Goretober

Baño de sangre

Quentin Beck había tenido un pésimo día en el trabajo por lo que en la noche llegó molesto y cansado a casa. En esos momentos no quería saber nada del mundo, realmente le importaba una mierda y sólo deseaba descansar unos momentos. Al menos tendría la casa sola, consideró al notar que su tan acogedora morada se encontraba en completo silencio. No estaba mal, pero también no era reconfortante.

Con pasos lentos, fue a la sala para poner algo de música; pronto el silencio incomodo que le envolvió fue reemplazado por la dulce voz de Billie Holliday con la maldita canción de Gloomy Sunday que con su melodía se decía, llevaba a las pobres almas que los escuchaba es un suicida. Bueno, ese si no era su caso, tampoco estaba mal para poner una navaja en su cuello o un arma en su cabeza.

La canción continuó y mientras meditaba qué podría hacer a continuación -podría comer algo, pero no tenía apetito, beber hasta la inconsciencia, pero apreciaba su hígado o dormir- escucho una voz, un tanto alejada, casi fantasmal.

—¿Quentin? ¿Eres tu? —le pregunta quedó impregnada en el ambiente y el castaño sólo puede reprimir un suspiro lleno de resignación. En serio, necesitaba estar solo y aunque quería demasiado a Carlton Drake, ese no era el momento.

—Si, soy yo —contestó al fin, sin querer hacerlo antes de sentarse en el sofá.

—¿Puedes acompañarme? —de nuevo preguntó pero Beck sabía que eso no era sólo una pregunta. No tenía opción más que ir a su lado, no importaba cuáles eran sus propios deseos.

Además, ya había tenido suficiente peleando con el bastardo de Stark como para seguir discutiendo con su "amor" cuando sabía de antemano que tenía todas la probabilidades de perder..

—En un momento, cariño —dijo y al no recibir respuesta alguna sólo se acomodo en uno de los lujosos sofás de su sala. Si iría, no era tonto, pero podía tomarse su tiempo igual unos minutos no mataría a nadie.

Esos minutos, aunque escasas a la escala de ser patéticos resultaron ser realmente afectivos. Claro, seguía molesto como el infierno, pero sentía que podía tomar el control del asunto y continuar con su farsa de ser alguien "normal" Al menos para su amado, el que seguía esperando.

El viaje hacia el cuarto de baño había sido relativamente corto y nada trascendental como para dar detalles. Tal vez eso no era nada tan malo, razonó mientras abría la puerta sin seguro. Tal vez eso no era tan malo, razonó mientras abría la puerta sin seguro. Un baño con tu pareja podría quitarle sin tensión. Eso era lo que pensaba hasta que olor tan distinguido de la sangre inundó sus fosas nasales. No estaba nada mal.

—Quentin ¿Por qué has tardado tanto? —preguntó el moreno mirandole con un reproche, Se veía demasiado adorable e incluso cuando estaba sumergido en esa bañera blanca llena de sangre. El aludido no pudo evitar sonreír.

—Lo siento, no quería hacerte esperar —se disculpó lo mejor que se permitió antes de despojarse de su ropa y unirse a su amado. Después de todo, había demasiado espacio para los dos.

Cuando se sumergió en el espeso y un poco cálido líquido carmesí suelta un gemido de satisfacción de manera involuntario. No sabía que tanto necesitaba esto, pero realmente lo hacía, Se reacomodo en la bañera, viendo como Carlton Drake se acercaba más a él posicionándose en medio de sus piernas para acurrucarse como un gato que busca algo de atención. Atención que no tardó nada en proporcionar cuando lo atrajo contra éL. Sus dedos manchados de sangre haciendo que la sangre manchara ese hermoso cabello negro.

Carlton Drake era un loco, que tras una fachada buena se escondía un monstruo. Podría asustarse si él no estuviera tan loco y aunque se lo negará a Tony, tenía razón. Era un desquiciado, pero sólo así, podría disfrutar de su amor bañado de sangre.

...

Y les dejo esta bonita y perturbadora historia :3 Realmente queria escribir de esta ship, digo hay fan arts y eso, pero ¿y los fics? Muy bien, gracias. No, yo quería algo, así que sólo lo hice. Estoy aprovechando esto para ser más experimental, ojala les guste.

Chao