Llevabas peleada con Tom unos días, habían discutido por celos, ambos eran muy celosos, y a veces llevaba a discuciones sin sentido. Pero está vez se había extendido varios días...
Saliste de tu trabajo y al doblar en la esquina encontraste a Tom recostado en la pared, vestido casi de incógnito.
Demonios! -mirandolo- que rayos haces ahí? Acaso planeas darme un infarto? -dijiste molesta y golpeaste su brazo-
Para nada -sonrio un poco al escucharte- quería verte -tomo tus muñecas para que dejaras de golpearlo- basta ya -te jalo hacia él y te miro a los ojos- acaso no me extrañaste?
Y por eso tenías que esconderte como ladrón en el callejón? -empujaste un poco para alejarte- creí que habías dicho que no querías verme más
-al escuchar eso sí tío como su corazón se estrujó en su pecho- lo siento mucho, hablé por demás y sin pensar princesa, lo siento -se acercó un poco y beso tu mano- te extraño, esa es la verdad. Te necesito de vuelta.
Tom -suspiraste, la verdad era que lo extrañabas, que lo necesitabas y tenías que admitir que tú también habías tenido la culpa- yo también lo siento -lo abrazaste y undiste tu cara en su cuello- también fue mi culpa -sonreiste- me acompañas a casa?
Claro mi amor -acariciando tu espalda- déjame llevarte a casa -beso tu cabeza y comenzaron a caminar-
Llegaron a tu casa y entraron, se sentaron en el sofá para hablar.
Sabes... Yo lamento haberme portado como una idiota -suspiraste y lo miraste- sabes que soy celosa, y Kat hace que sea aún peot
Lo sé, lo sé, yo también lo soy, no puedo culparte por eso -me acerco un poco y tomo tus manos y las beso- pero sabes que tu eres la única para mí, y estoy seguro de que ella lo hizo a propósito, sabía que llevábamos un tiempo sin vernos y aprovecho para que tú te molestas conmigo
Y funcionó -suspiraste pesadamente y te recostaste en el sofá- soy tan idiota- cerraste los ojos pensando-
No importa mi amor -aprovecho para besar tu cuello- ya pasó si? No quiero volver a separarme de ti... Además, nadie siente celos de una persona a la que no le importas.
Pasaron la noche así, entre mimos, besos y la terminaron de la mejor manera, dándose amor el uno al otro, amandose y prometiendose un amor que sabía que sería para siempre.