You are my trouble

13.- Parejas.

Nota: Por favor, lean la nota al final del capítulo.

-Así que… Tú y Nicolas, ¿eh?- Le pregunté pícaramente a Madeleine. Desde que habían llegado, Made y Nicolas afirmaban no recordar nada de la noche anterior, sin embargo, Charlie y Gemma recordaban más ya que, según ellos, ir a tantas fiestas los ha “ayudado” a controlar un poco más la resaca.

-No sé, solo recuerdo que lo besé, de ahí en adelante todo es negro.

-¡Lo besaste!

-¡Madeleine, pícara!- Gritó Emily lanzándose sobre ella. La rubia, por reflejo, colocó las piernas en el aire golpeándola en el estómago. Ésta se sobó la barriga y se lanzó al colchón- Hija de…- Automáticamente le tapé la boca.

-Nada de groserías, señorita.

La pelirroja carraspeó y todas le prestamos atención.

-Yo si sé que pasó ayer.- La vimos expectantes esperando que nos diera una explicación lógica.- Madeleine y Nicolas fueron a comprar algo para tomar, se perdieron, no sé qué hacían antes de que llegáramos nosotros, pero al encontrarlos tenían los labios rojos, saquen sus conclusiones.

-¿Pero por qué dijiste que estábamos saliendo?

-Porque lo están, o algo así. Según ustedes decidieron ir poco a poco, pero son algo, ¿se entiende?

-No.- Dijimos las tres al mismo tiempo.

Una media hora después, Gemma había logrado explicarnos la relación que tenían ella y Charlie y Madeleine con Nicolas.

-No sé, pero tengo la necesidad de ir al cuarto de Nicolas.- Susurró Made un poco apenada.

-¿A hacer qué?- Emily levantó una ceja inquisidoramente.

-Algo, ya vengo.- En seguida salió del cuarto.

Madeleine

Me dirigí al cuarto de Nicolas con un sentimiento indescifrable dentro de mí, pero sabía que debía ir a esa habitación.

Abrí la puerta y lo encontré sentado en el costado de su cama, viendo hacia el suelo. Al escucharme entrar levantó la cabeza y, por un momento, pude jurar que sus ojos se iluminaron.

-Made, yo… Ayer…- Tartamudeando se veía muy tierno, adoraba que se volviera un niñito al hablarme.- Charlie me dijo lo que pasó ayer y… Lo lamento, no fue mi intención hacer nada de lo que hice ayer, no era yo, era el alcohol.- Hablaba rápido y entrecortaba las palabras.

-Nicolas…

-No, Madeleine, fue todo mi culpa, no debí querer ir a comprar bebidas.

-Nicolas…

-Nunca debí besarte, fui indecente y yo…

En un rápido movimiento me acerqué a él y no lo dejé terminar. Uní sus labios con los míos y lo callé con un beso dulce y suave, pero lento, como si tuviéramos todo el tiempo del mundo.

-Nicolas…- Dije separándome un poco de él.- El beso de ayer, el que recuerdo, fue sin los efectos del alcohol. Te besé y me besaste y, no sé porqué, sentía la necesidad de venir a tu cuarto, pero vine.

-Yo… Estoy en shock.- Respiró lentamente y parpadeó un par de veces.- ¿Iremos lento, no?

-Iremos lento.- Asentí y sin pena alguna lo volví a besar.

Me voy a arriesgar con Nicolas Werther.

Anabella  

Dejé a las chicas hablando en su cuarto y me fui al mío. Me lancé en la cama y leí mi libro hasta que sentí la puerta del cuarto crujir y a James entrando por ella. Se acostó a mi lado en la cama y encendió la televisión.