Celos... Celos... Celos.... Celos y más celos.
Tom era un hombre muy celoso, nunca entendí por qué. Pero no era celoso con todos, si estaba con Evans, Hemsworth o Pratt no había problemas... Su problema era con Holland, era muy cercana a él y Tom cada vez que nos veía su carácter cambiaba muchísimo.
Estaba algo cansada de eso, así que decidí ignorarlo y evitarlo lo más que pudiera todo el día. Estábamos todo en casa de Hemsworth, en Australia, de mini vacaciones. Estaba en la habitación que compartía con Tom, escuchando música, no quería cruzarlo, estaba muy molesta.
De repente la puerta se abrió, era Tom que entraba algo agitado.
Te he estado buscando por todos lados -dijo al verme, cerró la puerta tras él y se acercó a la cama-
Ya me encontraste -respondi seria, sin mirarlo, solo veía mi teléfono-
Porque me evitas? -senti en su voz un tono de tristeza y preocupación- has estado así conmigo todo el día, evitandome. Por qué?
Y me lo preguntas? -lo miré molesta- que no te das cuenta lo que haces? No puedes controlar tus estúpidos celos irracionales -me metí bajo las sábanas para evitar verlo-
-suspiro y trato de destaparme- amor por favor, no son celos irracionales, solo quiero cuidarte. Vamos cariño mírame.
-no deje nada, solo me quedé ahí quieta-
Por favor -escuche un susurro muy débil de su parte, sentí que se metió debajo de la sábana y me abrazó- no estés molesta conmigo, me mata que me ignores y me evites. Lo siento -suspiro y beso su nuca-
-mi cuerpo de estremeció al sentir su abrazo- Thomas, no tienes ningún motivo por el cual ponerte celoso. Acaso no confías en mí? -me di vuelta para mirarlo, pero me aleje un poco- es eso?
Que? No no claro que confío en ti -tomo mis mejillas y se acercó a mi, apoyando su frente con la mia- confío ciegamente en ti. Yo... Creo que en quien no confío es en mi -lo miré sin entender, el cerro los ojos y suspiro- no confío en mi capacidad de hacerte feliz... Escucha... Verte tan feliz con Holland hablando y riéndote me mata, saber que tienen tantas cosas en común, que sus fans aman lo bien que se ven juntos me aterra y me duele -abrió sus ojos y me miró, pude ver qué estaban comenzando a aguarse- solo pensar que podrías enamorarte de él, que tiene muchos años menos que yo, que tiene tu edad y que comparten tantas cosas, puede darte cosas que yo quizás no pueda, que me dejarías por él me vuelve loco, tengo miedo de perderte, porque sé que eres la mujer mas increíble que he conocido, y él también lo sabe -suspiro y volvió a cerrar sus ojos, haciendo que una lágrima cayera por su mejilla- eres lo mejor que me ha pasado, me has enseñado a vivir, me haces mejor persona con solo mirarme, haces que todo se detenga solo para que pueda observarte uno segundos más que el resto. No quiero perderte, porque si te pierdo a ti sé que me perderé a mí mismo. Pero también sé que te amo, que quiero verte felíz, que a pesar que seas mi todo, mi vida, que seas tan escencial para mí como el mismísimo aire -abrió sus ojos, estaban completamente empapados- si eres feliz con él solo prométeme que me lo dirás -lo último lo dijo en un susurro, como si le faltará el aire- que serás honesta conmigo. Prometo que te dejare ser felíz, aunque no sea a mi lado -suspiro- pero, si aún me quieres, si me perdonas, prometo hacer lo posible para hacerte feliz, para que entiendas que te amo como jamás creí que amaría a alguien. -me miró a los ojos- solo eso te pido... Se honesta conmigo, dime la verdad, eres feliz conmigo?
