Tier Harribel siempre fue una mujer serena y pocas veces en su vida en realidad ella diría que estaba nerviosa o preocupada mas que nada se limitaría a recordar sus nada suaves entrenamientos con su mentor Yamamoto en aquella isla olvidada por la civilización donde se convirtió en amazona, fueron años de arduo entrenamiento cuando al final el viejo hombre la lanzo al mar atada a unas rocas pesadas en busca de que encontrase su armadura, su cosmo brillo y del abismo profundo la armadura del tiburón floto para ella desde ese día nunca mas volvió a sentirse débil y vulnerable aun a pesar de su maestro que gustaba de recordarle quien en ese hogar era el mas poderoso, por eso mismo el que ahora estuviera algo nerviosa y temerosa en realidad era algo que nunca espero , frente a ella en su trono la hermosa mujer y madre adoptiva del rubio yacía sentada mirándola de pies a cabeza, en cuanto Naruto salió del templo a recorrer el santuario y recordar sus andanzas de niño ella tomo asiento mientras la miraba de ese modo tan insistente mientras golpeaba sus dedos contra el descansador de su silla sin dejar de mirarla y si estaba algo asustada, era normal para una chica ponerse nerviosa en presencia de su futura suegra, ella casada con Naruto esa idea le causo un sonrojo tenue, pero si era normal que una chica se pusiera nerviosa en una situación así pero cuando tu posible suegra es una diosa las cosas son en verdad mucho pero mucho peores
-bueno, con solo verte se nota que eres hermosa y que de verdad quieres a mi Naru_chan- dijo la diosa de cabellos violáceos mientras Harribel solo le miraba
-si…lo quiero muchísimo Athena_sama- era honesta lo mas que podía y por eso mismo sabia que se ganaría la confianza de la diosa
-bien me gusta escucharte decir esas palabras pero tengo una duda que me gustaría me resolvieras- Harribel suspiro algo aliviada mientras sus "encantos" se balanceaban al ritmo de sus respiración
-lo que guste Athena_sama si esta en mi con gusto le responderé- estaba siendo lo mas honesta y dulce que podía y claro esperaba que eso le generara algunos puntos buenas en su favor
-¿Cómo diablos hiciste para tener semejantes cosas?- pregunto la diosa mientras señalaba el pecho de Harribel y semiraba a si misma antes de mirarla de nuevo no podía creerlo pero ella le superaba algo que se suponía no debería ser pero bueno hay de todo en el mundo no
-no hice nada mi señora son…bueno son solo cosa de la naturaleza crecieron de este tamaño solos- estaba apenada y mucho pero bueno estaba siendo honesta después de todo y eso debería ganarle alguna clase de cortesía de la diosa de ojos entrecerrados
-crecieron solo eh?... bien te creo (como son tan grandes me siento como una adolescente junto a ella)- dijo y pensó la diosa reencarnada mientras que Harribel solo asentía a sus palabras al parecer se había salvado al menos por ahora.Lejos de ahí en el camino que conducía al mencionado santuario una figura avanzaba a paso lento cargando en su espalda una caja de gran por no decir considerable tamaño mientras jalaba las correas por sobre sus hombros mientras caminaba maldiciendo en voz baja por la caja, después de todo se suponía que era una tradición no vestir la armadura a menos que se estuviera en "servicio" y por eso mismo tenia que transportare dentro de aquella caja y gracias a eso si que estaba sufriendo –lo juro esto debe ser cosa de sensei para seguir entrenándome- balbuceaba de mal humor mientras el viento sacudía su cabellera corta y larga que cubría por completo su cuello deteniéndose a la altura de sus hombros, respiraba algo con algo de cansancio quizá poseía acceso a una de las fuerzas mas grandiosas del mundo pero eso no significaba que tuviera la costumbre de cargar semejante caja en su espalda, solo por eso sabia que acabaría con un buen dolor de espalda y se preguntaba como era posible que la diosa no les llevara de regreso al santuario del mismo modo que les mando a sus sitios de entrenamiento,- quizá es parte del entrenamiento…si ha de ser eso y no pienso fallar- se dijo con convicción mientras aceleraba el paso enfilándose al santuario sin saber que de hecho la diosa no les llevo de regreso por el simple y sencillo hecho de que se le olvido ese detalle, bueno todo mundo comete errores no?; regresando al santuario nuestra hermosa deidad miraba a Harribel frente a ella mientras le preguntaba sobre el como conoció al rubio y claro el saber que el la llamo sirena cuando la conoció le hizo gracia y por eso mismo se preguntaba como se pondría el rubio de conocer a una sirena verdadera, bueno eso no importaba en este momento lo que importaba era la historia de Hallibel que claro tomo un giro inesperado
-y entonces Yachiru y yo decidimos compartir a Naruto_kun- la diosa le interrumpió con amabilidad preguntado quien era esa tal Yachiru y a que se refería con "compartirlo" a lo que una apenada mujer rubia le explico todo con lujo de detalles
-me estas diciendo que la hija de Kempachi y tu van a compartir a mi Naru_chan como su novio- preguntaba la incrédula diosa al tiempo que Harribel asentía algo apenada
-en efecto Athena_sama no queremos que Naruto_kun elija el nunca heriría a una de nosotras prefiriendo a una sobre otra y con tal de evitarnos el dolor preferiría alejarse y no deseamos eso por ello decidimos compartirlo- eran palabras justas y directas y por eso mismo la diosa reencarnada solo parpadeaba mientras procesaba lo que acaba de escuchar
-¡mi Naru_chan es un conquistador! Ohhh me muero de ganas por conocer a mi otra nuera dime como es anda es bonita dulce cuenta cuenta- Harribel parpadeo confundida, Yachiru en su casa estornudo con fuerza y la amazona del águila presente en ese momento se sentía bastante molesta e irritada
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Las Alas Del Universo
FanfictionIgnorado en favor de su hermano, nacido con una incapacidad para el uso del chakra y destinado a la grandeza, Nauto ha de emprender una lucha contra la maldad absoluta guiado por su corazon y acompañado por sus amigos, impulsado por un poder asombro...