Atrapando humo

El Sueño (Terapia Parte 2.1)

“No fue nada excepcional, el mismo sueño de siempre.”

“Platícamelo.”

“Estoy en una fiesta, hay mucha gente y están todos bailando, se que estoy buscando a alguien, pero no sé a quién, no puedo escuchar la música solamente siento la vibración de las bocinas en mi estómago, tengo un vaso amarillo en la mano, lo siento pesado y se que está lleno pero cada vez que intento tomarle está vacío. Camino por la fiesta y cada vez siento mas y mas ansiedad, entre que no encuentro a quien busco, la sensación de la vibración en mi estómago, las luces y la gente, siento que no puedo respirar así que empiezo a correr buscando la puerta de salida.

Cuando no la encuentro y empiezo a hiperventilar me doy cuenta de que todos me están volteando a ver y en ese momento lo veo, hasta el fondo, el letrero de salida así que corro entre la multitud que dejó de bailar para observarme. Es difícil pasar entre ellos porque no se mueven para dejarme pasar, ya casi llegando a la puerta el pasillo se vuelve mas angosto y es más difícil hacerme paso entre las personas, al final siento que me voy a desmayar, pero alguien me agarra de la mano y me jala a la salida.

Ya afuera está todo oscuro, no hay nada de luz y esta todo en silencio, me acuerdo de que necesito encontrar a alguien y empiezo a correr, intento gritar el nombre, pero no me sale voz… es raro porque no se a quien busco, no se el nombre, no lo recuerdo, pero es como si mi cuerpo sí y por eso intento gritarlo, pero no me sale ni un solo sonido. A estas alturas el corazón me esa latiendo demasiado rápido, siento como si mi cabeza latiera de igual manera, mi respiración es agitada y me empiezo a marear.

Tropiezo con algo y caigo al suelo, caigo sobre mis rodillas y mis manos y me quedo ahí, intentando controlar mis latidos, normalizar mi respiración, pero cada vez es más difícil, me desespero e intento gritar, pero sigo sin poder emitir sonido alguno. Pero como sea, se vacían mis pulmones y después respiro profundamente para poder levantarme, y de alguna manera lo logro, me pongo de pie como puedo y empiezo a caminar.

Es como si caminara por toda una eternidad, en la oscuridad, en el silencio, hasta que olvido porque estaba ahí en primer lugar y me detengo, no hay nada mas que mi propia respiración. Cierro los ojos y de un segundo a otro escucho un ruido estruendoso, que hace eco por todos lados, siento que mi cuerpo se agita y escucho vidrios rompiéndose por todos lados, me empieza a doler la cabeza y la nuca y caigo de golpe al suelo. Todo esta en silencio otra vez, apenas puedo mantener los ojos abiertos y ahí es cuando veo…”

“Cuando ves…. ¿a quién?”

Me quedo en silencio porque no estoy segura de las implicaciones que tendrá el decírselo.

“Joana, ¿Cuándo ves a quién?”

“Cuando veo… A Cris.”