Capítulo 13: Dos años después.

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La relación entre Jimin y Jungkook había sido como un balde de agua fría para Natalie, pese a que había sido ella misma quién les había juntado de alguna forma, eso tras pedirle al bailarín que sedujera  al cantante. Claro, en espera que este se ganara la confianza de aquel y pudiera obtener información de Taehyung, aquella no se creía eso de que Jungkook no supiera nada. Aun que no tenía prueba que le respaldaran. 

Jimin efectivamente se había ganado la confianza de Jungkook, más nunca pensó que eso sería el empujón que faltaba para que ambos comenzaran una relación. Una relación secreta para el mundo, más no para el entorno cercano. Entorno al que ella estaba excluida. Había sido por accidente el que ella se enterara de la escandalosa situación, mismo secreto que le tenía debatiéndose sobre si debía de hacerla publica o no. Desde el comienzo quería una razón para joder a Jungkook y que aquel fuera protagonista de una relación homosexual, parecía presentarse a brazos abiertos. Ya lograba imaginar las criticas y con ello la carrera en picada. 

Sonrió, mientras su cabeza imaginaba en los posibles escenarios; mismos que de algún modo le hacían dudar. ¿Quería joder también a Jimin? ¿Qué tanto le importaba aquél? desde el comienzo le consideró como un juguete. Uno al que manejaba a su antojo y el bailarín lo sabía, pero desde que aquel estaba más cercano a Jungkook, el juego que les mantenía unidos parecía haberse roto de alguna forma. Quizás Jimin había abierto sus ojos y se había percatado  de la insana de esa relación, cosa que por puro orgullo Natalie parecía no querer dejar que sucediera. 

La gente solía quedarse del lado que les hiciera sentir más cómodos, más queridos, en este caso eso lo encontraba con el idol y no con Natalie. Sin embargo, el fantasma de Taehyung le hacia no estar del todo seguro. Ella lo sabía, y ella sin dudas lo planeaba utilizar a su favor. Fue así como se le ocurrió pedirle a Jimin que reuniera pruebas sobre Taehyung, claro, sin que Jungkook supiera. Esto pretendía ayudar a verificar sus sospechas y luego de ello ir por el idol desaparecido; más no regresarlo a la vida de Jungkook. El trato entonces, era, "me ayudas a encontrar a Taehyung y me encargo de que nunca más este cerca de Jungkook. "   literal, le estaba ofreciendo quitarle del camino y así Jimin seguiría con el camino libre sin ser su nueva relación la afectada.

Jimin parecía dudoso, pues no terminaba el convencer el poder fiarse de Natalie. Además, tampoco era que quisiera que la carrera de Jungkook se jodiera; porque estaba seguro que Natalie no iba a dejarle en paz, no si tenía la oportunidad de hacer alguna jugada extra. Eso pese a la promesa de la trainee de no lanzar misiles contra la carrera del cantante. ¿Se podía fiar de alguien que trataba a las personas como juguetes? quizás Lia era la respuesta. 

Lia parecía conocer suficiente a Natalie, y no de una forma que hiciera que aquella mantuviera lealtad con la trainee, si no que al revés. Aunque el hecho de que fuera hermana de Taemin, ¿le hacia un buen peón? la relación entre Natalie y Taemin había sido buena eso hasta que Lia se vio involucrada, desde entonces el idol no había vuelto a hablar con Natalie pese al encontrarse más de una vez en la empresa. Él simplemente pasaba de ella aún cuando ella hiciera típicos berrinches que ponía a su tío en apuros más el idol parecía no imputarse en el que parecía ser un secreto a voces. Natalie había sentenciado su relación con Taemin desde el momento que abofeteó a su hermana, nadie tocaba a su hermana. Taemin era especialmente cuidadoso con eso.

¿La respuesta sería entonces un "todos contra Natalie"?

Los meses pasaron, entonces se cumplieron dos años y cuatro meses desde la desaparición de Taehyung, eran entonces Jimin el que movía los hilos a su beneficio. 

La relación entre Jungkook y Jimin estaba mejor que nunca, casi no peleaban, Taehyung prácticamente no era tema de conversación y eso le traía tremenda tranquilidad al bailarín.  Natalie estaba cada vez más sola, al punto de que su tío había dejado de financiarle los caprichos y ella había tenido que empezar a buscar trabajo. Por primera vez era ella misma la que se estaba costeando su lujosa vida, más cuando se negaba a dejar el departamento que tenía en el mismo edificio en el que estaba el de Taehyung.  Habían rumores de que había regresado a ser una sasaeng, pero ya no del idol desaparecido, si no que de Jungkook.

Lia se había vuelto cercana al bailarín y también a Jungkook, aunque de cierto modo era una estrategia de ella en la doble vida que tenía. Por su parte, ella cada vez tenía un lazo más fuerte con Taehyung, lazo que por alguna razón Dieter había aceptado sin mucho problema. Pese a que a ratos dejaba escapar sus celos, momentos en los que ella aprovechaba para salir y seguir manteniendo su vida fuera de aquellas paredes que mantenían encerrado a Taehyung. La cercanía de Lia con Jimin había hecho que Taemin se animara a contratar al bailarín, aunque no de tiempo completo pues la lealtad de Jimin seguía con su pareja. 

Las cosas dentro de todo parecían regresar a la normalidad, eso por la excepción de que Taehyung seguía cautivo pero ahora con la rara sensación de estar siendo olvidado, desconociendo que su amado Jungkook estaba rehaciendo su vida con el bailarín que poco conocía. Verdad que Lia y Dieter habían decidido ocultarle, ella por miedo a que Taehyung hiciera una locura, y él por compasión, si es que se le podía llamar así. 

—Hemos descubierto algo. 
—¿Qué es? —Natalie le preguntó al investigador que había contratado para seguir a Jungkook, mismo que después de un año daba finalmente resultados. 
—Una dirección, Jungkook la frecuenta. Parece ser una oficina...
—¿Una oficina? 
—Sí, y no solo eso. Al parecer él es dueño de las cuatro plantas que conforman al edificio. 
—Bueno, Jungkook tiene dinero, es normal que haya podido comprar un edificio como ese.  —nada nuevo y ella comenzaba a perder esperanzas. 
—Pero el edificio no esta a su nombre, esta a nombre de un tal "Dieter". 
—¿Dieter? ¿Quién es Dieter? 
—No hay registros de él, aunque quizás Lia tenga alguna información.
—¿Lia? 
—Sí, cada cierto tiempo ella sale del edificio, pareciera que vive ahí. 
—¿No vive con Taemin? 
—Bueno, no la he seguido como tal. Estaba enfocado en seguir a Jungkook que estoy seguro esconde algo. 
—Desde ahora sigue también a Lia, si hay algún vinculo entre ellos quiero saberlo.
—De acuerdo, entonces quedamos en contacto.
—Sí, y gracias. Es una pista pequeña pero quizás el comienzo de otras.

Natalie al fin encontraba algo de paz, quizás su intuición no estaba tan equivocada. Aunque si sus sospechas eran ciertas tendría que buscarse otro trabajo, el costo del investigador y sus propios gastos le estaban pasando la cuenta; misma razón que le había hecho abandonar la empresa. Dejando de lado su sueño de debutar como idol.

El idol que desapareció.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora