Capítulo 23: Carlos Rubio y, ¿cárcel?

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Emilia mordía sus uñas con nerviosismo- ¿ya llamaste?

Claudio asintió- la nana se encargará de ellos hoy- dijo cogiendo su mano- deja de morderte las uñas.

Emilia negó- está a punto de nacer mi sobrino.

Claudio sacó una sonrisa y besó su mejilla- te ves tan hermosa así.

Ulises separó a su hermana- explícame- dijo mirándolo- explícame por qué no debo partirte la jeta aquí mismo.

Emilia rodó los ojos- está a punto de nacer tu sobrino Ulises- dijo molesta- deja de hablar así a mi esposo.

Ulises negó- explícame.

Claudio asintió- te juro, por mi familia que no sé nada- dijo serio- te lo juro Ulises, no sería capaz de quitarles la empresa, son mi familia- dijo sincero- estoy casado con Emilia y nunca la dañaría lo sabés Ulises- dijo mirándolo a los ojos- fue una trampa estoy seguro- dijo poniéndose en pie- pienso averiguar quién está detrás de todo esto y te aseguro, que las cosas no se quedan así.

Ulises miró a su hermana y luego a su esposa- como nos estén engañando Claudio- dijo serio- me importa poco dejar a mi hermana viuda y a mis sobrinos sin padre- dijo cogiendo su brazo- confío en lo mucho que la amas.

León salió con una enorme sonrisa- ya está- dijo feliz- ya está aquí nuestro campeón.

Emilia lo abrazó con fuerza- ¿cuándo podemos subir a verla?

- Están limpiando a mi cachorro- dijo con una sonrisa- Machu está bastante bien, no fue muy complicado el parto.

- Gracias a Dios- dijo Ulises con una sonrisa- ¿a quién se parece?- preguntó curioso- por favor, sigue el gen Ruíz.

León negó- es todo un Rubio cuñado- dijo riendo.

Emilia rodó los ojos- ya mejor demos por perdido el gen Ruíz- dijo celosa- nuestros hijos son copias de nuestros esposos.

- Mis hijos son una mezcla de mi amada esposa y mía- dijo Ulises cogiendo la mano de Keiko- lástima que tus hijos sean idénticos a Claudio.

Emilia golpeó su hombro- tus hijos lo único que tienen a ti son tus ojos.

Ulises sacó una sonrisa- al menos tienen algo- dijo divertido.

- Quiero ahorcarte Ulises Ruíz- dijo molesta la mexicana.

- Ya no peleen- dijo Claudio con una sonrisa- podemos hacer otro bebé que sea igual a vos.

- Ya parecen guardería- dijo León riendo- ay Emilia, pinche loca- dijo al recibir un golpe de la mexicana- iré a ver a mi cachorro.

- Huye maldito- gritó Emilia molesta.

Claudio recibió una llamada, se apartó y atendió a la llamada, mientras Keiko y Emilia iban a comprar unas rosas para Machu y algún peluche para su sobrino, Ulises se encargó de ir a ver cómo seguía su padre.

Emilia se acercó a su esposo- ¿qué pasó?

Claudio negó- me llamó mi secretaria, debo cerrar un acuerdo- dijo serio- ¿te importa?

Emilia besó su mejilla- no te preocupes, te aviso cualquier cosa.

- Estamos en contacto- dijo besando su frente- te amo.

Emilia lo besó- te amo.

Después de un rato, subieron para ver a Machu y a su recién nacido sobrino- ¿dónde está mi bebé?- preguntó Emilia entrando con cuidado.

Machu estaba amamantando a su pequeño y sacó una sonrisa- es una copia de León- dijo rodando los ojos- yo lo llevé 9 meses.

Emilia se encogió de hombros- el universo hermanita.

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