— Dejando de lado la idea de decirle una locura a nuestros amigos —Empezó Ron, Rómulo, Harry no debería olvidar el actual nombre de su amigo— Quiero enterarme más de lo que hicieron.
— Ya te dijimos todo lo que hicimos, pero claro, haz la pregunta que quieras —Señaló Harry con una sonrisa amable.
— ¿Lo prometen? Quiero que prometan que responderán cualquier pregunta que les haga —Pidió el sobrino de la subdirectora.
— Lo prometemos —Respondieron al unisonó viéndose entre ellos con expresiones confundidas ¿Qué era lo peor que podía preguntar?
— ¿Cómo fue cuando lo hicieron? Cuando tuvieron sexo me refiero —Preguntó con una sonrisa divertida viendo como sus amigos se ruborizaban y casi que se atragantaban con su saliva—, ustedes dijeron que podía preguntar lo que sea y responderían, no se irán a retractar de sus palabras ¿O sí? —Les retó con una sonrisa malévola, sabía que sus amigos no se retractarían: primero Harry era alguien de palabra incluso sí eso no le terminaba de gustar, dos, Hermione jamás se retractaba de sus palabras por orgullo.
— Harry fue un asco —Admitió la chica ruborizada viendo a otro lado— Honestamente tenía más acción masturbándome que teniendo sexo con Harry —Añadió sin atreverse a ver a sus dos amigos, a uno por responderle la pregunta más incómoda posible en el mundo, y al otro porque le estaba diciendo que era un asco en la cama.
— ¡Hey no puedes culparme! Sí te soy sincero no sabía qué hacer, la relación sexual más fuerte que he tenido antes de eso era masturbarme, y, bueno, para ese punto ya sabía de mi gusto por los hombres y que no soy el activo en la cama precisamente, incluso debí beber un frasco entero de poción contra la disfunción eréctil para hacer algo y la situación ya era muy incómoda para ese punto —Comentó casi en un susurro avergonzado el chico, no podían culparle, puede que nunca estuvo con un chico pero sabía que él era un muerde almohada incluso antes de saber que podía tener hijos y no podía hacer que el cuerpo de Hermione de ese entonces provocara algo en él como para experimentar.
— ¿Y la orgía? Digo, fueron hombres y mujeres los que te manosearon tanto que sigo sin creerme que salieras virgen de ahí —Preguntó Rómulo sacándole un estremecimiento mientras el rubor se extendía más al recordar eso.
— Salí virgen de ahí, me manosearon varias personas pero salí virgen de ahí —Admitió avergonzado y moviendo las manos puntuando sus palabras — Maldito Cedric, tejón manipulador, malditas serpientes pervertidas y leones calenturientos —Gruñó eso último esperando que sus amigos no lo escucharan.
— ¿Serpientes pervertidas? —Preguntó Hermione viendo como el rubor de Harry se extendía por todo su rostro, jamás había entrado en detalles de lo que pasó.
— Varios Slytherin, entre ellos Draco y Blaise, también me manosearon —Admitió mordiendo su labio recordando que Draco parecía tener un fetiche con sus pezones los cuales descubrió eran muy sensibles.
— No olvides que Fred y George te intentaban dar un masaje en el trasero —Comentó calmadamente el castaño logrando que el chico lo viera estupefacto.
— ¡¿Cómo sabes eso?! —Preguntó casi en un chillido sin poderse creer que su amigo supiera tanto de ese evento.
— Yo también estaba allí - dijo como si nada - Te sorprendería lo buenos que son los Ravenclaw con las mamadas —Recordó el chico con una sonrisa— Aunque me sorprende que nadie te diera una nalgada, tu culo lo pide a gritos, por cierto Hermione ¿Le diste alguna nalgada? —Preguntó viendo a la chica dejando de lado la cara sorprendida de su mejor amigo que no lograba procesar lo dicho por su amigo.
— En realidad estaba pensando en otras cosas y perdí la oportunidad —Reconoció la chica apenada y sonando triste.
— ¿Qué diablos estabas diciendo de mi culo? —Preguntó o exigió casi con un chillido el chico a pesar de tratar de ponerse lo más serio posible.
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¿Evans?... No, Peverell y ¿Serpientes?
FanfictionLuego de la batalla de Hogwarts hay muchas muertes que pesan sobre el niño que vivió. Dos muertes posteriores sobre sus hombros es todo lo que toma Harry Potter antes de tomar una decisión definitiva. Pero la muerte sabe quién es su Amo y le ofrece...