14-No leer

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Capítulo XIV.

Alexandro

Después de la clase más aburrida de toda mi existencia salí rápidamente del salón para no encontrarme con nadie que interrumpiera mi escape; quería salir por estos malditos nervios inexplicables ¡Es horrible! No lo soporto, ni siquiera sé la razón por la que me está sucediendo esto, ¡Me estoy volviendo loco! La sensación es parecida a la que tuve cuando me transformé, solo que esta no tiene explicación y es más intensa. Yo sé que no tiene nada que ver con lo que sucedió el fin de semana porque por eso siento culpa y vergüenza no nervios y ansiedad.

Solo quiero llegar a casa y entrenar para olvidarme de lo que a pasado; a pesar de que estoy cansado esa es la única manera en la que siento que me libero del estrés y la preocupación. Solo quiero estar tranquilo.

Un momento... pero... ¿qué demo...?

¿¡Qué es ese olor tan exquisito!?

Huele a arándanos... pino seco y... ¿menta?

¡MI FAVORITO!

¡¡¡Es mi mate!!!

¡Debemos encontrarla idiota!, ¡Es nuestra mate!

—¡Deja de llamarme idiota! ¡Joder! A veces no te soporto.

Si serás... ¡Idiota! Yo tampoco elegí estar contigo así que ¡Cállate!

—¡Cállate tú imbécil!

¡Búscala ya!... discutimos luego.

~Corta conexión~

Luego de tener una amistosa charla con mi querido y amigable lobo, sin importarme la mirada de todos los estudiantes que se encuentran a mi alrededor, salgo corriendo en dirección del irresistible olor que desprende mi mate.

Me detengo abruptamente cuando el olor se hace más fuerte y veo a una chica que parece alterada buscando algo, o mejor dicho... a alguien. Esa chica que conozco tan bien se percata de mi presencia y ambos quedamos perplejos.

Élla... élla es mi mate, no hay duda. En el pasillo no hay nadie más que nosotros dos y estoy seguro de que esta chica es la portadora de tan exquisito olor, élla es un lobo como yo, huele como yo. Es extraño, es como una combinación de mis olores favoritos pero también tiene un olor idéntico al mio, un olor que la identifica como loba.

Debo hacer algo para romper este silencio y más si es con élla.

Doy un paso adelante pero élla retrocede, así que decido hacer las cosas más claras.

—Mate...

Digo lo más dulce que puedo y le muestro una tierna sonrisa para que sepa que no hay problema alguno, que todo está bien, porque su rostro lo único que refleja es temor y vergüenza.

Mi mate intenta hablar pero se le traban las palabras y como alma que lleva el diablo sale corriendo a toda velocidad hacia la salida del instituto, no me lo pienso dos veces y empiezo a correr también, gritando a todo pulmón.

—¡¡¡Espera!!!, ¡Oye!, ¡¡¡Detente!!! ¿¡Por qué corres!?

Pero es inútil, élla no se detiene e incluso acelera el paso. Cuando llego a la entrada del instituto, visualizo una Jeep negra y por el olor sé perfectamente que es la Jeep del padre de mi mate... el padre de Jennifer. No puedo detenerla, sería todo un desastre ir para allá, no me queda de otra que dejarla ir.

A Través De Tu Alma: GALE (Nueva Versión En Proceso)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora