HOMELESS | YM. | EDITANDO

Amueblado la pasteleria.

Al día siguiente la pequeña  pasteleria no abrió, sin embargo todos ayudaron a mudar los pocos muebles que esta tenía entre disculpas con clientes que preguntaban su abrirían.

Primero en cajitas acomodaron los pastelitos y demás postres, en cajas grandes las bebidas que estaban servidas y en otras las decoraciones y utensilios del local.

Habían organizado la mudanza, entonces entre varios alfas altos y fornidos comenzaron a llevarse las mesas y las máquinas con mucho cuidado hasta el bus que tenía una caja grande de remolque donde estaban siendo guardados los muebles.

Con mucho mucho cuidado las vitrinas y los mostradores vintage que decoraban el sitio.

Una vez todo el tigre se encargo de cargar sobre sus hombros para que este pudiese bajar su cartel rosa con luces que indicaba el nombre de su pasteleria.

- Gracias gatito - dijo al tocar el piso de nuevo.

- Dame, yo lo llevo - le pidió y este sonriente se lo dio.

- ¿Ya está todo en el camión? - preguntó Jin - ¿Jungkook, juntaste los azucareros y eso?

- ¡Sii hyubggiee! - Jin asintió y le indico que ya subiera a la camioneta de Nam que le había prestado a Jimin para que también allí guardarán unas cosas y las pudieran transportar.

- ¿Y Taehyung? - preguntó Jimin.

- Dijo que tenía una sorpresa para conejito al llegar allá - contestó Jungkook mientras todos subían a la camioneta.

- ¿Qué sorpresa Seokjin? - preguntó el Tigre

- ¿Qué te hace pensar que yo sé?

- ¡A callar! - gritó el pequeño rubio mientras en el GPS ponía la dirección y encendía el motor.

- ¿hyung, puso el cartel de la nueva dirección?

Jin asintió con una caja en sus piernas, Jimin asintió y empezó a mover el auto hasta llegar a la carretera que los llevaría al sitio, atrás era seguido por el camión de mudanza.

Había un poco de tráfico pero no tardaron más de 30 minutos en llegar, estacionó en el mismo sitio de la última vez y empezaron a bajar las cosas después de que abrió el local que entre todos habían limpiado el día anterior.

Primero todas las máquinas fueron a la casa arriba donde fueron colocados en la cocina que tenía el ascensor hacia abajo, fueron enchufados y los pasteles claro que fueron a parar a las vitrinas abajo que tenían enfriadores automáticos.

Las mesas comenzaban a ser acomodadas cuando un camión llegó.

- ¡entrega para Kim Jungkook y entrega para Park Jimin ! - preguntó un camionero.

- ¿Hay alguna para Seokjin? - este reviso su tabla y negó.

- Sigue tratándolo mal - dijo Jimin burlón - pensé que no habría pedido los muebles.

- ¿Pediste más? - Jimin asintió.

- Pues con algo tenemos que llenar los otros cuartos así que compre pequeñas salas con mesitas, algunas sillas colgantes y decoración.

- Mi regalo, mi regalo - llegó saltando el conejito negro, el hombre le hizo firmar y le entregó una caja con una computadora gamer - Woaaaa para jugar minecraft - sonrió.

Mientras Taehyung apenas llegaba.

- ¡Tae Tae gracias! - este asintió.

- ¿por qué le haz dado eso?

- Ah porque un día fuimos al mall - lo interrumpió el peli negro.

- ¡Nuestra primera cita!

- Y lo vi mirar la computadora, realmente la quería y tengo el dinero para comprarsela - subió los hombros - y lo hice.

El ojo izquierdo de Seokjin temblaba...

- ¿Cita?

- ¡Sí, de mi omega y su alfa - entonces Jungkook se dio cuenta de lo que dijo y tapó su boquita - perdón TaeTae.

- Descuida, no hicimos nada malo.

Seokjin simplemente se fue del sitio un poco desconcertado, su pequeño hermanito estaba creciendo y no habría manera de pararlo.

Por otro lado Jimin estaba acurrucado a Yoongi en uno de las sillas colgantes que habían puesto en un longue.

- Jiminnie - lo llamó - ¿Estás cómodo?

Este miro hacia arriba y asintió sonriendo.

- ¿y tu? - preguntó de vuelta recibiendo una caricia del tigre en la mejilla junto a un beso en la cabeza.

- Mucho - lo apretujo más a él haciendo que sus mejillas se apretaran y sus labios formarán un piquito - que bonito pollito

- ¡Lo soy! - lo miro - y tú, eres un bonito gatito... ¡Miauuu!

- es Raaaawrrrr - sacó un ronco gruñido que hizo a Jimin temblar y bajar la colita emplumada de su omega.

- ¡No gruñas! - le tapó la boca con sus pequeñas y menudas manitas - me espanta - lo regañó.

El tigre sonrió burlon mientras sacaba las garras de su mano y las pasaba por la tierna piel del pollito.

- ¡Sería una pena si te como ahora! - le dijo sin doble intención claro está.

- Shhh eso aquí no se puede hacer - lo reto - hagamoslo cuando mi estro llegue

El tigre entendiendo a lo que se refería empezó a reír, el no se refería a esa manera de comer pero no se negó.

- Que atrevido omega me ha dado la luna - lo apretujo aún más sacándole el aire al pollito.

- ¿No pensabas en comerme... O si?

- Desgarraro y sangre no de esa manera...

- Aun así prefiero la segunda - sonrió - ¡Solo contigo la segunda!

- Eso es excelente - besó su nariz pequeña en forma de flecha - eso es ser un buen y leal omega - el tigre golpeó su pecho orgulloso - debiste venir a mi antes...

-¿por qué el omega siempre tiene que buscar al alfa?

- No lo sé...

La luna que miraba desde arriba solo golpeó su cara y negó con los ojos en blanco.

Yoongi y su animal no tenían remedio alguno, eran igual que en su vida anterior, perezosos y sobre todo orgullosos además de tercos como el sol.

Pero el dios tempo no perdona nada y de eso se iba a enterar.