TODO POR TÍ

¿Que haces aquí?

Pov Calle

Han pasado varios días desde que llegamos y Poché parecía estar en las nubes, siempre con la mirada perdida en algún punto de la habitación. Eso me preocupaba, pues se suponía que ya todo debería estar bien, pero cada vez empeoraba más. Ella estaba en su habitación, sentada en su cama mirando el suelo, en cambio yo estaba en la cocina con Vale.

—Y ha dormido?— pregunté a Vale.

—Pues duerme por ratos— me contestó ella.

Vale estaba igual de preocupada que yo, no sabíamos que hacer. Hasta que por la puerta entró Makis y se acercó a nosotras.

—Hola— nos saludo y dejo en el mesón las bolsas que traía —¿Y poché?.

—En su habitación— contestó Vale en lo que fue un suspiro.

Makis hizo una mueca para luego proseguir a sacar frutas de la bolsa que traía, yo miré mi reloj, ya era hora de ir a la universidad, no podía darme el lujo de seguir faltando, ya había descuidado bastante todas mis materias y no me sorprendería reprobar algunas.

—Tengo que irme— informe tomando mi mochila, me dirigí a la habitación de Poché para despedirme.

Ella se encontraba sentada en la orilla de la cama, sus manos cubrían su rostro, me acerque en silencio para dejar un beso sobre su cabeza, aquel acto la hizo reaccionar.

—Ya te vas— me preguntó en voz baja.

—Si ya es un poco tarde— dije acomodando mi mochila, ella asintió de forma lenta.

—Vete para que no llegues tarde a tu clase, ya te atrasaste mucho por mi culpa— ya no quise decirle nada, su voz sonaba como si estuviera rota, no me gustaba verla así, me agaché para estar a su altura y ella me miró, estiró su mano hasta tocar mi mejilla acariciándola un poco y termino acercándose para darme un beso lento, hace días no me besaba y esto se sintió como la gloria, yo puse mis manos sobre sus rodillas.

—Te amo, nunca lo dudes— susurró sobre mis labios y luego se alejó.
Yo me levanté y salí de la habitación.

____

Mis clases pasaron de forma lenta, me sentía un poco cansada y ya quería irme, por suerte solo faltaba unos segundos cuando sonó la campana, guarde todo y salí del salón. Afuera ya me esperaban Paula y Juana quienes venían conversando.

—Traes una cara de muerta— me dijo Juana y Paula la golpeó en el hombro—Auchh!!. —Se quejó Juana, yo sonreí un poco.

—Sigue igual?— me preguntó Paula y yo asentí.

—Su cuerpo está aquí, pero su mente no— metí los dedos entre mi cabello moviendo lo hacía un lado.

—Ya deberían decirle a Arango lo que está pasando— propuso Paula.

—Makis dice que esperemos, ella que cree que reaccionara— les conté.

—Lleva días así — mi frustración crecía.

Paula se detuvo para abrazarme, Juana también se unió, ellas me han estado apoyando estos días, son mi apoyo en estos momentos.
Al separarnos fuimos a la salida, yo me fui a mi camioneta, iría primero a casa de Poché un rato y ya más noche iría a mi casa.

No tarde ni 15 min en llegar al edificio, estacione y baje con rumbo a la puerta cuando alguien me tomó del brazo deteniendo mi caminata.

—Calle— me gire encontrandome con Johan, que hacía el aquí.

—Johan— dije mientras el me soltaba del brazo —¿Que haces aquí?.

—Vengo a verte, digo a verlas— corrigió Johan mirándome fijamente —Venia a ver cómo están.

—Estamos bien— dije de manera cortante.

—Bueno, también vengo a otra cosa— Johan se acercó un poco más a mi, yo di un paso atrás —Tengo que hablar contigo, hay algo que debes saber.

—Calle— escuché que alguien me llamo, era Makis quien se acercaba —Johan, que haces aquí — le  dijo sorprendida al castallaño.

—Como acabo de decirle a Calle, vengo a ver cómo está todo por acá— el semblante de Johan cambió, Makis tampoco estaba muy gustosa de verlo.

—Por que no mejor vamos al departamento y hablamos— propuse y los dos caminaron dentro.

Al llegar al apartamento Johan lo inspecciono, caminaba con los brazos tras la espalda, Makis se sentó en el sofá, yo dejé mis cosas en la mesa.

—Ire a ver a Poché— dije y caminé a la habitación.

Al entrar ella estaba durmiendo, Vale estaba a su lado.

—Vale— la moví despacito.

—Mmm— se sentó en la cama.

—Al fin se durmió— acaricié la cabeza de Poché.

—Si desde hace rato logré que se durmiera— me contó Vale mientras se tallaba sus ojos.

—Puedes venir un momento— le pedí en un susurro, ella asintió.

Salimos de la habitación para ir a la sala en dónde esperaba Johan.

—Johan que haces aquí— preguntó Vale sorprendida.

—Parece que nadie se alegra de verme— gruñó Johan cruzandose de brazos.

—No es eso, solo que no esperábamos tu visita— decía Vale tratando de calmar al castallaño que parecía molesto.

—Mejor díganme dónde está poché.-

—Esta descansando, no la molestes— contestó Makis como si la presencia de Johan fuera algo que la irritara.

Johan tenso su mandíbula para luego irse a sentar al sofá, suponía a esperar que despertara la más pequeña.
El apartamento tenía una vibra extraña, Makis y Arango se miraban mal, mientras que Vale solo parecía incómoda en aquel lugar, yo por mi parte decidí ir a prepararme algo para comer, decido hacer un poco de arroz con pollo, sacó todo del refrigerador y comienzo a preparar.
Estaba tan concentrada cocinando que no me di cuenta cuando Johan entró a la cocina.

—Huele bien— me dijo mientras se recargaba en la pared.

—Gracias— fue lo único que dije volviendo a lo que estaba.

El decidió rondar por la cocina un rato más hasta que llegó atrás de mí, yo me giré.

—Necesitas algo más— le pregunté incomoda por su cercanía.

—Si, de verdad necesito algo— el se acercó más, hasta estar a pocos centímetros de mi cara —A ti.

Discúlpen los Errores, Buenos Días, Buenas Tardes, Buenas Noches.
::: Miletcrnl-KMisterio:::