Tom... -susurre, a estas alturas yo también tenía los ojos empapados, jamás creí que su problema no era precisamente con Holland, sino con el mismo, había 14 años de diferencia entre él y yo, y eso siempre había sido su mayor inseguridad, que yo lo dejara por alguien más joven. Tomé sus mejillas y seque sus lágrimas con mis pulgares- ese es el problema? -acaricie su mejilla- tienes miedo de que te deje por Holland? -el me miró a los ojos y suspiro, asintiendo levemente, suspire- tengo que admitir que tengo muchas cosas en común con él, que nos llevamos muy bien, es un Tom increíble -el bajo la vista, inmediatamente tomé su mentón para que me mirara- pero no es mi Tom, no es el Tom que amo con locura, que me saca de mis casillas con sus celos -solte una leve risita- que al fin y al cabo debo decir que me encanta que me cele, pero no en exceso; que me mata con solo mirarme, que hace que mi piel se erice y me tiemblen las piernas cuando sonríe, que me hace volar cuando habla, ni hablar cuando canta. Que baila mejor que cualquiera a pesar de que tiene una novia con dos pies izquierdos -el soltó una leve risita- amo a ese Tom que cuando no puedo dormir toma algún libro de Shakespeare y comienza a leer con su sexy voz de locutor para que 2 minutos después terminemos haciendo cualquier cosa menos leer -me reí- existe un solo Tom al que amo y que amaré siempre -apoye mi frente con la suya- y ese es Thomas William Hiddleston, nadie más ocupará jamás su lugar. No me importa la diferencia de edad que haya entre nosotros amor, no me importa lo que piensen los demás respecto a eso, me importas tú, y solo tú -puse mi dedo en su pecho como apuntandolo- tu eres el hombre que amo de acuerdo? Así que deja de crear teorías tontas en esa cabezota llena de hermosos rulos -ambos reimos y el me miro- y... Siento haberte hecho pensar esas cosas mi amor -bese su frente-
El me pegó a mi cuerpo y nos besamos, fue un beso lento, dulce, lleno de amor, como si fuese el primero. El acariciaba mi espalda y yo su cuello. Pero tuvimos que separarnos un poco para respirar, no pude evitar sonreir.
Te amo tanto -susurro sobre mis labios y sonrio-
Yo igual -le di un beso corto en los labios- y respondiendo a tu pregunta... Me haces muy feliz, extremadamente feliz -lo volví a besar, está vez más apasionado, pero igual de lento y dulce-
Su lengua se metió a la fuerza en mi boca, no pude evitar soltar una risita en el beso. Se puso sobre mi y quitó mi blusa, me reí.
Dónde quedó el caballero de hace unos minutos? -me rei mirándolo y pasando mis brazos por su cuello-
-el se sonrojo un poco, lo que era muy raro, siempre era yo la que se sonrojaba- lo siento -beso mi cuello- es que te extraño mucho -beso mi escote- puedo? -me miró a los ojos, pasando su mano por toda mi espalda, haciéndome estremecer-
-lo acerque a mi y susurré sobre sus labios, de manera sexy pero al mismo tiempo dulce- hazme tuya mi rey -lo bese apasionadamente y abrí mis piernas para que se acomodara entre ellas, lo que no tardó en hacer-
Todo paso entre besos y caricias. Sus embestidas se sentían como estar en el cielo, lo hacía lento pero duro. Lo hicimos cerca de una hora y media y caímos rendidos en la cama.
Wow -dijo agitado y saliendo de mi, acostándose a mi lado- demasiado tiempo sin hacerte el amor -sonrio y cerro los ojos respirando agitado-
-me rei- si demasiado tiempo, como 2 meses no? -bese su pecho y me levanté y me puse mis bragas y la remera que él tenía puesta, ate mi cabello en una colita alta, mientras caminaba a la cama-
-se mordió el labio al verme- crees que nos escucharon? Gritaste mucho -se acomodo en la cama con los brazos detrás de la cabeza-
Eso es tu culpa - me metí en la cama y me senté en sus piernas acariciando su pecho- tu y tu enorme hombría siempre me hacen eso -ambos reimos y bese su pecho bajando hasta tu abdomen-
Ah sí? Culpa mía no? -acaricio mis piernas- no me importa, culpame de lo que gustes, lo seguiré haciendo -nos besamos un buen rato, un beso dulce, tierno pero con pasion-
Te amo -dijimos los dos al mismo tiempo y nos reímos, me acosté a su lado y lo abrace-
Dejaras de mirar mal a Tom mi amor? -mirandolo a los ojos, me acosté boca abajo en la cama y me acomode sobre mis codos-
Lo intentaré -me miró y sonrió, se levantó, se puso su boxer y se volvió a acostar- solo porque ahora me siento un poco mas seguro, que me amas y que alenos te hago un poquito feliz -hizo la señal con las manos-
No, un poquito no -mirandolo- me haces muy feliz, extremadamente feliz.
Nos quedamos mimandonos, hasta que nos llamaron para pasar la noche en la playa... Observando la lluvia de meteoritos...
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