Hogwarts. El rubio paso su brazo derecho por los hombros de su mujer para sentirla cerca, satisfecho por la reacción y orgulloso, como si fuera el mismo quien estuviera recibiendo la carta.
Scorpius dejo sus juegos para correr hacia su hermana, enredando sus brazos en torno a su cintura, contagiado por la felicidad que irradiaba Tiny. Levantaba el rostro con una enorme sonrisa, una que se hizo mucho más amplia cuando sintió que le despeinaban el pelo con cariño antes de desdoblar por completo la carta.
El pergamino aun olía a tinta fresca, tenía un bonito color paja y era suave al tacto. Sin duda de la mejor manufactura.
Los ojos grises de Tiny bailaron sobre las letras, tratando de gravarse cada palabra. La carta era exactamente como su madre la había descrito, incluso el mismo aroma a pergamino y a tinta que ella describió a la perfección.
Levanto lentamente la vista de la carta, sintiendo los brazos de su hermano aun asidos con fuerza a su cintura. Sus ojos grises se anclaron al gris de los ojos de su padre antes de buscar la mirada miel de su madre. Pudo ver la sonrisa orgullosa, el castaño brillante de sus ojos, incluso la vio mover los labios mas no escucho nada. Todo se volvió silencio y oscuridad.
. . .
Cuando abrió los ojos tuvo que parpadear varias veces para poder ver con claridad, llevándose unos minutos mas en reconocer donde se encontraba. Parecía despertar de un intranquilo sueño, su corazón latía con fuerza golpeando se costillas, aun agitado por las posibles pesadillas que la acechaban, aunque no las recordara.
El edredón de color verde aguamarina de su cama fue lo primero que la hizo saber que se en contrataba en su alcoba, lo segundo fue el familiar olor del perfume que le regalara Scorpius y su madre en su último cumpleaños y que termino derramando en la alfombra por accidente. El aroma seguía de manera persistente aun cuando la alfombra se lavó a conciencia y se aireo toda la habitación, la tenue fragancia aun se percibía, lo que en realidad era un deleite para el olfato.
La luz amarilla que entraba por la ventana le hizo saber que ya atardecía. Incorporándose lentamente se sentó en la orilla de la cama tratando de acomodar sus pensamientos para recordar que había ocurrido.
Lentamente los recuerdos comenzaron a llegar. Había estado toda la mañana agitada esperando recibir por fin su carta de aceptación. Conforme pasaban las horas sus nerviosismos estaban mutando a desesperación mal disimulada, sin importar que Hermione le hubiera intentado tranquilizar con su dulzura habitual, no podía evitar que ser presa de la ansiedad.
Pudo respirar con alivio hasta que tuvo la carta en sus manos, cuando pudo leer con sus propios ojos cada línea escrita en el pulcro papel.
En algún momento todo se volvió oscuridad. Hacia demasiado tiempo que no sufría los inexplicables desmayos. Pero ahí se encontraba de nuevo recuperándose en su cama después del reciente episodio.
Las respuestas siempre eran las mismas, no importaba que el medico fuera distinto. Su salud era aparentemente perfecta. Al no ser un problema físico, siempre se atribuía los desmayos a su sensibilidad, emociones demasiado fuertes la descompensaban.
Con un suspiro frustrado se sentó en la orilla de la cama, dispuesta a levantarse. Seguramente sus padres no estarían tranquilos hasta saber que había despertado.
Se coloco la bata que descasaba sobre de la cama y se calzo sus pantuflas. Apenas dio un par de pasos en dirección a la puerta cuando algo llamo su atención.
-¡Ven! -Escucho la palabra claramente desde los altos estantes donde todavía conservaba sus juguetes más preciados.
La voz le era demasiado familiar, lo que no evito que un escalofrió le recorriera el cuerpo erizando los vellos de la piel. Creció escuchando sus palabras y sintiendo su protección cuando vivía en el abandono de quien creía en ese entonces era su madre biológica, pero en algún momento lo que sentía hacia Isabella cambio hasta el punto de que dejo de escucharla por completo.
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Amar Es Destruir Y Ser Destruido
FanfictionTenía el corazón roto desde hace mucho tiempo, desde el mismo momento en que supo que Harry estaba verdaderamente enamorado de otra chica. Hasta ese día había guardado ciertas esperanzas de lograr ocupar un lugar especial en su corazón y en su vida...