DESTERRADA (historias De Darien Y Serena)

Capitulo # 32

DESTERRADA
Capítulo # 32
DOS HOMBRES ENAMORADOS DE ÁNGELES.

Narra Zafiro.

Veo caer a mi ángel al suelo y llorar, camino con premura para llegar hasta ella, pero el ángel que la acompaña me muestra una señal de alto con la palma de su mano, quisiera no hacerle caso, pero algo en mí me dicta que eso debo hacer, siempre he respetado la divina providencia; minutos después Rei se levanta y sigue hablando con él , al parecer le pide instrucciones para proteger a Serena, este le dice que permanezca a su lado, que él es solo su guía, pero no puede decirle lo que debe hacer, lo veo descender un poco del altar en dirección a mi, coloca su mano en mi cabeza y pausadamente me dice

—Miguel:El cielo se regocija por que tu amor sincero le devuelve un ángel y por que también le regalas a la guerrera que liberará a la humanidad de toda maldad.

No entendí ni una sola de sus palabras, pero tampoco pregunté, sentí que no era digno de cuestionar a semejante ser tan maravilloso, mi asombro aumentó cuando segundos después agitó sus alas y se levantó del piso como si fuera una pluma muy liviana para salir volando hacia el exterior, cuando lo vi desaparecer volví la mirada a mi hermoso ángel, la encontré con los ojos aún llenos de lágrimas y con sus manos acariciando suavemente su abdomen, me acerqué algo extrañado por lo que veía:

—Zafiro: Amor, que pasa?, le pasa algo a tu estomago?

Rei levantó la mirada lentamente y me sonrió, extendió una de sus manos pidiendo una de las mías, no dude un instante y se la entregué; la palpo suavemente y la condujo hasta su abdomen, trate en entender lo que pasaba pero la verdad es que no me era posible.

—Rei: Vamos a tener un bebé.

Quede paralizado al escuchar esas palabras, Rei no bromeaba, sabía que sus palabras siempre eran muy enserio.

—Zafiro: Vamos a tener un bebe?

Rei asintió con la cabeza y el mundo se me nubló... Desperté minutos después tirado en el piso al escuchar que mi ángel me llamaba por mi nombre preocupada, pasé las manos por mis ojos, necesitaba volver a preguntar, que tal que hubiera escuchado mal

—Zafiro: Que vamos a que?
—Rei: Que vamos a ser padres, tu y yo vamos a tener un bebé.

Me levanté del piso afanosamente y corrí de un lado para el otro gritando muy fuerte

—Voy a ser padre, vamos a tener un hijo, Dios gracias, gracias no merezco tanta felicidad, pero gracias.

Volví a Rei y la besé desesperadamente, ella era a quien más amaba y ahora iba a darme un hijo, no podía creer que esto fuera posible, eso quería decir que ella ya era humana y que había decidido quedarse conmigo; salimos de la catedral al escuchar movimiento, al parecer habían empezado a llegar las personas, subimos al auto y le dije emocionado

—Zafiro: Pensé que me habías dicho que aún no te habías decidido a ser humana amor, cuando entregaste tus alas, que ahora puedes estar en embarazo.
—Rei: Yo aún no entrego mis alas, sigo siendo un ángel Zafiro.
—Zafiro: Dijiste que eso no era posible las veces que te lo insinué, sabes que muero por tener un hijo contigo, entonces era falso y solo no querías tener hijos.
—Rei: No te mentí, los ángeles no pueden tener hijos, esto que está pasando no era posible hasta hoy.

No pregunté nada más, me limité a conducir, prefería pensar que había hecho algo muy bueno y por eso se me estaba recompensando, muy en el fondo sabía que no era tan así, que algo más estaba por pasar y sin duda mi bebé tendría algo que ver, pero por ahora quería disfrutar de la alegría de saber que iba a tener a un angelito, con el ser que amaba, yo iba a tener un hijo con el ángel del Orden!.