Harry y Mary: Héroes de dos mundos[Terminada]

capítulo 6 Una rápida visita al tío Hades

Harry Potter pertenece a JK Rowling.

Percy Jackson pertenece a Rick Riordan.

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06: Una rápida visita al tío Hades

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Percy, Annabeth, Lou, Harry y Mary, empacaron aquello que creían les haría falta: una muda de ropa cada uno y sus espadas personales. Quirón les hizo entrega de varios cientos de billetes de cien dólares, además de varios Dracmas para las transacciones no mortales (en un lado tenían el rostro de algún Olímpico y en el otro tenían el Empire State), Chiron le entregó a Annabeth una caja con néctar y ambrosia para las posibles heridas que llegaran a tener, tras eso fueron a una colina cercana, donde los esperaba el propio Chiron, no tenían ni idea de cómo había llegado tan rápido a ese lugar, allí estaba el chofer que los llevaría.

― ¡Hey! ―dijo una voz ―Ustedes sí que son veloces ―se sorprendieron al ver a Luke, quien traía su maleta y estaba listo para la aventura. Mary sonrió y soltó una hoja al viento, la cual fue consumida por fuego carmesí, era un método de comunicación mágico que le fue enseñado por Lou, el fuego no consumiría la carta, sino que la transportaría al hogar Potter, para avisar a James y a Lily sobre la aventura.

― "Nike, ayúdanos en este viaje para volver con vida y dar con el Rayo"―atinó a susurrar Harry, nadie notó como Luke se puso tenso por un instante, el propio Luke entregó a todos unos zapatos deportivos, para luego pronunciar Maia y hacer que unas alas surgieran.

―Los ayudarán a ser más veloces o incluso a volar ―dijo Luke sonriente ―Recuerda Percy, los dioses están mirándote, tienes que demostrar que Poseidón es inocente, es tu deber como su hijo, cuídenlo y tengan cuidado ―los demás asintieron y fueron hacía la camioneta.

―Entreguen los zapatos ―ordenó Lou con el ceño fruncido, tras subir y todos así lo hicieron, extrañados ―Algo está mal, pues solo un hijo de Hermes puede usarlos.

― ¿Dices que tenía malas intenciones? ―preguntó Annabeth molesta.

―Puede que tuviera buenas intenciones, pero no seremos capaces de usarlas e incluso podríamos lastimarnos ―dijo Lou, subieron al autobús y más pronto que tarde llegaron a la civilización, a la ciudad de Nueva York como tal, más pronto que tarde todo se hizo más... común para Percy, Harry, Mary y Lou, pero vieron subir a tres ancianas y notaron como Percy se ponía rígido ― ¿Te encuentras bien? ―susurró.

―No ―dijo y miró a las ancianas. ―Es... son la Sra. Dods, la creí muerta.

―Los monstruos tienen la mala suerte de que la niebla de mi madre los afecta a todos igual ―susurró Lou con una sonrisa ―No es difícil saber quién es y quien no, una criatura mitológica, solo hace falta saber si son buenas o malas ―todos asintieron y se prepararon con sus espadas.

― "Percy, toma mi sombrero" ―dijo Annabeth, entregándoselo ―"Probablemente te quieran a ti" ―las tres ancianas, dieron excusas y comenzaron a ir por el pasillo― "Eres hijo de uno de los tres grandes"―Lou hizo un movimiento de mano, manipuló la magia.

―Para todos, nos detuvimos y nosotros nos bajamos ―avisó Lou, mientras hacía círculos con el dedo índice, las ancianas se transformaron en Arpías y se arrojaron contra ellos, pero Lou se puso de pie y golpeó a una de ellas en el pecho, haciendo que explotara en fuegos artificiales rojos.

Annabeth se agachó, esquivando a otra y Percy le atravesó la espalda con su espada, Annabeth la decapitó.

Harry y Mary lanzaron cortes y estocadas con gran precisión, acabando con la tercera, el grupo se bajó tan rápidamente como pudo, abrazando sus mochilas, antes de que el autobús explotara por un rayo, tras eso tomaron un camino, hasta un vivero donde fueron atendidos por una mujer que se hizo llamar Tía Me, entraron y una mujer los atendió, Annabeth dijo que eran huérfanos, amigos de toda la vida y que habían estado caminando por horas sin saber realmente donde estaban, ella les dio algo de té y por un instante Annabeth y Harry miraron las estatua, los... raros gnomos de Jardín, solo para que Annabeth uniera los puntos y revelara que se trataba de Medusa, pero ella dijo que no lo era, aun así, reveló su piel escamosa y su cabello de serpientes, era Euríale, una de las hermanas de Medusa y (para colmo) una de las inmortales, la cual se lanzó contra Annabeth pues "las Gorgonas tenían un asunto pendiente con Atenea"