Te Daría Todo

Capítulo 33: Familia Rota.

Claudio despertó apenado, hacía días que dormía en un cuarto de invitados, apenas cruzaba palabra con Emilia y se sentía avergonzado por el comportamiento que tuvo en el día del cumpleaños de su hija, por otro lado, odiaba cada vez más a Álvaro y sus constantes pleitos y burlas.

Entró a la cafetería con pesadez- buenos días- dijo besando su mejilla- ¿cómo te sentís?

Antonia suspiró- me costó dormir, pero bien- dijo con una sonrisa- gracias por venir el día de hoy Claudio.

- Vine para ver lo del bebé- dijo serio sentándose frente a ella- eso no lo olvides Antonia, ese bebé no tiene la culpa de nada.

- Este bebé necesita una familia Claudio- dijo molesta.

Claudio negó- no pienso discutir eso Antonia, yo tengo mi familia ya formado.

Antonia rodó los ojos- ¿como sigue tu divorcio?- preguntó cínicamente- los papeles llegaron a tu despacho, después de que los devolviste, llegaron ayer.

- Mañana es el citatorio- dijo molesto- no quiero divorciarme de mi esposa.

- Pero Claudio- cogió su mano- ¿tú con qué te quedarás?

- Se quedará con nuestros hijos en nuestra casa- dijo apenado- al fin de todo es el hogar que construimos para ellos, ellos están bien en nuestra casa.

- ¿Y tú?- preguntó curiosa- ¿ya no vivirás ahí?

Claudio negó- si llegamos a divorciarnos, debemos hacer vidas separadas.

- Claudio- dijo con una sonrisa- debes hacer algo, debes demostrarle que no vas a ceder tan rápido, tan fácil, debes demostrar lo mucho que te importa tu familia, lo mucho que ella te importa.

- ¿Qué debo hacer?

- Debes meter miedo, ya sé- dijo mirándolo- puedes poner una demanda, puedes intentar quedarte con los niños, así ella se dará cuenta que no es lo correcto- dijo con una sonrisa- el divorcio.

Claudio negó- eso no se lo puedo hacer, eso le haría más daño Antonia, no puedo.

- Haz el intento- dijo seria- ella verá lo que te importa todo esto, no lo dejes tan fácil, no dejes que tu familia se separe.

Claudio suspiró- ¿crees que funcione?- preguntó dudoso- no sé qué pensar, ella es la mujer de mi vida, la madre de mis hijos.

- Hazme caso Clau- dijo cogiendo su mano- es lo mejor que puedes hacer, ella volverá a estar contigo, volverán a estar juntos.

Antonia dejó a un Claudio pensativo, con ganas de destruir a su familia Antonia estaba sembrando la duda en el argentino, él estaba muy vulnerable, él no sabía qué hacer exactamente.

Emilia se acercó a Claudio, que recién entraba en la casa- por fin llegaste- dijo suspirando- ¿dónde fuiste?

Claudio rodó los ojos- a vos no te importa.

- Te estaba buscando.

- Tenía cosas que hacer- dijo caminando- ¿qué querés Emilia?

- Estaba preocupada- dijo sincera- los niños preguntaron por tí antes de irse.

- De eso quería hablar con vos- dijo mirando a su esposa- Emilia, quiero tener yo también a los niños, seguir acá.

Emilia suspiró- puedes verlos cuando quieras, esta seguirá siendo tu casa Claudio, pero debes entender que ellos estarán mejor acá, conmigo.

- Pienso luchar por ellos- le amenazó- querés el divorcio sólo para estar con Álvaro y no lo pienso permitir, no pienso dejarte las cosas fáciles.