You are my trouble

31.- Cuida lo que tienes.

-Así que...  

-Así que...  

-No entiendo.- Dijo Gemma a mi lado.  

Suspiré por décima vez aquella tarde.- Es simple, James y yo no estamos juntos, pero prometimos que tendríamos la mente abierta de nuevo.  

-Yo sé que él quiere abrirte y no es la mente.-Susurró Emily, pero lo escuché claramente.  

-¡Emily Vernon!- Reprochó Madeleine a su lado.  

Emily se sentó en la cama, enfrente de mi, y me guiñó un ojo. Se volteó hacia Made y sonrió.  

-No es nada que tú y Nicolas no hayan hecho antes.- Se encogió de hombros y la cara de la rubia tomó un color rojo fuerte.  

-Yo nunca... Él... Sigo siendo virgen... Digo... Si... No... ¡Me alteras los nervios, Emily!- Todas comenzamos a reírnos y Madeleine nos lanzó una almohada.- No entiendo porqué siempre me molestan con eso. Saben que nunca he llegado a hacer eso con él.  

-Es divertido ver tu lado más sensible.- Declaré.  

-Son las peores mejores amigas.  

-Nos amas.- Respondió la rojita a mi lado.- Aquí hay alguien que no nos ha contado nada sobre su ex novio australiano.  

Emily tomó la indirecta y en seguida agachó la cabeza.- Me llamó hace un par de dias. Dice que todo fue un error, él estaba "borracho y ella se le insinuó"- Hizo comillas en el aire.- Palabras textuales de alguna película barata que vio y tomó de excusa.  

-Nena, lo lamento tanto.- Le dije parándome en la cama de Made para abrazar a mi amiga.  

-Está bien, supongo que mi historia de amor no sería eterna como la de ustedes.  

-De hecho, yo...- Comenzó Gemma, pero yo la detuve.  

-Por amor al ángel no me digas que tú y Charlie terminaron, porque juro que hoy no hay helado para ustedes.  

-Decidimos que era mejor seguir como amigosi... Nos va bien así, no funcionamos como pareja. Tenemos futuros muy distintos y cada uno quiere seguir el suyo sin ataduras.  

-¿Y estás bien con eso?  

-Estoy contenta de que él empezará las prácticas de fútbol en un mes. No estoy triste por la ruptura, prometimos que volveríamos a estar juntos la próxima vez que supiéramos que ambos habíamos asentado cabeza.  

-Así que todas somos solteras menos la Sra. Virginidad.- Insinuó Emily.  

-Cállate.- Respondió Made molesta.  

-Vamos, rubia, tenemos una discoteca que espera por nosotras.
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James

-¿Has vuelto a hablar con Anabella?- Me preguntó Nicolas en el asiento del conductor.  

-No desde el hospital. Supongo que debo empezar desde cero con ella.  

-Amigo, sabes que ella te quiere todavía.  

-Yo no estaría tan seguro. Tatuaje y todo, le hice daño y no creo que un "Volvamos" sea suficiente.  

-Por supuesto que no es suficiente, pero si ella de verdad te quiere, te aceptará.  

-Eso espero...- Tomé mi celular y revisé el mensaje que recién llegaba.  
Desconocido:

Deberías cuidar lo que tienes porque nunca sabes cuando lo puedes perder (o cuando te lo pueden robar)  

-Nicolas, mira esto.- Él detuvo el auto en un semáforo y leyó.- ¿Reconoces el número?