Capítulo 28

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Estaba mareada y también agotada, no tenía la noción del tiempo.

Apenas lograba ver por dónde podía pasar sin tropezar o chocar con alguien. ¿Por cuánto tiempo había estado dando vueltas alrededor del piso? No lo sabía y tampoco le importaba mucho.

Ni siquiera había recordado el momento en el que se había separado de su amigo. La ultima vez que lo había visto había sido en el bar, le había invitado un par de tragos y como si nada decidió levantarse e irse, dejándolo solo. Suponía que se había despedido de él, pero seguía sin recordar mucho el instante de su separación.

Esperaba no haber sido grosera con él.

Se detuvo en una esquina ya que había escuchado una canción que le había llamado mucho la atención, recordaba haberla oído alguna vez ¿en dónde? Oh, bueno no importaba, ya estaba bailando.

Y bailar para ella era solo moverse de un lado a otro, llevaba su cuerpo de derecha a izquierda, ni lento ni rápido, lo estable. Aunque bueno, tampoco lograba sentir gran cosa, más que solo las vibraciones de las bocinas, el sonido retumbaba en sus oídos pero no era molesto, la relajaba, cual pluma cayendo a un infinito vacío.

¿Qué había tomado? ¿Por qué se sentía así si solo eran cervezas? Sea lo que haya sido, le había gustado.

Entonces, un chico se le acercó, con dos botellas en mano, recién abiertas.

--- Hey, ¿quieres compañía?

_(t/n)_ volteó a verlo, no estaba tan mal.

Su cabello estaba un poco desaliñado, apenas le comenzaba a crecer la barba. Cabello castaño y ojos marrones. Su nariz no le gustaba, pero los hoyuelos formados al sonreír lo compensaban. Vestía una camisa azul, con dos botones sin usar. 

--- Claro, ¿por qué no? -recibió su botella con una sonrisa

--- Soy Alan -le dio un beso en su mejilla-. ¿Tu nombre es tan lindo como tu rostro?

--- ¿Solo el rostro? -alzó una ceja- Soy Cameron

--- Pronto lo descubriremos -se acercó a ella, dejando de lado la botella

Bucky ocultaba la cara entre sus manos. Estaba desesperado, no sabía a dónde se la habían podido llevar. Demonios, ella había tenido razón, no debió dejarla sola. ¡Nunca!

Steve se acercó a él, tenía el casco puesto nuevamente. No quería proponerle la única solución -rápida- que se le ocurría en ese momento, pues tendría que acceder a ser arrestado por SHIELD para que le brindaran su ayuda.

Se sentó al lado de él.

--- Podríamos... Podría llamar a la base y hacer una búsqueda

--- ¿Y eso qué implicaría?

--- Arrestarte. También podría llamar a Natasha, pero está en Budapest con Clint. Reviviendo recuerdos y...

--- De acuerdo -lo dijo sin pensar-. Llama a la base, haremos lo que haga falta para rescatarla de... de... -carraspeó

--- ¿Estás seguro de que se la llevaron? -alzó una ceja

Tenía razón, debía comprobarlo antes de actuar. ¿Qué había sucedido antes de que llegara? ¿Qué le había dicho por última vez?

"Y no tengo porqué decirte, haz... lo que quieras con tu estúpido plan".

Era similar a un escupitajo por parte de ella. Hubiera preferido un golpe -bueno, quizás no-. La había hecho sentir mal, lo supo desde que comenzó a decirle su idea de protección, una idea demasiado imbécil... sí, ella tenía razón. No quería decírselo pero... quería separarse de ella para que se acostumbrara, para que ambos se acostumbraran. Así, no le sería doloroso despedirse de _(t/n)_ en el momento en el que se fuera... creía que el sentimiento era mutuo, por lo que creyó que también le serviría.

Y había fallado. Incluso estando a una distancia relativamente cerca, quería estar a su lado. Quería simplemente ir por ella y olvidarse de todo eso. Olvidarse de SHIELD, de HYDRA, de Karpov, de Steve, de... todo. Incluso de él y su horrible pasado.

