My new life. My new family.

35

-¡Eres un tramposo!- Exclamé indignada mirando al de ojos azules quien sonreía triunfante.
-No es verdad.
-¡Claro que es verdad! Me dijiste que tenía un bicho en la cara y así lograste distraerme y dispararme.- El chico sólo sonrió y negó con la cabeza.
Estábamos jugando con pistolas de agua. Éramos dos equipos: Dick, Dami y yo. Tim, Jay y Conner. Jason había logrado derribar a Dick, y Dami a Tim. Ahora sólo quedaba Jay y Conner contra Damián. Y lo peor de todo es que estaba a punto de dispararle a Kent pero este me dijo que en mi cara estaba un bicho y me asusté demasiado y fue así como logró sacarme del juego.
-No es mi culpa que te distraigas muy fácil.- Vi que Jason desde la ventana le apuntaba a Damián.
-¡Dami cuidado!- Mi hermano volteó a verme y le hice una seña de que diera la vuelta. Volteó y aunque no alcanzará a oír, supe que Jason había maldecido.
-Tu sí eres una tramposa.
-No es mi culpa que de mi boca haya salido "Damián cuidado".- Le disparé y el me miró con el ceño fruncido e hizo lo mismo.-¡Oye!
-Tu empezaste.
-¿Ah si?- Le volví a disparar y seguimos así por un buen tiempo hasta que Dick nos llamó la atención diciendo que Damián había ganado.
Entramos a comer galletas. Poco después llegaron Roy y Steph. El mayor de mis hermanos decidió invitar a unos amigos para  divertirnos un rato.
Seguíamos comiendo galletas. Estaba en medio de Roy y Steph.
-Entonces ¿pudiste manejar la situación?- Me cuestionó la rubia. Fruncí el ceño confundida.
-¿Cuál situación?
-La de ya sabes quien.- Miró a Conner. Supongo que quería actualizarse sobre las últimas noticias.
-Ah esa...si, quiero decir, todo ha ido bien.- Tomé del jugo que tenía en el vaso. La rubia me miró insistente, supongo que quería detalles.- Te cuento después.
-¿Contar qué?- Ambas volteamos a ver al pelirrojo, pues se supone que no estaba dentro de la conversación y que tampoco nos prestaba atención.
-Cosas de chicas.- Dijo Brown con la intención de que Roy no hiciera más preguntas.
-Soy hombre, así que...pueden pedirme consejos.- Lo miré con una ceja levantada, el sólo alzó los hombros.
-¿Por qué te pediría un consejo?
-Ya sabes, te gusta un chico y no sabes como atraer su atención.
-A mi no me gusta nadie.
-Además eres una muy mala influencia.- Exclamó Stephanie poniéndole fin a la conversación.
Después de que jugaramos y habláramos por un buen rato, todos se dispersaron. Roy y Jason fueron a un lugar no apto para menores, es obvio que fueron a beber. Tim tuvo que trabajar en un caso junto a Conner ya que me robé a su novia para platicar sobre las últimas cosas que nos han pasado. Damián fue a entrenar y Dick, simplemente salió.
-Bien...he hablado más con Conner.
-¿Y?
-Hace unos días salimos juntos.- El rostro de mi amiga se iluminó por completo. Sonrió.
-¿Solitos?- Dijo a punta de gritar de la emoción.
-Solitos.
Y tal como lo esperé, soltó un gritito tipo de fangirl. Me tomó de los hombros y me zarandeo aún con su enorme sonrisa.
-¡Tuvieron una cita! ¡Es genial Adele!
-No, Steph...fue una NO cita.- Su sonrisa se desvaneció al terminar la frase. Me miró con desaprobación. Negó repetidas veces tocándose el puente de la nariz.
-No lo puedo creer, ¿por qué me desilusionas así?
-No me dejaste terminar...hablamos de muchas cosas y ya. No ha pasado nada entre nosotros.- Volvió a negar y me miró seria.
-Escucha, esto es lo que vas a hacer...tienes dos opciones, la primera: conquistas a Kon o, la segunda: tomas un viaje a Júpiter.- La miré tratando de aguantar la risa, porque parecía que bromeaba, pero su cara seria me hizo comportarme.
-Creo que es más fácil tomar un viaje a Júpiter.- Hice una mueca. La rubia se puso de pie -estábamos sentadas en mi cama- y me dio una mirada "escalofriante". No hay nada más escalofriante que la bati-mirada.
-No es tan difícil. Sólo tienes que ser tu y mostrarle que tienes cierto interés por él...y ahora que lo recuerdo, dijiste que te olvidarías rápido de él.
-Eso pensé.- Arrugue el entrecejo molesta, estaba molesta conmigo.- Pero creo que me gusta más de lo que pensé.
-Entonces hay que averiguar sí siente algo por ti.- Me miró con una enorme sonrisa. Me levanté de la cama y sonreí.
-Pero antes...ah...quiero saber algo.- Dije desanimandome un poco. -¿Crees que Conner aún sienta algo por su ex?- Steph abrió los ojos ampliamente. Supongo que no se esperaba esa pregunta.
-Eso...es una buena pregunta.- Se sentó nuevamente y me miró aún sonriendo.- ¿Sabes? Sí aún sintiera algo por su ex, ¿no crees que ya hubiesen regresado?
-Tal vez, pero por más que quieras a una persona y esa persona te haga daño o no te quiera, no vuelves a esa relación, porque te hiere.- Miré mis manos. Brown me dio una palmadita en el hombro.
-Lo bueno es que tienes muy claro como funcionan las cosas en una relación...no te estreses, sí las cosas se van a dar, se van a dar y ya.- La miré más animada. Me senté a su lado.
-Tienes razón.

