(Lo he vuelto a subir)
Me bajo del coche de Luck y me despido de ellos.
Entro en casa y me quito los zapatos, el bolso y dejo las llaves en la encimera de la cocina.
Hoy me siento súper cansada. Escucho pasos bajar por la escalera y me vuelvo.
Veo a mi padre, lleva la camiseta desabrochada, la corbata a medio quitar y no lleva zapatos ni chaqueta.
-Hola cariño. -se acerca y me da un beso en la frente. -¿Que tal ayer?
-Muy bien. -respondo sonriendo.
¿Debería decirle que un chico durmió aquí anoche?
-¿Algún detalle interesante para contarle a tu padre? -dice mientras intenta quitarse la corbata.
-Anda, déjalo. -le digo.
Me acerco a él y le ayudo.
-He pedido comida china -me informa- te estaba esperando para comer.
-Perfecto, voy a cambiarme y ahora bajo.
Al día siguiente, cuando llego a mi casa y mi padre ha hecho un plato típico español que a los dos nos encanta.
Tortilla de patatas.
Después de comer subo a mi cuarto, me quito toda la ropa y me pongo una camiseta negra y ancha de twisted sister.
Escucho como mi padre sale por la puerta dando un portazo.
He escuchado su móvil sonar, y seguramente lo que le le contaron no sea bueno.
Luego le preguntaré, prefiero no llamarlo ahora.
Me tumbo en la cama y conecto los auriculares al móvil.
Elijo paranoid de Black Sabbath.
Cierro los ojos y dejo que la música me despeje.
Hoy ha sido un día malo. Esta siendo malo. El pasado y el presente se me junta y no se cómo seguir para delante.
Me siento frustrada. Impotente. Débil. Odio sentirme así.
Y llevo igual desde que me levanté.
Christian y Shantel no han ido hoy en todo el día.
No se que le ha pasado a ninguno de los dos, pero no me apetece preguntarle a ninguno de los dos nada.
Media hora después mi móvil suena interrumpiendo la canción que sonaba ahora.
Desconecto los audífonos y descuelgo.
-¿Si? -pregunto desganada.
-Frankie, soy Dominic.
-Oh, si, hola. No había visto quien me llamaba.
-¿Estas ocupada?
-No... Ahora mismo no hago nada importante. Aunque quería ponerme a repasar el horario de mañana...
-¿Puedes hacerme un favor? -me pide.
-¿Que quieres?
Tarda dos segundos en contestar.
-¿Le tienes miedo a la velocidad? -pregunta directo.
Yo no me pienso la respuesta.
-Esto, no. La velocidad es de las cosas que mas me gustan. -le comento.
-Arreglate, a las nueve estoy en tu casa.
-¿Para...? -imtento preguntar.
-Gracias, por esto. -dice, pero no se a qué se refiere -ahora nos vemos.
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Las apariencias engañan
Non-FictionFrankie lleva una vida normal, o eso es lo que todos piensan. Pero su cuerpo cubierto de tatuajes, que no quiera dar demasiada información sobre ella y su pasado, es extraño. Ella tenía todo bajo control hasta que aparecieron. Ahora su fachada esta...