Sintió un escalofrío recorrerle la espalda y su brazo. Fue entonces cuando lo comprendió y se armó de valor. La buscaría sin importar qué.

Ella en cambio, necesitaba ayuda, solo que aún no lo sabía.

Ella y Alan salieron del lugar tomados de las manos, aunque el agarre lo había forzado él. Se dirigían a su departamento que estaba a un par de cuadras, qué conveniente.

"¡¿Qué estás haciendo?! ¡Regresa! ¡Pide ayuda! ¡Debes estar con Bucky! ¡Quieres estar con él!".

Esa frase resonaba en su cabeza una y otra vez, sin parar. Había comenzado a oírla desde que Alan se le había acercado. Tal vez su mente reaccionaba, pero su cuerpo no. Necesitaba escapar de ahí, esto no terminaría bien.

Abrió la puerta principal del edificio y la invitó a pasar, acto seguido Reeves ingresó y luego él, cerrando la puerta detrás de sí y esta vez caminando en dirección al elevador.

Barnes había visto justo el momento en el que vio a _(t/n)_ desaparecer.

Alan seleccionó el cuarto piso y esperaron, matando el tiempo besándose. Alan se excitaba cada vez más y más, llevando las manos de ella desde su pecho hasta su entrepierna. Y ella... solo sentía como su lengua se movía de un lado a otro, gastando saliva; sin ritmo ni gracia, sin sentimiento alguno. Comenzaba a aburrirse, lo que significaba que estaba un poco más consciente.

No supo cómo ni cuándo, pero ya se encontraba acostada sobre la cama del chico, mismo que se quitaba la playera.

--- Oh Cameron... eres tan sexy... -la levantó ligeramente y le quitó la playera

No respondió. Solo entrelazo las piernas a su cadera y se acercó a darle un beso.

Alan comenzó a tocarle los pechos mientras llevaba sus labios a los de ella, posteriormente a su cuello y regresaba. 

Simuló embestirla, rozado su erección que se podía sentir fuera de su pantalón a su parte íntima.

¿En serio quería hacerlo? Es decir, quizás lo habría hecho con Harry... ¿pero con un desconocido? Había caído bajo. Rió por eso.

--- ¿Te gusta? -un hilo de saliva había quedado entre sus bocas

--- Sí... -suspiró

--- Cameron... déjame hacerlo... -puso sus manos sobre el cierre de su pantalón, se lo quitaría

--- Sí... hazlo... házmelo... Bucky...

Y en ese momento, se detuvo. Se separó de ella sorprendido.

--- ¿Bucky? ¿Quién demonios es Bucky?

James lo había golpeado en la cabeza con el escudo de Steve, para ellos había sido un golpe ligero, sin embargo para Alan... lo había dejado inconsciente.

_(t/n)_ levantó su cabeza para encontrarse a los dos sujetos.

--- ¿Los hombres de negro? -preguntó

Bucky no dijo nada, solo se acercó a ella lentamente; una vez que estuvo al lado de ella, se agachó de tal manera que sus ojos quedaran -casi- a la misma altura.

Suspiró. De seguro estaría enojado. Ya lo venía venir... pero se lo merecía, después de todo no había obedecido a sus ordenes.

--- Solo dilo -estaba esperándolo

--- Tú... -aclaró su garganta- ...¿te encuentras bien?

Bien, no esperaba eso. O quizás sí, se trataba de Bucky, su... compañero.

--- Me siento rara. Creo que ingerí alguna droga, es lo más probable

--- Maldición. ¿Recuerdas qué tomaste?

Negó con la cabeza, misma que comenzaba a dolerle.

--- Bien... uh... -estaba nervioso

No quería saber qué tendría que hacer en caso de que fuera una sobredosis, aunque pensándolo bien... ya habría tenido un ataque. Agradecía al cielo por eso.

--- Descuida. Estaré bien. Solo... se me pasará

Apretó ligeramente los labios.

En cambio Rogers, no sabía qué pensar. Esperaría a ver qué ocurriría con este par.

Te veo [Bucky Barnes]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora