Emm
Ahí me quedé, puesta en el pasillo después de haberle plantado cara a ese gilipollas. ¿Quién se creía que era? Primero me cierra la puerta cuando voy a entrar cargada de maletas y ahora intenta ofenderme. Desde luego no pienso entrar en su juego, no pienso ser una más a la que cree que puede llevar a la cama, sé de sobra cómo funcionan los tipos como él, lo sé por mi hermano Oliver, se parecen demasiado en la actitud y su forma de ser, y desde luego no es el tipo de chico que quiero cerca.
Cojo mi bolsa de basura y me voy a tirarla. Cuando regreso a mi habitación son las nueve de la noche, tengo que cenar, y no tengo nada de cena, absolutamente nada, la nevera está vacía, se me olvidó por completo hacer la compra. Mi idea era que nada más darme las llaves del apartamento hiciese una limpieza a fondo rápida y después me iría a comprar, no contaba con que me tocaría estar en una habitación de hotel, lloraría durante más de dos horas y después un maleducado me sorprendería en el pasillo. Cuando decido bajar de mi nube de pensamientos caigo en la cuenta de que estoy en un hotel, seguro que tiene restaurante y puedo conseguir algo de cena. Cojo mi monedero y me dirijo a la zona de abajo.
Para mi suerte el restaurante del hotel está abierto, y bastante lleno, más de lo que pensaba dado que aquí en Inglaterra cenan pronto. Hay barra libre para coger lo que quiera, me decido por un bocadillo y un refresco. Cuando llego a la barra para que me cobre la cena me atiende un camarero joven, muy educado y amable, le pido la comida para llevar. Cuando regresa creo que ha notado mi cara de estrés y desesperación, así que decide empezar una conversación.
-Qué, ¿Muy estresada con la carrera? -Dice sonriendo y con un tono agradable.
-Más bien con la mala organización de la residencia, me he quedado sin apartamento. -Le contesto, la verdad que es muy guapo y amable, y no me viene mal hacer amigos.
-Ya he oído cosas por ahí, espero que lo solucionéis pronto, y te sientas cómoda aquí, aunque no me importa para nada que te quedes en este hotel, nunca viene mal tener a gente agradable por aquí. -Se echa a reír, mis coloretes deben de estar rojos como un tomate. Seguidamente me da la cena y me dice el precio.
-Creo que me quedaré mucho por aquí, dudo mucho que me acaben dando mi apartamento, así que me tendré que conformar con esa habitación. -Sonrío mientras le doy el dinero- Mira que vaya todo correcto, aún no estoy acostumbrada al cambio de moneda. -Y es verdad, cada vez que he venido a este país ha sido con mis padres, por tanto, no domino muy bien las monedas aún, ya que rara vez he tenido que pagar yo sola.
-Todo correcto, que aproveche la cena, por cierto, me llamo Lucas, un gusto.
-Gracias, encantada, me llamo Emm. -Seguidamente cojo la cena y me voy a mi cuarto.
Cuando estoy en la habitación extiendo un mantel que he traído en una pequeña mesa redonda, me dispongo a cenar mientras veo youtube en mi tablet y hablo con mi familia por Whatsapp, le mando un mensaje a Daniel, pero no me responde. Acabada la cena, me lavo la cara, los dientes y me hago una trenza, me meto en la cama y dejo la tablet, pongo una alarma para las ocho, son ya las once y media de la noche, quiero descansar bien para que mañana me cunda el día.
***Holaa :), espero que os vayan gustando estos capítulos, voy a ir subiendo uno cada día. Ya sabéis que podéis dejarme un comentario con las cosas a mejorar o que queréis que pase. Muchas gracias por llegar hasta aquí, mañana más y mejor.***
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JUSTO A TIEMPO
Teen FictionEmm, es una chica que acaba de dejar España para poder realizar las prácticas de su carrera en Leeds. Todo iba sobre ruedas, tenía unas amigas increíbles, un novio fantástico y una familia, que por fin estaba feliz, hasta que el destino decidió jugá...