Estaba escuchando música mientras dibujaba en mi libreta cosas sin sentido, hasta que alguien toco la puerta de mi habitación. Me paré de mala gana porque estaba muy cómoda sentada y porque no tenía ganas de decir "pase". Abrí y me encontré con Dick y Jason, ambos me miraban sonrientes.
-¿Debería asustarme?- Pregunté realmente preocupada.
-Necesitamos pedirte un favor.- Exclamó Dickie.
-¿Cuál?- Jay me tomó del brazo y me arrastró de nuevo a mi habitación con el mayor de los tres siguiendonos.
-Escucha con mucha atención enana...¿recuerdas a Oliver Queen?
-Green Arrow, lo recuerdo muy bien ¿qué con él?
-Tiene un pequeño bebé enfadoso...Richard, Harper y yo queremos ir a un lugar, pero a Roy le encargaron cuidar a Oliver Jr, y necesitamos a una niñera. Queen tomó unas vacaciones con su esposa, Felicity así que...- La miré con una ceja levantada. Jay y Dick se mostraban amables.
-¿Cuál es el punto?
-¿Quieres ser una niñera por un día?- Cuestionó Grayson con su mirada de cachorrito.
-Tengo que cuidar a Buddy, el cual por cierto no sé donde está...supongo que está jugando por ahí.
-Damián cuidará a tu bola de pelos, el ama a los animales y tú amas a los niños.- Comentó Jason como sí ser una niñera fuera lo más simple del mundo.
-¿Quién dijo que amo a los niños?
-Desde hoy hasta mañana los amarás...sólo di que si.
-Pero me tendrán que pagar.
-Enana prácticamente te bañas en dinero, pero está bien, ¿cuánto quieres? ¿un dólar?- Me reí al ver que Todd sólo traía un dólar en su cartera.
-No quiero ni necesito dinero, me lo pagarán con algo más, después pienso con que. Pero díganme, ¿cómo se llama el "pequeño bebé enfadoso"?
-Su nombre es Henry, y tiene dos años.
-No está tan bebé.
-Sólo tenemos que irnos ya, iremos a la mansión Queen.- Tomé las cosas necesarias para sobrevivir: teléfono, cargador, libro, comida.
Después de un no tan largo camino hacia Star City, me encontraba abrazando al pequeño Henry Queen que no dejaba de jalarme el cabello.
-Ma-ma.
-No soy tú mamá.
-Pa-pa.
-Tampoco tu papá...Roy dijo que te dormirías pronto.- Me sonrió. Era un lindo bebé, tenía los ojos verdes y el cabello rubio y unos adorables cachetes.
-¿Qué dices de un cuento?
-Estellita.
-¿Este, qué?
-Cacion, estellita.- Abrí los ojos ampliamente. A pesar de que no entendía muy bien el idioma bebé, sabía que quería que le cantará.
-No.
-Shi, estellita.- Hizo un puchero y sus ojitos se llenaron de lágrimas. Ya iba a llorar.
-No, no llores, te cantaré estrellita, ¿de acuerdo?
-¡Estellita!-
Lo puse en la cuna y suspiré. Creo que es más fácil ser Batman que cuidar a un bebé. Iba a empezar a cantar pero mi celular sonó, indicando que me llamaban. Vi que era el número de Conner y de inmediato contesté.
-¿Estás ocupada?- Miré a Queen Jr, que estaba a punto de llorar, supe que necesitaba ayuda.
-Soy una niñera, y necesito ayuda ¿puedes venir a la mansión Queen?
-No estoy tan lejos, voy enseguida.
-Gracias.
Mi héroe personal no tardaría en llegar, eso me alegro porque Conner y yo cuidariamos a un bebé. Será increíble, supongo. Aunque me gusten los niños, debo admitir que es la misión más difícil que me han asignado.