Capítulo 38

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Connor no necesitaba ver las caras de los demás ocupantes de la habitación para saber qué tipo de miradas le dirigían su familia y saber que había metido la pata tan al fondo que su mente ya jugaba con la posibilidad de que no existiera una manera de arreglarlo, volteó a ver a Harry (ya que su mirada era la más fuerte) que, pese a no haber conocido a su abuelo, tenía la misma mirada verde helada que le hacía saber que le iba a caer un regaño monumental, ¿Por qué Harry, siendo un portador, resultaba parecerse tanto a su abuelo? ¡Ni siquiera lo conoció! 

— Creo que no podremos remediar esto —Murmuró Petunia intentando romper el hielo, aunque su comentario no había ayudado a su padre, la mirada que le dirigió su madre se lo gritaba 

— Ya sé - gimió Connor - Sé que envíe todo al diablo —Reconoció con cierta vergüenza— Todas nuestras tapaderas se fueron al demonio solo porque no supe mantener mi maldita boca cerrada, Adrastos me estaría azotando con su bastón por ignorar tanto sus lecciones —Se quejó dándose una palmada en la cara. 

Su padre había sido de la vieja escuela, le gustaba impartir lecciones a base de memoria muscular, él había aplicado muchas veces cuerdas en ambos hermanos para mantenerlos rectos a la hora de comer cuando eran niños y su bastón para golpear sus piernas sí pensaba que alguno estaba siendo un tonto y dejaba de lado la astucia que se suponía debía caracterizar a su familia, aunque con su hermana era más confrontacional mágicamente hablando, con él era más rudimentariamente muggle; lo que nunca supo sí era bueno o malo considerando que su hermana solía quejarse mucho más que él, aunque fácilmente solo era una reina del drama como su hijo.

— Vamos, Connor, cariño, seguro podemos encontrar una solución —Intento calmarle Beatriz intentando acercarse para darle algo de apoyo emocional.

— No, es un desastre, arruine todo lo que hemos planeado durante años, ya la veo, Ariadna me debe estar esperando en la muerte con su mejor hechizo de tortura a mano —Se quejó estresado.

— Tío Connor, deberías relajarte, estás demasiado tenso —Intento interceder Lily viendo que su tío estaba por sufrir un ataque nervioso, Connor estaba dispuesto a hablar cuando otra voz se escuchó en la habitación.

— Cálmense —Fue la absolutista orden de Harry, usando ese tono que tenían tanto su madre como su abuela que hacía que un silencio mortal se instalara en la habitación obligándolos a que todos los seres vivos guardaran silencio— Aún no está todo arruinado, mientras no sepan nuestro apellido podemos fingir ser una familia de magos de baja clase, algo que no amerite una divulgación de información —Pensó con más frialdad.

Aunque había sido un plan que no quería poner en marcha (porque eso todavía lo ponía en el radar de los sangre puras al ser de una familia de magos aunque solo fuera una de reciente generación de sangre puras, traería preguntas y la posibilidad de investigación) había pensado en la posibilidad de que a él o a Lily se les podría escapar un fragmento de la verdad, todos sabían lo temperamentales que podían ser y Hermione se encargó de meter la posibilidad como sí fuera un tumor en su cerebro para que pensara en un plan alternativo desde antes y no joderlo todo, y ahora que se dio la necesidad (increíblemente no por ellos, aunque no culpaba a su tío, fue criado como un sangre pura a pesar de ser un squib mestizo, y eso no es algo que se olvide, menos para alguien que fue criado como sí fuera la jodida realeza como un Slytherin y ¡No! Eso no significaba que él o Lily hayan crecido mimados y con una gran cabeza o su madre antes que ello o su tío, solo que nadie les iba a faltar el respeto), ahora que la situación se había dado solo tenía que ajustarlo.

— Walburga no podrá reconocer nuestros rasgos por alguna nación, la familia de nuestra madre tiene antecedentes griegos, romanos y egipcios lo suficientemente marcados como para confundirla, y la sangre de papá tiene rasgos búlgaros y noruegos de últimas generaciones, no podrá reconocernos fácilmente, lo que nos da un margen de tiempo —Añadió Lily con una sonrisa ante la realización.

¿Evans?... No, Peverell y ¿Serpientes?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora