Tres meses después
LeoTres meses han pasado ya después de que quise terminar con Jeisen.
En tres meses nuestra relación solo ha ido de subida, solo me queda decir que es el mejor novio del mundo, claro que no es como que halla tenido mas novios antes de el, pero es un chico increible.
Mati y Dean se volvieron novios hace un mes y también están de maravilla, no se cómo hace Mati para sentirse tan seguro en su relación, quisiera tanto ser como el.
Elian al parecer ya está aceptando que no siento nada por el, pero sigue mirando a Jeisen con resentimiento.
Andy... Bueno, el solo no puede evitar estar enamorado de Elian, aún después de lo que pasó, su corazón solo sigue latiendo más y más por el.
Al parecer Vann, nuestra fiel amiga de cabello morado al fin está logrando llamar la atención de Jeff, por lo que nos ha contado, ya han salido varias veces juntos y han progresado bastante.
Unas manos se posaron en mi cintura, haciendome saltar.
—en qué piensas bebé? - sonreí al escuchar su voz.
—nada, en ti, en mi... En nosotros.-dije sonriendo y lo sentí sonreír.
—me parece genial. - pasó sus brazos rodeandome por completo apoyando su barbilla en mi hombro.-te he dicho lo hermoso que eres?
—mmm, hoy no. - dije jugando.
—pues eres el chico mas hermoso que he visto en toda mi vida. - me tomó de la cintura girandome para encontrarme con su rostro sonriente.
—tu eres el chico mas guapo y genial que yo he conocido.
—te amo, Leo. - susurró sobre mis labios a lo que sonreí tontamente.
—yo te amo más, mucho más, tanto que no me alcanzaría la vida para demostrartelo.
—me encantas.
Posó sus labios sobre los míos formando uno de esos besos tiernos que tanto me encantaban.
—oye, te compré algo.-dijo separandose de mi.
—ah si? Sabes que no tienes que hacer esas cosas, amor.
—ya, pero quiero hacerlo.
Dejó un beso en mi mejilla y entró a su cuarto, volviendo de inmediato.
—ten. - me entregó una pequeña bolsa de regalo color azul.-abrelo.
—a ver...
Metí mi mano en la bolsa sacando algo que venía envuelto el papel de regalo.
Reí y empecé a romperlo, cuando lo logré, me encontré con un paquetito cos dos brillos labiales, uno de fresa y otro de caramelo.
—Jeiii. - reí abrazandolo.
Desde que usé brillo labial frente a el, se ha vuelto adicto a eso, es el tercer paquete de brillos que me regala.
—te gustan?
—me encantan!
—bueno, pero hay algo mas ahí.
—a ver... - metí la mano sacando otra pequeña cajita, edta venía suelta, así que solo la abrí. - Jeisen... Q-qué...
—te gusta?
—Jei, yo... No puedo...
—no me digas que no puedes aceptarlo, he ahorrado mucho ñara comprartelo. - me sonrió dulcemente.