CAPÍTULO 21

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— Dejame conocerte, quiero conocer quien es Karol Sevilla.

Muy bien Karol, respira lento y profundo, no te pongas nerviosa...

— ¿C-conocerme? ¿De qué manera? —intenté mirarlo a los ojos mostrando seguridad pero fracasé en el intento.

— Tengamos una cita, mañana en la noche te espero en el jardín trasero, a las 7... Sé puntual o me enfadaré— susurró esto último antes de irse logrando estremecer todo mi ser.

Aún no puedo creerlo, ¡Ruggero acaba de invitarme a una cita! No puedo con tanta felicidad, necesito tanto contarle a alguien la emoción que llevo dentro, además necesito consejos de que ponerme.

Demonios ¿por qué no tengo amigas mujeres? Me temo que tendré que recurrir nada más y nada menos que con Agus y Mike.

(...)

— ¡¿Una cita?!—exclamaron al unísono.

— ¿Estamos hablando del mismo Ruggero?—preguntó Mike a lo cual asentí.

— De verdad necesito su ayuda, no tengo idea de que ponerme.

— No te preocupes, Agus y yo podemos ayudarte.—Mike abrazó a Agustín quien no se miraba muy contento.—¿verdad Agus?—habló Mike entre dientes.

— Claro—Agus sonrió muy a fuerzas.

— ¡Muestranos lo que tienes chica! Veamos tu ropa—mencionó Michael.

(...)

Mike observaba mi ropa con disgusto, al parecer nada le convencía. Por otro lado se encontraba Agus sentado en el sofá mirando pensativo al suelo y mi querida compañera melena rubia fulminaba a Mike ya que la despertó de su "siesta de belleza".

— Karol te quiero muchísimo pero... Me gustaba más la ropa de Lionel.—mencionó acostandose en el suelo—me rindo.

— A mi me gusta este conjunto, ideal para una cita—Agus salió de su larga reflexión para tomar mi pijama.

— ¿Es un chiste Agustín?—pregunté.

— No...—respondió sonriente—el chico que de verdad te quiera no le importará que ropa uses, te admirará a ti y lo que hay en tu interior.

Sentí una muy bonita sensación al escuchar eso, realmente es algo muy profundo y muy lindo.

— Te quiero muchísimo Agus—lo abracé sin dudarlo, sentí su mano acariciando mi cabello.

— No tanto como te quiero yo a ti.

No sé si fue mi imaginación pero me pareció sentir el corazón de Agustín latiendo fuertemente. Me separé del abrazo para seguir con la misión de escoger un conjunto.

— Bien, usaré algo que Karol Sevilla usaría en un día normal como hoy, como mañana y como siempre.

Michael y Agus aplaudieron ante mi comentario.

— ¡Bien! Me alegra su momento de amistad, pero ¿se podrían largar? Necesito dormir mis 8 horas para permanecer bella.—mencionó mi compañera.

— Lo siento bella dama, nos retiramos.—Mike hizo una reverencia.

— No trates de ser alguien más mañana, sé solo Karol Sevilla.—me sonrió Agus antes de retirarse.

Tengo los mejores amigos del mundo mundial.

(...)
Empiezo mi día normalmente, estoy muy nerviosa por lo de la noche, aún falta mucho para ir a mi cita pero tengo muchas cosas que hacer, empezando con mi caminata matutina.

Adoro mucho los sábados por que es el día de más relajo para mi.

Miro mi reloj y veo que son las 11 a.m, no sé si es mi nerviosismo o siento que el tiempo se está pasando muy rápido. Vuelvo a mi habitación y me doy un gran baño para después bajar a almorzar.

— No te olvides de nuestra cita—su voz con ese acento me susurra de repente.

— Si no hubiera reconocido tu voz, mi puño estaría en tu cara.

Sonrió divertido para después sentarse frente a mi.

— Pequeña pero peligrosa.—ambos reímos y por un momento me di cuenta que es tan lindo reír de esta manera.

— ¿Qué tienes planeado para esta noche?

— Es una sorpresa Karol.

— ¿Sorpresa buena o mala?

— ¿Existen las sorpresas malas?—preguntó sorprendido.

— Si, cuando tu piensas que sucederá de una manera pero en realidad es todo lo contrario, para mi es una sorpresa mala.

— Créeme que será una buena sorpresa.—sonrió provocando agitación en mi corazón.

...

Perdonen mi ausencia, después de mucho por fin les pude actualizar...

Internado para VaronesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora