Capítulo 1: Quiero ser

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-Guapo, es hora de levantarse.

Calle intentaba levantar a su hijo para ir al colegio, pero cada vez se escondía mejor en la sábana.

-Ángel... Vamos o no te dejaré ir al parque cuando regreses del colegio. -Calle colocó sus manos en su cintura esperando el resultado.

Ángel bajó de la cama a toda prisa y se metió al baño de la habitación.

-¡Ese no es tu baño, Ángel! -Calle sonrió mientras arreglaba la cama.

-¡Ya voy! -Gritó el niño y pasó corriendo solo en su bóxer mientras intentaba taparse y Calle rió sonoramente.

La Castaña entró al baño y pasó al armario que había allí.

Su bata de baño cayó al suelo cuando encontró la ropa que usaría en su día.

El timbre de la casa sonó y la Castaña se apresuró a terminar de abotonarse la camisa para bajar.

-¡Buenos días! -Saludó a la ama de llaves que recién llegaba.

-¡Buenas días, Doctora! ¿El galán ya está listo? -Le preguntó y Calle negó con su cabeza.

-Subiré para revisar que se haya terminado de bañar. -La ama de llaves asintió y entró a la cocina.

-"...Fight so dirty, but your love so sweeeet. Talk so pretty, but your heart got teeeeeth. Late night devil, put your hands on me and never, never, never ever let go..."

Calle se detuvo en la puerta del baño de su pequeño al escucharlo cantar con toda la emoción posible. Empujó la puerta para encontrarlo con su pequeña bata de baño mientras se peinaba frente al espejo y cantaba.

-Me has salido cantante. -Calle se cruzó de brazos y su hijo se volteó a verla.

-Hoy es el día del trabajo. -Dijo con una gran sonrisa.

-Lo sé, cariño. -Calle se acercó para ayudarlo a peinar. -¿Sabes qué quieres ser cuando grande?

-Motorista.

-No hijo... Un trabajo. Necesitarás un trabajo estable. Doctor, cantante, actor... ¿Qué quieres ser?

-¿Puedo dibujar? -Le preguntó curioso.

-Sí, puedes ser pintor.

-No, no... El otro que dibuja casas.

-¿Arquitecto? ¿Quieres ser arquitecto? -Calle terminó de peinarlo.

-Eso mismo. ¿Puedo serlo?

-Puedes serlo si lo quieres.

-Quiero ser un motorista arquitectónico.

Ángel salió corriendo del baño para ir a su cama donde Calle ya le había dejado la ropa colocada.

-Hoy te iré a buscar yo, Ángel.

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