CAPÍTULO 11

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Cuando salgo del baño me encuentro a Dominic, completamente vestido, sentado en mi cama mientras mira el móvil. 

-¿Estas ya lista? 

Asiento. 

-¿Te importaría llevarme? -le pregunto.

Mientras saco el coche del garaje y lo aparco en la universidad voy a llegar no tarde, si no tardísimo. 

-Si claro, te llevo. 

-Gracias. 

Yo bajo, con la mochila-bolso de la universidad colgado al hombro, hasta llegar a la cocina.

-¿Quieres un donut? -le digo cuando los saco. 

Tengo hambre. 

-Si. -responde al tiempo que apaga su móvil y lo guarda en su bolsillo. Lleva la haqueta colgada del hombro, no puesta.

Me acerco a él y se lo doy. Él me sonríe. 

Con los donuts en nuestras manos salimos a la calle, aunque cuando llegamos al coche los dos nos lo hemos terminado. 

Abrimos las puertas, conductoy y copiloto, y nos sentamos. 

Arrancá y Never to late de Three days grace empieza a sonar. 

La tatareo y veo como de reojo Dominic me mira.

-¿Te gusta Three days grace? -pregunta al tiempo que gira y se mete en otra calle. 

-Si. Tiene algunas canciones geniales, esta esta me encanta. Aunque I hate everything abaut you, es me favorita. 

-Joder, esa canción es genial.

Llegamos a mi universidad y el para en toda la puerte. 

-Gracias por traerme. 

-No es nada. 

Me acerco a él y beso su mejilla. 

Me separo de él, abro la puerta del Lamborghini y salgo del coche

-¿Sabes como te vas a ir?

-No te preocupes. Me las apañare. 

Asiente. 

Le sonrío y me dirijo a las puertas de la universidad. 

Abro la puerta y antes de entrar me giro y lo veo mirándome. 

Arranca el coche y se va, después de mirarme fijamente. 

Entro en la universidad. Faltan cinco minutos para que empiece la tercera clase. 

Me dirijo a mi taquilla a recoger el libro y el cuaderno que me hace falta. Mientras ando veo a Christian, Dani y Paul hablando. 

Christian no me hizo nada, pero no tengo ganas de hablar con él. 

Paso sin mirárlos, esperando que no se figen en mi. Complicado. Somos las únicas cuatro personas en el pasillo. 

-¡Frankie! -escucho que me llaman. 

Christian. 

Viene hacía mi y se pone al lado mía. 

Me coge del brazo, son hacerme daño, y me gira hasta quedar cara a cara. 

-¿Si, Christian? Voy a llegar tarde si me entretienes. 

-Se que te debo una disculpa y...

-Bien. Pues ya hablaremos, voy a llegar tarde. -lo digo enserio, voy a llegar tarde, más tarde de lo que voy ya. 

Las apariencias engañan Donde viven las historias. Descúbrelo ahora